Capítulo 31: Cuando las aves migran.

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Enamorándonos y desenamorándonos, avergonzados y orgullosos de ello, juntos todo el tiempo...Imagina, eres la reina de todo, todo lo que alcanza la vista, está bajo tu mando. Yo seré tu guardián, cuando todo se esté desmoronando, para sujetar tu mano. Nunca puedes decir nunca, no sabemos el por qué, cuando el tiempo, el tiempo una y otra vez...más jóvenes ahora de lo que éramos antes, no me dejes ir. Nos estamos cayendo a pedazos, y nos volvemos a juntar, una y otra vez. Nos estamos desmoronando, pero nos volvemos a unir...no me dejes ir... - Never say never / The fray.

"Debemos estar dispuestos a abandonar la vida que planeamos, para vivir la vida que nos está esperando..."

El joven de orbes verdes le sonrió con dulzura, una de esas sonrisas purpurinas que sólo él sabía esbozar. Con lentitud, luego, llevó su mano derecha hasta la mejilla del ojiazul y lo acarició con suavidad, como si la piel del castaño fuese pura porcelana frágil. Louis cerró los ojos. Cada célula de su cuerpo reaccionó ante aquel contacto. Sintió paz, alivio, saciedad de aquellos roces que ya le faltaban como al mismísimo aire. Un leve cosquilleó le recorrió su corazón, pasando luego por su cabeza, y estómago, un cosquilleo que brotó como girasol expueso al sol. Un cosquilleo provocado por las tiernas acciones del menor para con él. Un cosquilleo que lo hizo sentir vulnerable.

-Lou...- Susurró el menor. Entonces los párpados de Louis volvieron a abrise y su mirada azulina como el mar colisionó contra el verde césped. Sus miradas admiraban con absoluto amor cada facción del otro. Se recorrían, se regalaban silenciosas caricias.

Con cuidado, Louis peinó los rizos chocolate desleídos de Harry, y los colocó detrás de su oreja. Repitiendo la acción una y otra vez, pero éstos parecían no estar dispuestos a aquedar detrás de la oreja del joven. Con rebeldía, volvían a escaparse, queriendo mostrarse para seguir enmarcando el rostro del joven. Entonces el castaño soltó un suspiro y los dejó ser. Harry rió por lo bajo. Sus hoyuelos aparecieron en cada uno de sus cachetes sonrosados, y esa sonrisa chueca cautivó a Louis como si estuviese observando la más brillante de las maravillas. ¿Por qué el joven opacaba hasta al mismísimo sol con su luminosidad, a la altiva luna con su hermosura, y a las millones de estrellas por su sublimidad? Se cuestionó internamente.

Lo que era mejor, él era todo de su autoría.

-Eres hermoso...-

Susurró por lo bajo, acercándose al rostro del rizado, y tomándolo por ambas mejillas. A tan corta distancia, ambos pares de ojos continuaron paseándose con deliberada libertad por cada centímetro del rostro del otro. Ambos guardando cada detalle, retratándolo muy al fondo de sus memorias para recordarlo por siempre...

Una risa estruendosa resonó por toda la vivienda y Louis despertó exaltado. Sus ojos confusos y amodorrados se pasearon con desconcierto y rapidez por todo a su alrededor. El bello campo en dónde se encontraba ya no esta allí. Ni tampoco Harry.

Louis soltó un pesado suspiro y se dejó caer nuevamente con desgano al colchón. Había soñado con Harry. Otra vez...

Era la tercera vez que el joven de orbes azules soñaba con el muchachito rizado desde que se había alejado de él, hace ya cinco días atrás. Y Louis pensó que si seguía a esos pasos le sería tarea imposible el sacar al menor de sus pensamientos. Su subconsciente aún preguntaba por él, y aunque él lo negara sólo para atraer al olvido, lo cierto era que también extrañaba a Harry. Lo extrañaba de la misma forma en que el árido y seco suelo de un día de verano extraña a la pasajera lluvia para sentirse vivo nuevamente.

Extrañaba sus suaves rizos con aroma a shampoo floral, sus mejillas constantemente teñidas de carmín, sus grandes luceros verdes que eran tumulto y calma por dónde Louis naufragaba, sus labios que sabían al más delicioso néctar, su voz que sólo parecía decir cosas bellas. Extrañaba sus caprichos de niño, sus ideas locas e infantiles, su emoción por cosas simples, su constante felicidad. Extrañaba todo en Harry.

As happened to Cinderella {Larry Stylinson} TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora