WITH THE STARS AND US『WILKERCEST』

22 - With The Stars And Us.

Malcolm.

Ya había pasado un año, Jamie había nacido hace unos meses.

También me había graduado, y había sido escogido para dar el discurso.

El baila había pasado y fui con Reese.

Todo había sido muy bueno, y ahora, una semana después, ya estaba listo para irme a la universidad, junto con Reese.

- No puedo creer que ya ambos estén listos para irse - Mamá nos sonrió - estoy orgullosa de lo que son ahora, ya no andan destruyendo todo lo que tocan, ahora son personas decentes y tienen que buscar que quieren que sea de su vida allá afuera en el mundo.

- Sepan también que los amamos mucho - hablo papá - sabemos que durante toda su vida hemos tenido altas y bajas, pero siempre hemos hecho lo que consideramos mejor para ustedes, pero ahora todo dependerá de sus acciones.

- Ahora debemos irnos a trabajar, se que cuando volvamos ya no estarán aquí, tengo doble turno, así que vengan aquí - mamá nos abrazo a ambos y papá también se unió - solo prometan que nos llamarán siempre.

- Seguro - hablo Reese.

- Claro, mañana a primera hora cuando llegues del trabajo llamaremos - hablé.

- Y en la noche cuando lleguemos también para que podemos hablar contigo papá - agrego Reese.

- Mis muchachos - papá nos abrazo un poco más fuerte.

Y luego nos separamos.

- Vámonos Hal, llegarás tarde al trabajo - hablo mamá.

- Si...

Caminaron hasta la puerta y ambos salieron, todo fue rápido, sabíamos que si volteaban atrás simplemente faltarían al trabajo y no nos dejarían ir.

Y unos minutos después la casa quedó en silencio total, Dewey y Jamie aún dormían.

- Es hoy - sonreí hablando en voz baja.

- Es hoy - Reese tomo mi mano.

- ¿Ya tenemos todo? - le pregunte

- Bueno, el auto está listo y la casa que está cerca de ambas universidades está rentada, tenemos todo en el auto igual, solo falta irnos.

- Tengo un poco de miedo, sabes - hablé - es comenzar nuestra propia vida, ya no tenemos reglas, es como empezar de cero y pensar en todo eso me asusta... No creí que este momento llegaría tan rápido.

Reese sonrió y me abrazo.

- Es normal, pero estaremos bien - hablo en voz baja - se que así será, porque trabajaré porque así sea.

- Si - asentí - yo también.

- Vamos a ver televisión un rato, mientras Dewey despierta - Reese camino hasta el sofá y encendió la TV.

Y eso hicimos, después de todo era un largo camino el que nos esperaba.

Aún no podía creer que Reese había comprado un auto para nosostros, trabajo muy duro por ello y ahora teníamos auto.

Según el, si algo salía mal, podíamos vivir en el auto, aunque solo lo decía como chiste.

Reese de verdad estaba decidido sobre nuestro futuro, al igual que yo.

Ya en la tarde, como a las 4 decidimos irnos, Dewey nos acompaño al auto junto con Jaime.

- Ahora es tu responsabilidad asegurarte de hacer las mejores bromas - le dijo Reese.

- Si, tu mandas ahora - asentí.

Estuvimos así unos segundos y luego abrazamos a ambos.

- Claro, seré el mejor, y también le hablaré sobre ustedes a Jaime - hablo cuando nos separamos - Serán leyendas junto con Francis.

- Claro, luego de tantas locuras - sonreí al recordar tantas cosas que habíamos hecho.

- Solo asegúrese de seguir la tradición - Reese se subió al auto y lo encendió.

- Nosotros volveremos para navidad - Dije haciendo lo mismo.

- Aquí estaremos mientras tanto - Dewey sonrió y Jamie solo nos observaba.

Aún estaba muy pequeño para entender que pasaba.

Reese puso el auto en marcha y así lentamente dejamos nuestro antiguo hogar atrás.

Y no dijimos nada por el camino, alguna que otra cosa pero solo íbamos en nuestro mundo.

El atardecer se hizo presente cuando llegamos a nuestro nuevo  hogar, unas horas después llamamos a papá y le dijimos que todo estaba muy bien, y que nuestras cosas estaban bien y todo eso.

Reese se dedicó a hacer algo para cenar mientras que yo arreglaba nuestra ropa.

- Oye Malcolm - grito Reese desde la cocina - no vas a creerlo.

- ¿Que cosa? - salí de nuestra habitación para ir hasta la cocina.

La casa era pequeña, pero tenía bastante espacio, dos habitaciones, un baño, la sala y la cocina.

Cómo estábamos juntos, decidimos dormir en una misma habitación, siempre lo habíamos hecho.

Cuando estuve en la cocina observé que Reese veía por la ventana.

Decidí mirar y ahí estaban, era una lluvia de estrellas.

- Bueno, se supone que estamos en temporada, pero no sabía que hoy habría una - sonreí.

- Ya podemos agregar a nuestro tatuaje que cuando comenzamos nuestra nueva vida también hubo una lluvia de estrellas - Reese solo observaba al cielo.

Nuestra nueva vida había comenzado, y me sentía feliz por todo, la universidad comenzaba la próxima semana.

Y Reese está aquí conmigo.

- No puedo pedir nada más - lo observé y luego lo bese - Te amo.

- Yo también te amo Malcolm - Reese me sonrió - me alegro que las estrellas siempre estén con nosotros.

- Bueno, desde aquella vez, nos han pasado cosas buenas, así que está debe ser lo mismo - sonreí.

Era algo simple, pero hermoso.

★FIN★