capítulo 13

508 33 4
                                    

Mai's POV:

Habían pasado tres días desde que llegamos a Isla Ember. Katara, había venido todas las mañanas a revisar mis heridas, nuestra relación era tensa pero cordial, no éramos amigas pero tampoco vivíamos con las armas en las manos.

-Hola princesa, ¿qué tal tu noche?- Ryu entró a la habitación con una bandeja de comida en las manos y una sonrisa en su boca.

Después de que Katara revisaba mis heridas, Ryu me traía el desayuno y pasaba conmigo la mayor parte del día, si Ryu no estaba, Kenta tomaba su lugar. Ambos se portaban atentos conmigo, pero ninguno era lapersona que deseaba que estuviera conmigo…

-Bien, ¿cuándo dejarás de llamarme princesa?

-Nunca- dijo, mientras ponía la bandeja en mi regazo y jalaba una silla a lado de la cama.

-¿Cómo estuvo tu noche?- pregunté y metí un pedazo de pan a mi boca.

-Bien, Kenta casi no roncó- se formó una pequeña sonrisa en mis labios, Ryu y Kenta al dormir eran como un viejo matrimonio.

-Puedes dormir en otra habitación, no creo que a los demás les moleste.

-Tal vez tomé en cuenta tu sugerencia…

-¿Ya desayunaste?- Ryu se limitó a asentir con la cabeza, yo volteé a ver hacia la ventana y seguí comiendo. Pasamos unos 20 minutos sin hablar.

-¿Estás bien?- preguntó Ryu, llamando mi atención.

-Sí, ¿por qué preguntas?

-Pareces distraída, estas divagando- afirmó el chico.

-Mmm… sólo pensaba- dije silenciosamente.

-¿Puedo preguntar en qué?

-En que… según Katara, me estoy recuperando más rápido de lo que ella pensaba, así que, tal vez no tengamos que pasar el resto de la semana aquí. Si es así, podremos ir de inmediato a Ba Sing Se y reunirnos con los demás y aún tendríamos dos semanas completas para planear qué hacer el día del Cometa- expliqué con tono aburrido.

-¿Por qué presiento que eso es lo último que quieres hacer en este momento?- dijo Ryu, mientras me escaneaba con la mirada.

-¿De qué estás hablando?- me hice la desentendida.

-Llegamos aquí hace tres días y compartimos el mismo techo con el hombre por el cuál empezaste a hacer todo esto, hombre con el cual no has hablado y por lo que dices, no hablarás. ¿En serio quieres dejar esta casa como si nada hubiera pasado y sin hablar con él?- fruncí el ceño.

-¿Por qué me dices esto? ¿No eres tú el que tiene problemas con Zuko desde que llegamos?- me puse a la defensiva.

-¡No cambies el tema, Mai! Si yo tengo problemas con Zuko, es por ti y sólo por ti. ¡Odio que el tipo no haya tenido los pantalones para subir acá y rogarte perdón de rodillas por lo que te hizo en la Roca Hirviente! Pero eso no tiene nada que ver contigo, si nos vamos a largar de aquí y ese idiota no tiene el valor de encararte, entonces tú ve, desahógate y termina el ciclo con él o… o… arregla las cosas. Me parte verte esperando en esa cama a que él haga algo- mi respiración se aceleró, las palabras de Ryu habían tocado cada fibra de mi cuerpo. Era cierto, tenía que hablar con Zuko.

-Hablaré con él, sí eso te hace feliz.

-No se trata de lo que me haga o no feliz, Mai. Se trata de lo que a ti te haga feliz…- Ryu dijo eso con un tono nostálgico y me hizo pensar que arreglar o no las cosas con Zuko estaba a costa de la misma felicidad de Ryu.

¿Cómo Rebelarse por Amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora