¿Me atrevo O No?

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Cristhian McCaffrey

Desde hace un rato tiene que me uní al equipo de fútbol americano de 49ers y, desde entonces, me he vuelto muy cercano a mis compañeros de equipo. Uno de ellos, Nick Bosa, siempre se ha destacado por su espíritu competitivo y su dedicación al deporte, algo que el me ayudado en tanto profesional y académico. Sin embargo, algo inesperado sucedió hace unos días y cambió nuestra bueno mí dinámica por completo, diría yo.

Una tarde, después de un agotador entrenamiento, Nick se acercó a mí con una sonrisa pícara en el rostro. Me dijo que había conocido a una amiga fotógrafa y que quería presentársela, ya que estaba buscando a alguien que me hiciera una sesión. En ese momento, mi mente no podía imaginar que esa simple introducción daría un giro tan importante en mi vida.

Nick organizó una pequeña reunión en su casa para que pudiera conocer a su amiga y agarrar el pretexto de ver a la chica con quien estaba saliendo. Cuando ella llegó, quedé instantáneamente cautivado por su belleza y su mirada apasionada, para que Nick nos presentará. Hablamos durante horas sobre fotografía, arte y nuestras pasiones compartidas. Su nombre era Emily, y sentía una extraña e intensa conexión con ella, era muy agradable estar con ella y como cada tema para hablar no me cansaba, al contrario quería seguir hablando más y más.

A medida que pasaban los días, mi atracción hacia Emily comenzó a crecer. Cada vez que la veía, mi corazón latía más rápido y mi mente se inundaba de pensamientos sobre ella. Pero estaba atrapado en una montaña rusa de emociones, sin saber cómo expresarle mis sentimientos. Era como si nuestras conversaciones fueran siempre perfectas, pero el momento adecuado nunca llegaba para abrir mi corazón.

Sin embargo, la vida tiene una manera curiosa de colocar a las personas en su lugar adecuado. Uno de los novatos del equipo, Alex, había mostrado un claro interés en Emily. Vi la apertura perfecta para finalmente revelar mis sentimientos. Con coraje y temor entrelazados, me acerqué a Emily y la invité a salir.

Afortunadamente, Emily aceptó mi invitación, y ese mismo fin de semana organizamos una cita en un acogedor café del centro de la ciudad. Pasamos horas conversando, riendo y compartiendo nuestras historias más íntimas. Sentí una conexión aún más profunda con ella, y estaba seguro de que mis sentimientos eran correspondidos.

Después de esa cita, Nick notó que algo había cambiado entre Emily y yo. Me miró con una sonrisa de complicidad y me dio un firme apretón de manos. Me agradeció por haber tenido el valor de seguir mi corazón, incluso sabiendo que podría haber sido él quien invitara a Emily a salir. Algo que desconcertó, pero me contó que no me preocupara que eos fue hace tiempo en la uní donde a Bosa le gustaba ella, pero de ahí nd ahora ellos son como hermanos y Bosa enamorado de la asistente de Emily

Desde aquel día, Emily y yo nos hemos convertido en inseparables. Nos apoyamos mutuamente en nuestros sueños y ambiciones, y nuestra relación sigue fortaleciéndose cada día. No puedo evitar agradecer a Nick por habernos presentado, ya que si no hubiera sido por él, tal vez nunca habría tenido el valor de revelar mis sentimientos y luchar por el amor que ahora tenemos en nuestras vidas.

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