CONTRADICCIONES

La vida sigue

En algún momento del camino te das cuenta que la vida no para. Solo sigue corriendo sin detenerse, sin treguas.

Hoy es el cumpleaños del amor de mi vida y seguramente está disfrutando de su día, mientras yo la recuerdo; mientras traigo a mi mente todo lo que vivimos algún tiempo atrás y que no hay nada más que el recuerdo y el olvido, ahora. La vida sigue, triste, sin gracia; la vida sigue.

Aún recuerdo tantos momentos dignos de contar donde el amor sólido que encontramos en el otro era increíble; fue todo tan bonito, tan agradable. Valdría la pena contar miles de historias, escribirlas y ponerlas en un wattpad. Y seguramente para eso tendría más agallas que atreverme a ir por ella, llorarle por su amor y gritarle por mi amor y quebrarme por los dos; abrazar su cuerpo desesperadamente y aspirar profundamente su aroma, recuperar con un beso un año perdido y dejar mi vista con ella mientras planeo el resto de nuestra vida juntos. Pero la vida sigue, sin ningún sueño más que este, la vida sigue.

Es curioso que siga, que siga y siga sin detenerse, mientras me siento más estancado que un viejo árbol de una vieja catedral. Es increíble que en cada palabra hasta aquí hayan más de un ciento de contradicciones y que admirable es asentar con la cabeza y aceptar una idea, una realidad. Aun cuando nos aferramos con los pensamientos a todo lo que nuestra razón está aceptando, que admirable es ver perderse al hombre y saber que nunca se encontrará. Solo agachemos la cabeza, sequemos nuestras lágrimas y engañémonos: La vida sigue, aunque mi corazón ya no lata, la vida sigue.

El primer año del resto de mi vida sin ti. La vida sigue, queda poco por decir y la vida sigue.