Los días pasaban y cada vez me sentía más a gusto con las chicas. A dos semanas de iniciado el curso debíamos presentar un número por área de estudio: artes escénicas, música, canto y danza; Allie, Becca y yo no coincidiamos ya que cada una estaba en una disciplina diferente. Afortunadamente, ya tenía en mente el número que haría en la gala de presentación, sólo me faltaba elegir la melodía perfecta para transmitir lo que deseaba. Todos estabamos tan inmersos en nuestros números que no tenía quien me diera su opinión o sugerencia. Estaba en el salón practicando algunos movimientos a la vez que trataba de encontrar mí melodía, estaba tan concentrada que no noté que alguien me observaba hasta que en un giro quedé frente a él... Taylor.
- Wow ! Bailas increíble.
- Hola... y gracias...- respondí ruborizada.
- Es para tu presentación ?
- Mmm... si- este chico me ponía realmente nerviosa.
- Ya esta lista ?
- Si ! bueno... no- ¡que sucede conmigo!
- Si o no ?- preguntó acercándose peligrosamente.
- No, sólo me falta la música.
- Sólo eso ? Es lo más importante...
- Si... ya sé, pero no encuentro la adecuada.
- Primero se tiene la música, luego lo demás no ?
- No... bueno, hay quienes lo hacen así... pero yo no.
- Mmm y cómo lo haces ?-. justo en ese momento entraron algunos alumnos al aula- tienes alguna clase las siguientes dos horas ?- negué con la cabeza- te invito a tomar algo y me cuentas- sin dejarme responder tomó mi bolsa y tiró de mi mano para salir.
Caminamos rapidamente por los pasillos- bueno, Taylor practicamente me llevaba arrastrando- hasta llegar a la calle y como si me hubieran pegado al piso con cemento me detuve en seco.
- Qué pasa ?- preguntó.
- La cafeteria esta por aquel lado- dije señalando hacía la escuela.
- La cafeteria a la que vamos a ir esta por este lado- dijo señalando hacía la calle y sonriendo.
- Pero... no tendremos problemas ?
- No, vamos- dijo jalándome de nuevo pero volvi a frenarme, el volteó a verme sin saber que pasaba.
- No traigo dinero...
- Nadie te lo ha pedido, hoy yo invito- y me regaló otra de sus hermosas sonrisas.
Cruzamos la calle para posarnos frente a un auto que sólo había visto en películas o revistas, Taylor caballerosamente abrió la puerta y me ayudó a subir, este chico me pone demasiado nerviosa, ocupo su lugar al volante y volteó a verme, sin quitar su mirada de mi fué acercándose lentamente hasta quedar a escasos centímetros de mi cara por lo que no pude evitar cerrar los ojos en espera de lo que tanto temía que haría...
- Listo ! Ahora si podemos irnos- dijo reprimiendo su risa.
Su intención no era besarme sino ponerme el cinturón de seguridad, me sonrojé al pensar en lo tonta que debi haberme visto y sobretodo por pensar que me besaría cuando sólo nos hemos visto pocas veces, aunque el hecho de estar instalada en su coche sin conocerlo bien ya era demasiado.
No se cuanto nos habremos alejado exactamente de la escuela, pero el lugar al que me llevó no se parecía en nada a las estructuras modernas que rodeaban el campus, más bien era un lugar pequeño de estructura clásica llamado " Coffee Princess". Al principio me dió risa el nombre, pero al entrar comprendí el porqué del mismo; al menos media docena de chicas realmente hermosas y de buen cuerpo eran las meseras del lugar, la verdad es que le hacían mucho honor al nombre del establecimiento. El lugar era sencillo y muy acogedor, daba la impresión de estar en la sala de una casa; con love seats, mesas centrales y pantallas en las que pasaban videos musicales.
- Espero que te guste.
- Lo que veo no me gusta...- dije con semblante serio para luego continuar con una amplia sonrisa- me encanta !- creo que pude escuchar un suspiro de alivio por parte de mi acompañante, al lado del cual empezaba a sentirme más que cómoda.
