Fase veintiuno: Al final, eran cuatro mosqueteros.

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...

El tono de Luke rebotaba incesantemente en mi cráneo, provocándome la sensación de que saltaba mientras aplaudía, gritando de felicidad; Demon, por su lado, estaba que se caía de culo por la impresión (y no es que estuviese viéndolo), sino, más bien, que lo conozco bastante para decir que "está" temblando, presionando sus puños a los costados, de impotencia.

Y yo...pues yo estoy estático, intentando asimilar todo.

-Hermano, ¿estás bien...?- la mano de Laeti sobre mi hombro me hizo pegar un salto; la miré, girando mi rostro hacia ella de manera algo lenta- Puedes salir, si quieres, te interrogarán en el cuartel-. Negué-, es por tu bien mental, ya estás bastante cagado-; la mascarilla le amortiguaba la voz.

"...Cada día estoy más enamorado de mi Derek- soltó una risita Luke-, pero es injusto, yo quería matarlo..."

No respondimos; me bajé la bandana y un olor putrefacto invadió mis pulmones.

"...Asco", pensé, antes de que tres arcadas me hiciesen doblar la espalda e inclinarme hacia uno de los lados, devolviendo el contenido del desayuno y agregándole repulsión la escena.

-Te he dicho que no comieses nada. Y que no te quitaras el bendito pañuelo- me reprendió mi tío, que hasta el momento era el encargado de la investigación; seguí tosiendo, con mi dulce hermana afirmándome para que cayera de bruces a mi "cóctel" de alimento batido y molido en extremo.

Quise voltearme, ladearle el labio y responderle, pero, como era obvio, en estas circunstancias me era imposible; habían pasado un par de días desde que Derek había vuelto a su infancia, de eso, ni de lo anterior, no recuerda nada. Quizá es mejor así, definitivamente lo es, pero, eso no ayuda en nada a la investigación.

Jadeé, tratando de regularizar mi respiración, colocando mis manos un poco más arriba de mis rodillas, encorvado, un poco; se me pasó por la mente de que era la primera vez que al jefe de informática (o lo que sea) del club se demoraba tanto en hackear o meterse en alguna tonta red, página, archivo, o qué sé yo, ni siquiera lo he visto.

-Ve afuera- tajó la mayor.

-No...no quiero...

-Por último ve al baño, que has vomitado hasta en tus zapatillas.

-No exa- me incliné nuevamente. Está bien, ahora si he manchado mis zapatillas; ella blanqueó los ojos.

-¿No exa qué? ¿Me estás diciendo exagerada? Santiago, acabas de vomitar sobre mí- abrí la boca-, Y NO HABLES-; cortó con cierta urgencia-, vas a hacer que mi estómago también se ponga sensible, a pesar de llevar esta cosa-. Apuntó la mascarilla. Suspiré, limpiándome la barbilla con la manga de mi suéter gris.

-Ya vuelvo- balbuceé, tambaleándome un poco, volviendo a colocarme la bandana y tratando de ignorar el cadáver, yacido en el piso, además de, claro, los intentos de Luke por hacerme voltear, y continuar machucándolo; saqué la lengua sin querer, es...

"H-hay veces en las que, de verdad...solo quiero tenerlo a mi lado y abrazarlo"- tartamudeó Demon, para mi sorpresa.

"Creo que todos queremos eso", le respondí. Imaginé su sonrojo, solo sonreí un poco, lo comprendo, bastante.

"¡...H-HABLO DE LOS CONSOLADORES QUE ME TIRASTE A LA BASURA!"- reclamó.

"Oh...que yo sepa no utilizabas consoladores", bingo.

"¡P-PARA TU INFORMACIÓN...! ¡MIS REVISTAS PORNO ENTONCES!"

"Esas las quemé, y con gusto."

¡Qué no soy homofóbico! (BoyXBoy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora