Mimosa - Nadie sabe que te quiero

C037 - ¿Quien le gustaba a Ji Xinglan de 17 años?

Parecería que las acciones pasadas de sus superiores eran el único camino a seguir. Si quería golpear a alguien, tenía que atraparlo en un saco.

Mientras Yan Qiu resistió la poderosa presión del alfa, observó en silencio la puerta de la habitación en diagonal frente a él. Al mismo tiempo, se preguntaba qué tan altas eran sus posibilidades de tener éxito en la carrera si lo hiciera ahora. Si no, se escondería en la sala de estar y se quedaría con el gatito por una noche.

Sin embargo, no tuvo tiempo para llevar a cabo este plan, porque el dueño de la fermonas que lo envolvía repentinamente lo presionó. Yan Qiu se estremeció y cerró los ojos. Sus pestañas se agitaron un poco, pero lo que siguió fue un beso suave y ligero.

Yan Qiu no entendió qué estaba pensando esta persona. No solo no perdió los estribos, sino que de repente lo besó. ¿Que esta pasando?

Sin embargo, Yan Qiu no se atrevió a liberarse. Solo pudo levantar la cabeza y permitir que Ji Xinglan lo besara. Justo cuando pensó que esto sería solo un beso normal y estaba a punto de sentirse aliviado, Yan Qiu de repente sintió una sensación fría en su lengua. Entonces, algo frío y dulce pero ligeramente amargo entró en su boca, lo que provocó que su boca se llenara con el refrescante sabor del limón.

Yan Qiu abrió mucho los ojos y miró a la persona frente a él en estado de shock. Fue jugo de limón.

El jugo de limón estaba diluido, por lo que el sabor era muy débil. En verdad, no fue muy amargo, pero Yan Qiu no pudo manejar este tipo de estimulación. Usó sus manos para empujarlo, pero incluso después de empujarlo un par de veces, Ji Xinglan se negó a soltarlo. Con solo unos pocos movimientos, agarró las muñecas que luchaban de Yan Qiu y las dobló detrás de su espalda.

Sentado en el borde de la cama, Yan Qiu tenía las manos forzadas detrás de él. Ji Xinglan simplemente se paró frente a él mientras se inclinaba sobre él. El líquido frío goteó por las comisuras de sus labios y se deslizó por la mandíbula y la barbilla de Yan Qiu antes de fluir por su clavícula y hacia el cuello de su camisa, dejando un rastro brillante de líquido.

. . . 

Diez minutos después, Yan Qiu se sentó en la cama mientras jadeaba por respirar. Tenía las mejillas y el cuello teñidos de un tenue tono rojo. Usó el dorso de la mano y las mangas para limpiar las manchas de agua en la esquina de su boca mientras levantaba la cabeza y miraba a Ji Xinglan con disgusto.

Ji Xinglan se sentó en el borde de la cama y lo miró con una mirada burlona. Extendió la mano y acarició su cabeza.

―¿El jugo de limón estaba agrio? 

Yan Qiu se tapó la boca sin decir nada. Solo asintió repetidamente.

Con los dientes apretados, Ji Xinglan dijo: ―Si es amargo, entonces no tiene nada de malo.

Ji Xinglan originalmente estaba bastante enojado porque Yan Qiu había ayudado a alguien más a escribirle una carta de amor, pero cuando lo pensó, Yan Qiu no le había escrito una carta de amor a Xie Yu y podría haberse considerado que había escrito indirectamente una carta de amor para sí mismo, por lo que su ira se alivió un poco.

―Dime. ¿Por qué ayudaste a alguien más a escribir una carta de amor? ¿Por qué estabas tan ansioso por empujarme hacia otra persona? ―Cruzó las piernas y agarró las correas de la ropa de Yan Qiu. Se balanceaban mientras jugaban con ellos.

Yan Qiu observó cómo Ji Xinglan tiraba de sus correas sueltas un tanto deliberadamente. Le preocupaba que con un solo tirón su ropa se le cayera suelta, por lo que rápidamente retiró las correas.