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Al llegar al hogar y ver a Yoongi esperándolo corrió y lo abrazó para besarse, al separarse Yoongi les dijo a los guardaespaldas que los dejaran solos, estos hicieron reverencia y se fueron. El enigma se sentó en el sofá con el omega sobre él para poder hablar.

—¿Cómo te fue? —le pregunto Yoongi.

—Puede y me haya ganado una demanda por agresión hacia Roseanne Park. —Respondió mientras jugaba con la corbata del enigma.

—¿Qué le hiciste? —pregunto divertido.

—Le rompí la nariz. —murmuró. —En mi defensa ella me provocó por darme una cachetada.

—Bueno. —le dio un beso en la mejilla. —llamaré al mejor abogado en ese caso.

Jimin se rio y vio a los ojos al enigma, el cual lo atrajo a él para besarse, este era lento al alejarse, Yoongi tomó con firmeza, el cual solo se aferró al enigma, al llegar a la habitación; Yoongi puso con cuidado a Jimin y ambos se vieron. Jimin asintió y Yoongi lentamente fue quitándole la ropa de manera lenta, acariciándole el cuerpo con suma delicadeza, trazando con su boca cada parte de su cuerpo.

El omega soltaba suaves suspiros de placer al sentir cada caricia y beso en su cuerpo, sintiendo los besos en su frente, mejillas, nariz y labios; descendiendo a su cuello, su pecho y vientre. Yoongi se alejó un momento del omega y se fue desnudando. Jimin soltó un gemido al sentir los largos dedos del enigma abriéndose en su interior.

—Yoon~ —gimió el omega.

—Te amo. —le susurro Yoongi mientras hacía lentos movimientos. —Te amo mi lindo omega.

—También te amo mi lindo enigma. —habló entre suspiros el omega.

Yoongi al sentir listo al omega lo muro por un momento y luego fue entrando lentamente en el omega, Jimin soltó un gemido que fue atrapado por la boca del enigma, el cual comenzó con movimientos lentos. Jimin mantenía los ojos cerrados disfrutando del placer que su esposo le estaba dando, ambos sentían como sus aromas iban inundando la habitación mezclándose en el aire y en cada poro de su cuerpo.

El enigma obligó al omega a quedar sobre él para seguir con los movimientos viéndose a los ojos y sonriéndose en el acto, el enigma miro el cuello del omega y llevó su boca ahí donde pasó su lengua en repetidas ocasiones para que su saliva se convirtiera en «Anestesia» para cuando lo marcará y no le doliera.

Jimin cerró los ojos con más fuerza y se aferró al cuerpo del enigma al sentir como los filosos colmillos de este se enterraban en su cuello dando inicio a la marca y a la unión que ahora tendrían, pues ahora Jimin había sido reclamado como omega de un enigma, ahora el omega era el destinado del enigma.

Enemy [Y.M]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora