Pregnancy Counterattack.

Capítulo 59

— Ah...

La tela áspera penetró el cuerpo de Xu Cinian, frotando la carne sensible del interior; después de unos segundos, el cuero cabelludo de Xu Cinian estaba entumecido. Cuando pensó en Qu Cheng entró con la bolsa de red, se ruborizo tan fuertemente que parecía que iba a sangran en cualquier momento. El cuerpo extraño siguió moviéndose en su interior un par de veces más; Xu Cinian resoplo.

— ¿Tú... carajo realmente entraste? Joder... Quítatelo, quítatelo... um... ¡Quítatelo!

Qu Cheng sonrió con malicia, mientras sostenía el cuerpo que luchaba entre sus brazos, volvió a mover su cintura hacia adelante, haciendo que el agua salpicara.

— Entiendo por qué compraste este traje de baño, puedo usarlo como condón, ¿verdad?

Cuando terminó de decir eso, volvió a empujar su cintura hacia delante con mucha fuerza, su miembro entro por completo. Xu Cinian solo pudo soltar un suspiro y se estremeció un par de veces.

«Es una sensación terrible. Cuando la tocas, la tela es muy suave, ¿por qué cuando está dentro se siente tan áspera? Cada fibra toca un nervio, ¡me estoy muriendo!»

— Bebé, ¿lo sientes?

Qu Cheng seguía golpeándolo, Xu Cinian yacía tenso en el borde de la piscina, incapaz de moverse, toda su cara estaba enterrada en sus brazos, sus orejas estaban tan rojas que parecían a punto de sangrar. Cada vez que es embestido, hará un sonido fuerte, obstinado y terco.

— Hmm... ah...

— ¿Cómo se siente? ¿No es genial usar lo que compras?

— Quiero cortar tus cosas... ¡Ah!

Qu Cheng sonrió, su ancho pecho sacudió la espalda de Xu Cinian, obligándolo a dejar de hablar. Fue apuñalado ferozmente, cada vez que Qu Cheng entraba, lanzaba olas de agua termal hacia afuera. Una y otra vez, la parte sensible de Xu Cinian fue rozada.

— Ahh... Qu Cheng, ¡debo cortarte!

Xu Cinian había intentado aprovecharse de Qu Cheng, pero termino siendo derrotado por Qu Cheng, un hombre desvergonzado. Lo había penetrado dentro de la piscina.

«¡Los hombres tan cuidadosos están jodidamente locos!»

El agua en la piscina de aguas termales seguía siendo turbulenta, y la fuerza física de Xu Cinian no era tan buena como antes. Después de poco tiempo, estaba exhausto y con unas náuseas débiles. No pudo evitar levantar la mano para pellizcar la cara de Qu Cheng.

— ¿Tú... eh... interminable? ¿te sientes bien con ropa tan gruesa?

Qu Cheng estaba trabajando duro.

— No te preocupes, hay una red al frente, puedo perforarle un agujero.

Xu Cinian ya no pudo más y se derrumbó, se vio obligado envolver sus piernas a su alrededor de Qu Cheng, le frotó la cara y la barba con fuerza.

— Entonces tú... eh... ¿puedes darte prisa?

— Me puse ese pequeño traje de baño que compraste, no es fácil salir de él, tenme paciencia.

Hablando del traje de baño, volvió a empujar con fuerza y la punta de su duro miembro toco contra el punto más sensible de los intestinos de Xu Cinian, la sensación fue mayor gracias a la tela rugosa.

Xu Cinian gritó y lamento su decisión.

* * * *