Nenita; larry

27. "adiós mami"

Las lágrimas de harry descendían por su mejilla como la lluvia del cielo, apretó con fuerza la roza que tenía en su mano y la tiro a la tumba de su madre. Mucha gente había asistido al entierro de anne, familiares, amigos, quizás algunos conocidos harry no lo sabia. Simplemente no entendía como la vida podía ser tan cruel.

Niall y zayn observaron a harry desde una esquina de manera triste, el padre de harry se encontraba con los padres de ambos chicos. Se supone que estaban dándole apoyo, claro en un momento así todos necesitamos de alguien a quien abrazar y niall sabia perfectamente a quien harry necesitaba.

—Zayn... ve corriendo a la casa de louis e informale sobre la noticia —niall dijo con los ojos húmedos—Estoy seguro que harry lo necesita en este momento.

Zayn asintió con la cabeza dándole la razón a su mejor amigo y corrió a toda velocidad hacia la casa del castaño. Luego de unos veinte minutos, el morocho aparcercio con un preocupado louis a su lado.

—¡Mierda zayn ¿donde esta harry?!—preguntó exaltado y zayn le señaló la tumba de anne, harry se encontraba solo acomodando las flores que las demás personas le habían tirado.

Louis camino a paso lento y tomó asiento al lado del rizado, como siempre lo hacia, con la diferencia que esta vez se quedo en silencio, los sollozos de harry cada vez se apagaban más y más.

—Me quede solo lou... —harry limpió una lágrima.

—No digas eso, yo estoy aquí contigo harry—louis paso su abrazo derecho por el hombro de harry atrayendolo hacia su pecho.

—¿Quien cuidara de mi ahora lou...?—apoyó su cabeza en el hombro de louis—No podre solo con mi p-padre.. yo n-no podre...—las lágrimas de harry se hicieron presentes y louis mordió su labio inferior intentando no llorar.

—Harry quiero que me escuches con atención—louis tomó los hombros de harry y lo obligó a que lo mirara a los ojos—Yo voy a cuidar de tí, te prometo que siempre cuidare de tí—subió sus manos hacia el cuello del rizado—Estaré siempre contigo bebé—sin pensarlo y dejando de lado todos los nervios que podía tener en ese momento, hacerco sus labios al pequeño niño y con dulzura los junto dejando un delicado e inocente beso—lo prometo.