~•Capítulo X:...libres, recordados y enamorados •~

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En las torres

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En las torres...

Volvamos a la situación en la que pasaba en la zona más alta del castillo: Seiji había llegado con intenciones de asesinar a la bestia convirtiéndolo en una cacería

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Volvamos a la situación en la que pasaba en la zona más alta del castillo: Seiji había llegado con intenciones de asesinar a la bestia convirtiéndolo en una cacería... Y la bestia a su vez no tenía muchas intensiones de defenderse o contraatacar, por lo cual tomó una opción que jamás había planteado hacerse en su vida: huir y camuflarse con el resto de las monstruosas decoraciones que se asemejaban a gigantescas gárgolas, aprovechando la oscuridad de la noche.
Tras recibir los roces de varios disparos que de milagro pudo esquivar; y por las leves heridas que tenía por los disparos y el estar desorientado por las muchas palabras hirientes contundentes por parte del cazador, pese a que ya tenía la referencia del Pelirrojo de que él era un manipulador experto; pudo camuflarse a las justas en una hilera de gárgolas.

– ¡Sal de donde estas, bestia asquerosa! – disparo a la cabeza de una gárgola – ¡Enfréntame! – disparó otra vez – ¡¿Que mierda pasa?!¡¿Estás muy asustado?!... ¿O muy enamorado?... – decía ácido, disparándole a otra de las gárgolas – ¡¿realmente crees que Eijirou querrá a un ser horrendo como tú?! ¡¿Entonces por qué crees que estamos aquí?! – disparo dos veces, una que rompió la cabeza de la gárgola faltante y otra que rozó el cuello a la bestia y lo hizo retroceder a un punto sin retorno del techo y le apuntó directamente a el – ¡ESTE ES TÚ FIN! – apunto, soltó el disparo; pero un empujón hizo que se desviará a una de las gárgolas que había atacado antes – ¿Qué?... – iba a disparar de nuevo, pero también alguien detrás de él volvió a hacer que lo desviará.

La razón= sin percatarse al estar concentrado en su cacería; cierto doncel pelirrojo con botas detrás del cazador lo tacleo y golpeaba la cola de la escopeta para que no le diera – ¡Seiji, detente! – el pelirrojo que apareció cual héroe de último momento (y quién por su estancia en el castillo, conocía variados atajos para varios lugares; incluso el techo) detuvo al peli morado de un empujón cuando intento levantarse y lo hizo caer definitivamente al suelo, aprovecho eso para tratar de arrebatarle la escopeta; pero la fuerza bruta de Seiji fue mayor a los intentos del Pelirrojo por detener el ataque, incluso golpeándolo y empujándolo lejos – ¡déjalo en paz!

The dreamer and the beast { a BNHA fairy tale #1}Όπου ζουν οι ιστορίες. Ανακάλυψε τώρα