Diferentes.

¡Que Vida!

- Bueno duerme- Tapé a Lily y bajé las escaleras, estaba sola para mi suerte mis padres tenían un evento en el que trabajar esta noche.

Decir que no podía parar de pensar en lo que había sucedido con Adam es mentir descaradamente. Adam es un profesional a la hora de lo que sea que hace, tan profesional que no quiso hablar de sus negocios en frente mío. tome mi teléfono entré en su perfil y le envíe un mensaje.

-Adam-

Necesito saber qué es lo que sucedió, sabes. No acostumbro a correr los sábados a la noche escapando de un mafioso ladrón con un arma en la mano. También recuerdo, dijiste que le dé a Lily agua porque sabias que estaba drogada, ¿No es así? No sé porque me preocupo tanto por ti, al final esto termina por demostrarme que apenas te conozco.

Me importa tan pero tan poco lo que está sucediendo entre Mike y Adam lo único que quiero es que Adam éste bien, mi mente no para de reproducir el momento en el que oí el disparo tampoco creo que logre sacar el sonido de mi mente por meses, jamás en mi vida había escuchado un disparo o visto un arma y jamás me había imaginado que lo haría. ¿Por qué corrí con Adam? ¿Por que no sólo lo deje solo? En el fondo sabía la respuesta no había corrido detrás de Adam el ladrón, yo corrí detrás de Adam Darkness detrás del Adam que conocí en el parque y que estaba nervioso que se desesperaba por ser escuchado. Es que ¿No podía sólo existir el Adam que yo quería? no. No podía si quería a Adam tenía que aceptar sus dos partes ¿Estoy dispuesta a aceptar a los dos sin importar que? no lo sé. Necesito más tiempo para pensar quizás solo estoy atraída hacía el quizás sólo me llama la atención su apariencia de chico malo, y es que ese es el problema el no es un "Chico malo" el es un criminal.

Me levanté del escritorio apagué la notebook, y me acosté en mi cama justo a un lado de Lily quién dormía profundamente, me costó bastante lograr que se durmiera primero no quería acabar las dos botellas de agua de litro y medio que le di para que tomara, por ahí exagere un poco pero con completa sinceridad no sabía cómo actuar ante una persona drogada con quién sabe qué, todavía no me entra en la cabeza como es que accedió a tomar esa bebida, suspiré y me tapé con los cobertores después de lo que pareció ser una eternidad caí en un profundo sueño.

Desperté con Lily saltando a un lado de la cama tratando de despertarme, funcionó.

- ¿Qué quieres?- Mencioné adormilada

- ¡Levántate! No recuerdo nada de lo que pasó anoche-

- Ya me lo imagino, mejor para ti que no recuerdas- Mientras tapaba mi cara con una almohada. Lily corrió hacía el baño, medio sonreí para mí misma, algo me decía que después de los dos litros de agua iba a pasar gran parte del día así. De repente sentí un golpe en la frente, tiré la almohada y me encontré con un jabón rosa justo delante de mis ojos.

- ¿Un jabón? De verdad Lily, pensé que lo podías hacer mejor-

-Lo hubiera hecho mejor si pudiera pensar en otra cosa que no fuera ir al baño, ¿Qué tome anoche?-

- Esa es la pregunta del año amiga mía- me senté en la cama acomodando mínimamente mi cabello. Lily se sentó en la mesa del escritorio-

- Es que ¿Tu tampoco sabes? Cómo volvimos?-

- Si, se lo que tenía lo que tomaste aunque no exactamente que tomaste y volvimos caminando, bueno yo camine tu prácticamente arrastraste tus pies hasta aquí -

-Y que tenía lo que tomé- Preguntó poniéndose lo más seria que la había visto en estos seis años de amistad.

- Pues no sé exactamente, pero tenías las pupilas dilatadas así que presumo que te pusieron algo en la bebida-

- ¿Tú insinúas que yo estaba drogada?- Se levantó como rayo de la cama

- Sí, creo que si3. Te di de tomar dos litros de agua cuando llegamos aquí, para que lo expulsaras más rápido de tu sistema-

- No puedo recordar quién me dio la bebida- Mencionó tocándose la cabeza

- Ya cálmate. No te esfuerces en algún momento lo vas a recordar- Me levanté y tomé su mano- Ahora vamos a desayunar que tengo hambre- Por un lado me sentía culpaba por dejarla sola si me hubiera quedado con ella no le hubieran dado de tomar quién sabe que

Habíamos desayunado y Lily decidió quedarse hasta el mediodía en mi casa para que sus padres no la vieran con la cruda que tenía del día de ayer que se le notaba en la cara

- Vamos a entrar a la cuenta de Juliete así molestamos a Adam- Tomó la notebook de el escritorio y se sentó en la cama- No podía dejarla que vea el último mensaje, Adam había dicho que nadie se podía enterar de lo que había sucedido.

- ¡No! ¡Dame aquí!- Tiré de la notebook para mi lado y caminé hasta quedar de frente con Lily, la sesión estaba iniciada y fue dónde me di cuenta que iba a tener que cambiar la contraseña ya que Lily la sabía por qué habíamos creado la cuenta juntas. Borré el último mensaje que le había enviado a Adam

- ¡Hey! ¿Qué borras? ¿Es que se están diciendo cosas sucias?- Me dio un guiño y sonrió

- ¿Qué dices? Estás loca- Sonreí y le entregué la notebook.

- No está conectado y yo estoy aburrida y tengo unas tareas que terminar así que aquí te dejo solita para que hables tranquila con tú Romeo- Puso la notebook a un costado y me sonrió buscó su maleta violeta y se fue.

- Ábreme la puerta ¿O quieres que la atraviese?- Me gritó desde el piso de abajo.

- ¡Está abierta!- Reí para mis adentros

Tomé la notebook y se encendió el tan preciado punto verde al lado del nombre Adam Darkness.

-Adam-

Sé que tienes un millón de preguntas, que merecen ser respondidas. No te preocupes las responderé todas si es lo que quieres, pero necesito hablar contigo cara a cara.

Me había cambiado el nombre como Adam me había dicho que hiciera.

-Katy-

Claro que quiero que las respondas, es lo mínimo que puedes hacer después de hacerme correr en la oscuridad perseguida por un hombre con un arma

-Adam-

Discúlpame no fue mi intención. ¿Te parece que nos veamos mañana cuando salgas del Instituto?

-Katy-

Está bien, pero debe ser rápido

-Adam-

No te preocupes, te espero en la puerta

-Katy-

No, mejor espérame en la esquina. Por favor

-Adam-

No hay problema si así lo quieres

Escuché ruido en el piso de abajo, deben ser mis padres que llegan del trabajo.

-Katy-

Nos vemos, sé puntual. Debo irme, cuídate por favor.

-Adam-

Lo haré, gracias. Besos

Apagué la notebook sin entender, porque me agradecía o por qué mi corazón saltó de una manera inexplicable al pensar en el besándome realmente, ni siquiera sé como llegué a pensar esto, tomé aire que últimamente parecía estar faltándome y me encaminé hacía el piso de abajo.

Mi curiosidad hacia el parecía nunca acabar, seré capaz de encontrar las respuestas o huiré antes de que mi curiosidad me destruya a mí misma. Porque el miedo no se había ido seguía ahí acechando a la espera.