Nerd a la vista de todos ©

Capitulo 19

 Tonta piscina, ¿quién la puso ahí?

~Porque tengo que yo ser tu conciencia~

Tú cállate. Tú deberías de haberme advertido sobre correr en las piscinas

~Ay sí, ahora es culpa mía~

¡Pero si la es!

Por culpa de aquel incidente, mamá no me dejó salir de la habitación. Dijo que no estaba segura conmigo afuera.

Lo único que me quedaba era estar recostada en la cama como si nada.

El techo no tiene un lindo color

~Sabes que por cada suspiro, pierdes un momento de felicidad~

-Ah ahora si piensas, conciencia inútil –me pegué en la cabeza por varios segundos

Ahora estoy sola, tumbada en la cama y con la frente roja.

~ Es como para grabarte ~

Se preguntaran dónde están todos, pues Justin regresó antes a casa. Dijeron que Mikaela no se sintió a gusto con el lugar y quería irse, y por supuesto que no podía irse sola.

 Mi mamá y su novio andaban por ahí. Daniel con Kim estaban comiendo en la cafetería.

Y ni siquiera tuve mi torta que es lo peor de todo

-Bueno, si voy a estar sola, tendré que entrenarme sola

~Eso no me gusta~

Pues te aguantas

Me saqué la ropa quedando con lo mínimo. Con un short y el sostén. Hacía mucho calor, y yo estaba encerrada en la habitación sofocándome.

-Laura, soy yo voy a entrar –Tocó la puerta Daniel.

Miré hacia los lados y me enrollé con una sábana. No sabía cómo se hacía así que no pude evitar tropezarme por ella.

-¿Qué haces ahí tirada? –Me preguntó mientras se reía al verme, ya que no podía pararme, y parecía concuna en el suelo

-Estoy limpiando el suelo –le dije irónicamente – ¿y eso que es?

-Esto es tu almuerzo –Me dejó la bandeja a mi lado – ¿Te ayudo a desatarte?

-No te conviene –Estaba sin la polera –Oye ¿Me pasas la pizza? No la alcanzo –Intentaba agarrar la pizza con la boca pero no lo alcanzaba.

No me hizo caso a la advertencia y me quitó la sábana de enzima.

-Me dio frio –Le reclamé. Aprovechando que ya estaba libre iba a tomar la pizza, pero él me la quitó. Se lo empezó a comer enfrente de mí.

-¡Oye! Devuélvela, es mía –dije arrastrándome. Él se movía  por la habitación esquivándome.

Lo púnico que se me ocurrió fue enredar la sabana de antes en sus piernas.

La tomé y lo hice. Daniel no pudo mantener el equilibrio y cayó al suelo.

-Por comerte mi pizza –le mostré la lengua. Le quité el pedazo de pizza, o el poco que me quedaba, y comencé a comerlo

-Bueno, tú ganas.  –Reclamó –Oye ponte una polera, te vas a resfriar

-Ya me da lo mismo –Dije con la boca llena. Daniel me conocía desde que tengo de nuevo la memoria y hacíamos todo junto, así que no nos daba vergüenza.

-¿Quieres salir hoy? es el último día en Japón y casi no disfrutaste por culpa de la Piscina –dijo quitándome las migas de la cara

-Sí, sí quiero, pero mi mamá no me va a dejar –Aparté su mano y me limpié

-Yo le digo a Kim que se encargué de eso

-No creo que sea buena idea. –Me levanté para ir a la cama, pero a Daniel se le ocurrió hacerme la misma broma de antes.

Me enredó la sabana en las piernas haciendo que perdiera el equilibrio. Caí enzima de él para su mala suerte

-No me voy a disculpar –Le refunfuñé

Daniel me tenía agarrada de la cintura tratando de levantarme, luego me bajo y me dio un beso en el abdomen

-¡Oye! No hagas eso –Le reclamé –Me hace cosquillas –Me comencé a mover tratando de levantarme

~La enana enojona en acción~

-¡Dix cállate! –Susurré fuerte. Daniel me quedó viendo  extraño.  Me tomó embrazos y me sentó en el suelo

-¿Quién es Dix? –me dijo curioso

-No me vas a creer –le dije golpeándome la cabeza

-Laura, viniendo de ti, puedo esperar todo

-Es mi conciencia, parece un mosco que tiene vida propia, y de conciencia no tiene nada

~ ¡Como que un mosco!~

-Así que era con él, con el que siempre peleabas cuando mirabas al techo

- Vedad que yo te había dicho cuando pequeña… no me acordaba

Entre las risas de pronto me empezó a doler la cabeza muy fuerte. Me llevé las manos a la cabeza para que se me pasara pero no podía. Siempre pasaba cuando intentaba recordar algo

Sé que no te caigo bien, pero no me hagas esto

~Oye, que yo no soy también se está apretando acá adentro~

-Mejor no  hagas nada–Me dijo Daniel al verme así.

-Si mejor. –El dolor se fue rápido, tal como llegó, se fue.