Pregnancy Counterattack.

Capítulo 53

La bofetada fue muy fuerte y dolorosa, pero las palabras que dijo perforaron directamente el corazón de Xu Xinnian, eran como una hoja afilada.

No quería admitir que lo que estas personas estaban diciendo era la verdad, pero Xu Jianguo no se había presentado desde que le habían amputado la pierna, ni siquiera cuando fue llevado al centro de detención. Ni siquiera lo visitó en Año Nuevo. El viejo había extendido su mano cuando lo necesitaba, pero lo pateó cuando ya no le fue útil. ¡Su vida era incluso peor a la de un perro a los ojos de Xu Jianguo!

El odio por Xu Cinian y el odio por Xu Jianguo se había acumulado completamente hasta el extremo. Xu Xinnian se mordió el labio y el sabor a sangre impregnó su boca, su estado de ánimo era horrible.

«Dios me abrió los ojos y me salvó la vida, mientras esté vivo, ¡juro que me vengaré!»

Se apoyó en sus muletas, y comenzó a luchar por ponerse de pie, con los labios ensangrentados y los ojos llenos de odio. Tomó una de sus muletas y estuvo a punto de golpear las cabezas de estas personas. Pero en ese momento, un policía corrió hacia ellos mientras gritaba.

— ¡¿Qué están haciendo?! ¡Están encerrados y aun quieren causar problemas!

Al escuchar el movimiento, Xu Xinnian inmediatamente bajo la muleta en su mano, las lágrimas se acumularon rápidamente en sus ojos y su expresión, que originalmente era horrible, se volvió lastimosa al instante.

La velocidad de esta conversión dejó sin palabras a las personas que estaban a su lado. Antes de que pudieran reaccionar a lo que estaba sucediendo, la policía ya se había acercado a ellos. Xu Xinnian se mordió el labio y negó con la cabeza con los ojos rojos.

— Lo siento, policía, es mi culpa. No, hubo un conflicto con algunos hermanos mayores, pero ahora todo está bien.

El policía lo miró, miró las mejillas enrojecidas y las manchas de sangre en las comisuras de su boca, frunció el ceño y preguntó a las siguientes personas

— 4201, 4204, ¿le pegaron?

— No, no, esto me lo hice yo solo, hermano policía... No los castigue.

Xu Xinnian miró a algunas personas y se escondió detrás de la policía con miedo, temeroso de ser golpeado nuevamente por estas personas.

Varias personas estaban confundidas por la velocidad con la que podía cambiar sus expresiones. Uno de los presentes no pudo evitar maldecir.

— ¡Joder! ¿Eres un maldito hombre? Acabo de darte una paliza, ¿qué diablos estás haciendo, niño?

Originalmente, era un gran tabú crear problemas en el centro de detención. Pero el sujeto acaba de confesar que había creado problemas, el policía dijo con frialdad.

— Entiendo, realmente lo hiciste. ¿Es este el lugar donde cometiste el error? Ustedes dos síganme. No podrás salir por un tiempo.

Con una cara fría, escoltó al alborotador lejos y miró a Xu Xinnian, cuyos ojos estaban rojos, luego bajó la mirada a sus muletas y lo dejó ir sin llevárselo.

Xu Xinnian sollozó y dijo gracias. Varias personas se sintieron agraviadas por sus acciones y sus rostros se volvieron fríos.

Había jugado muy bien su truco, había tomado prestado un cuchillo para matar a alguien y no había salido herido.

A todas las personas que lo habían lastimado, no les daría una oportunidad. Jamás dejaría ir a la familia Xu tan fácil. A la persona que lo había apuñalado por la espalda, no lo dejaría ir. Incluso si Xu Cinian había vuelto de la tumba, ¡no lo dejaría ir!