Proverso I

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Hay poca claridad en esta situación. Un juego es poca conclusión: que sea todo sin ser tu rey y que no seas nada siendo mi reina. El azar gira en lo que sientes y mi destino se inclina sin haber sentido nada. El día viene y se acaba. Me voy perdiendo poco a poco mientras te vas encontrando, y, en silencio avanzamos a donde no quisimos llegar. Te enamoraste, yo no. Y ahora, ando hablando de amor, tú no.

Sí aceptaras ser mía,
que fácil resultaría,
como yo ahora, fui tuyo,
sin saber que me dejarías.

El día viene y se acaba.
La noche llega y no hay nada.
¿Dónde está mi ángel?
¿Dónde está mi alada?
Mi dilema empieza,
los de ella se acaban. 

Seguimos jugando a destruir mi mente: que te complazca sin sentir complacencia y que des la mitad sin sentirte completa. Y al fin, el día viene y se acaba. Aprendí a dejarte, pero no quieres que me vaya, y ahora me retienes, me callas. !Qué bonito sueño! !Qué gran pesadilla! Mi sueño no regresa, ni mi tranquilidad y ella lo sabe, como sabe que la quiero, pero ella, todavía.

Azul pueden ser las estrellas,
mi dolor el universo oscuro
Descansa, querida doncella,
mi amor, dulce cianuro.

No es culpa tuya,
no es culpa mía.
Yo te seguiré queriendo,
tú, todavía.

A D.

CONTRADICCIONESTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang