Los 8 elementos

10. El pantano

Dormí mal, no descanse lo suficiente. Cuando me desperté estábamos cerca de casa, miré hacia los lados y allí estaba relajado y con los ojos cerrados, pero igual era lindo. Me parece que me gusta Est, sus ojos, su pelo, su sonrisa. Cuando me di cuenta, Tyler estaba despierto, me miraba serio y le dirigía miradas... amenazadoras, se podría decir, a Est.

Llegamos a casa y bajamos nuestras cosas, me sentí mal porque no iba a ver a Est hasta el entrenamiento de verdad, que seguramente era la semana siguiente. Pasé por el caminito de piedras que hay en mi patio, se veía muy triste. Para darle más vida, estire mi brazo y de la tierra salieron muchas flores de todos los colores eran hermosas pero estaba tan cansada que tuve que ir a la cama para no quedarme dormida en el sendero.

[La noche estaba iluminada por las estrellas y la luna, que se veía más grande que nunca, el río con un hermoso color que no se sabía si era verde o celeste]

Mi sueño me hizo acordar a Est, y me quede pensando en él, hasta que me volví a dormir. Estaba tan cansada, que cuando me desperté, ya habían pasado dos días desde que llegamos a casa. Tyler seguía durmiendo entonces aproveché, desayuné moras y uvas; y fui afuera.

Moví mis manos y cree una sillita con tronquitos, me senté y estuve contemplando el jardín con las gotas de rocío  cayendo de hoja en hoja hasta llegar al piso.

- Discúlpeme, ¿usted es Ash Claylin?-dijo un chico sacándome de mis pensamientos

- Sí, soy yo

- El gobierno les envía unas cartas a usted y a su compañero- dijo el muchacho entregándome dos cubos mensajeros.

- Gracias- le dije y se fue en su transporte

Presioné el botón rojo, y expulsó una nota

Ash Claylin:

                   Ha sido aceptada en la competencia obligatoria de "Los 8 elementos". Deberá asistir cinco días a una preparación especial donde aprenderán a utilizar mejores técnicas que serán necesarias para ganar esta competencia. Mañana a las 7:30 los pasarán a buscar a todos los competidores en un autobús equipado para que sea de su agrado

                       Atte.

                               Clarton Maylan

Cuando Tyler se despertó y le di su cubo.

- Iré un rato al pantano a practicar, ¿me acompañas?- le dije a Tyler

- Si, enseguida te alcanzo. Voy a desayunar, mientras, ve tu sola.

- Bueno, nos encontramos al lado del lago.

Cuando éramos más chicos, pasábamos el día entero jugando en el pantano. Era como nuestro lugar secreto. Siempre que me escapaba, él me encontraba ahí. Hemos pasado muchos días de diversión allí.

Atravesé mi patio corriendo y llegué a la entrada del pantano, me agarré de una de las ramas de un sauce llorón y me impulsé. Solté la rama y me agarré de otra; dejé esa y casi me caigo al pantano pero hice que una liana creciera. Salté a ella cuando estaba por tocar esa agua sucia.

Solté la liana, aproveché el envión y giré en el aire; y caí parada en la tierra. Al parecer Tyler me vio y me aplaudió. Yo hice una reverencia y él bajo al pantano.

- Ahora es tu turno- le dije con un tono pícaro

- Si tú quieres- hizo algo con sus brazos y se formaron dos olas gigantescas, que cuando cayeron ya no tenían algas. Tyler me sostuvo de la cintura con un brazo, y con el otro agarró una liana, tomó impulso, fue corriendo, saltó, soltó la liana y caímos en el agua. Levanto sus brazos y un chorro me saco disparada hacia arriba, el chorro bajo, yo hice la mortal y caí de cabeza y abajo del agua involuntariamente me di un rol y salí a respirar

- Fue fabuloso- admití

- ¿Te gustaría hacerlo otra vez?

- No, suficiente por hoy, ¿no te parece? Hiciste que me mojara entera- dije haciendo puchero

- Eso no es nada- me dijo, bajó los brazos y el agua se despego de mi muy fácil

Fuimos a la casa, almorzamos y fuimos a pasear por el vecindario.