Sexo con el novio de mi hermana

capitulo 5: mi mejor amiga y su vagina

Después de nuestra “sesión” decidí que me iba a seguir viendo con el novio de mi hermana, ella no se lo merecía, yo sí, que estoy actuando como una completa puta, pero la verdad es que ella no lo complacía, yo si, además el dijo que se quería quedar con migo, pero como no queremos hacerle daño a mi hermana lo íbamos a tener como un secreto y gracias a mi ingenioso cerebro, le dije a Ethan que se comportara como el peor novio de toda la vida para que mi hermana le terminara y así no hacer sufrir a nadie, ¿cierto?

-Entonces déjame ver si entendí, después de acostarte 3 veces con el novio de tu hermana quieres hacer que Ethan trate mal a tu hermana menor, para que ella le termine y tú puedas quedarte con el – volvió a repetir Elizabeth mi mejor amiga.

 - Así es, ¿Qué piensas? – le pregunte.

 -Pienso que eres una puta y de las baratas – me dijo sin ninguna pizca de tacto, me ofendí un poco pero lo deje pasar, la verdad es que no me importaba lo que piensen los demás, yo amaba a Ethan y haría todo por el TODO.

 -No seas tan cruel, además el ya no la quiere, le haría un favor quitándoselo de encima – dije despreocupadamente, le di una chupada a mi helado y deje que los sabores recorrieran toda mi boca.

 -No soy cruel, te estoy diciendo la verdad ¿Por qué no fuiste a un prostíbulo y te acostaste con algún otro tipo? ahí consigues lo mismo y tu ganas dinero – dijo haciendo un ademan con las manos.

 -No seas estúpida, ya te dije que él no me folla, el me hace el amor – dije y me reí por la cursilería que yo acababa de decir.

 - ¿Cuál es la diferencia? – me pregunto.

 -No lose, supongo que es porque la tiene más grande – dije, coloco una mueca de asco y me lanzo una almohada, la alcance a coger con la mano antes de que me tumbara mi delicioso helado y la tire al suelo.

 -No me des detalles por favor, suficiente tengo con el puteadero que esta alado de mi casa – dijo, pegue una fuerte risotada hasta que quede sin aire, así que empecé a aplaudir como una foca retrasada pidiendo ayuda.

 - No me digas que no te gusta escuchar el sonido de las personas teniendo sexo – le dije después de que recupere el aire.

 -Claro que no, yo no soy una ninfómana como tú, recuerda que a mí me toca madrugar siempre – me recordó

-Oh vamos, ¿y cuando estas cachonda? ¿acaso no te masturbas con el sonido? – dije acercándome a ella, note como sus mejillas se tornaron rojas y volví a reír – lo ves no soy la única – finalice.

 -Como sea – dijo sin ningún interés.

 -¿Cómo sea? Acaso no recuerdas nuestra noche – le pregunte acercándome a ella sensualmente.

 -Eso es completamente diferente – me respondió alejándose de mí.

 -¿Por qué? – le pregunte acercándome mas y mas.

 -Por…que… - dijo nerviosa, amaba ponerla así, me excitaba.

 -Porque sabes que con migo todo es totalmente diferente – dije, la tire a la cama y me senté encima de ella haciendo que no se moviera.

 -Por favor mariana, no – me dijo.

 -¿Por qué? ¿acaso no te gusto? – dije acercando mi rostro al suyo – o ¿quieres repetirlo?

 -Sabes que tengo novio – dijo, se relamió los labios se hundió en la cama.

 -O si, Noah, me acuerdo de él y de su enorme polla, ¿acaso olvidas que hicimos un trió? Y que tú fuiste la que mas orgasmos alcanzo y la que pedía mas, ¿lo recuerdas? – dije seductoramente pasando mi mano por debajo de su falda.