Jimin's Reactions

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•Pasan la navidad juntos en tu país

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Ya habían pasado las festividades navideñas juntos los dos años anteriores y este año no sería la excepción, sólo que esta vez la pasarían en tu país natal.

Cuando llegaron al hogar de tus padres lo presentaste correctamente ante ellos ya que increíblemente era la primera vez que se veían en persona, tu madre había quedado encantada con tu adorable novio, sabias que tu padre igual pero quería hacerse el difícil y asustarlo un poco.

—Dime muchachito, ¿cuáles son tus intenciones con mi hija? -arqueó una ceja haciendo tragar grueso a Park-

Sonreíste enternecida ante su asustadiza expresión.

—You quielo hacel felis a zu hija, s-senior -demostró el poco español que le enseñaste en los últimos meses del año, cuando le notificaste en verano que pasarían la navidad en T/P más bien-

—Más te vale, y espero que mi niña siga siendo pura hasta el altar

Los colores desaparecieron de su rostro y carcajeaste junto a tu madre, justo a tiempo tocaron la puerta interrumpiendo el tenso momento salvándolo de su muerte, o eso pensaba Jimin.

—Tranquilo cielo -notaste cómo secaba el sudor de sus manos- Papá no es así, sólo quiere asustarte -besaste su mejilla-

—P-Pero... -te miró alterado- é-él piensa que–

Ahora besaste castamente sus gorditos labios calmando sus nervios que estaba a punto de hacerlo hiperventilar.

—¿Porque tan nervioso? -preguntaste divertida-

—Bueno es que... tú sabes que he tenido parejas antes -asentiste- y eres la primera a la que he ido tan lejos y he durado mucho tiempo... y también que he conocido a sus padres

—¿Así que soy tu primera vez de muchas cosas? -el rubor no tardó en aparecer en sus mejillas al captar tu indirecta- Eres una masita adorable -estrujaste sus mejillas-

—T/n, podrías venir a ayudarme con lo último de la cena -pidió tu progenitora desde la cocina-

—Ya voy -sentaste a tu novio en una de las sillas del comedor- Ya vengo, iré a ayudar a mamá

—¿Puedo ayudar? -no quería quedarse solo-

—Está bien, ven -tomaste su mano guiándolo a la cocina-

—¿Porque lo traes? -preguntó tu madre extrañada-

—Nos ayudará, no es mucho de cocina pero si le dices que hacer lo hace a la perfección -le sonreíste- No como otros que están allá afuera hablando de deportes

Con eso tu novio capturó por completo a tu madre. Y con una enorme sonrisa tomó ambas manos de Jimin.

—Cariño, si quieres casarte con mi hija les doy mi bendición

—¡Mamá!