V.

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Habían pasado dos semanas desde la visita al consultorio. La única persona que sabía de mi embarazo era mi padre y le había pedido que no se lo dijera a nadie, quería decírselos a todos cuando Ana y Liam volvieran de su luna de miel este fin de semana.

Ahora me encontraba en el apartamento, acababa de llegar de la oficina y fui directo al baño para tomar una ducha. Me sentía acalorada y por alguna extraña razón no había podido dejar de pensar en Dylan y en mi haciendo cosas que involucraban mucho tacto y nada de ropa ¿Acaso me estoy convirtiendo en una pervertida? No, no lo creo.

Cuando salí, me puse un camisón de seda color negro que no era para nada inocente; me seque el cabello y lo deje suelto.

Cuando Dylan llegó yo estaba en la cama, me habia quedado dormida mientras lo esperaba, mantuve mis ojos cerrados y lo escuche moverse por la habitación hasta que oí cono cerraba la puerta del baño y luego como caía el agua de la ducha. Minutos después salió y lo sentí arroparme con la colcha, tome su brazo.

-Te estaba esperando - Susurré tomándolo por sorpresa.

-Creí que estabas dormida. - Murmuró acariciando mi mejilla.

Se acerco y beso mis labios de manera suave, pero yo no lo quería suave, no en este momento, así que lo tome de la nuca y profundice el beso, no dude en meter mi lengua a su boca. Sus manos abrieron mi bata y me la quito sin romper nuestro beso. No necesitaba decirle lo que quería, él lo sabía.

Comenzó a besar mi cuello, haciéndome suspirar, una de sus manos fue a parar a uno de mis pechos, el cual acarició por encima de la tela de mi camisón.

-Usa ropa para dormir muy interesante señora Collins. - Susurro mientras besaba mi mentón.

-¿Te gusta?- Pregunte entre jadeos.

-En este momento prefiero que no lo tengas puesto. - Murmuro llevando una mano a mi trasero.

-Menos platica y mas acción. - Susurré acariciando su espalda.

-Todo a su tiempo. - Respondió tomando el dobladillo del camisón y quitandomelo. - No pasa nada si vamos lento nena.

-No lo quiero lento, así que callate y complace a una mujer doblemente embarazada.

Me miro con una sonrisa y luego beso mis labios de manera dulce.

-Amo que estés embarazada.

-Yo también.

Después de eso fuimos solo manos y bocas, tocando y besando a nuestro antojo. Nunca me cansaría de hacer el amor con Dylan, en todo caso, cada vez se vuelve mejor.

A la mañana siguiente me sentía totalmente agotada, pero aun así seguí moviéndome encima de Dylan, disfrutando por completo de la sensación de tenerlo dentro de mi, sus manos estaban en mis caderas, controlando mis movimientos. Ahora me había convertido en una mujer realmente ruidosa, me acerque a su boca y lo bese profundamente, callando todos mis gemidos. Me encantaba tenerlo debajo de mi, así podía ver mejor sus ojos y las expresiones que hacia.

Anoche nos habíamos dormido hasta después de hacerlo dos veces y hoy en la mañana me había despertado con ganas de más. Las hormonas definitivamente nos mantendrán ocupados.

Gemi cuando Dylan giro, de manera que ahora yo estaba debajo de él, sus embestidas se hicieron mas rápidas y ahora realmente estaba gritando.

-¿Te gusta eso? - Murmuro en mi oído, para después morder el lóbulo de mi oreja.

Asenti incapaz de articular una palabra, comencé a besar su mentón, luego su cuello y cuando llegue al límite lo atraje hacia mi y lo bese de manera profunda, él se movió unas cuantas veces mas y cuando llego a su limite gimió y se dejo caer sobre mi solo unos segundos antes de rodar y acostarse a un lado de mi, tomó mi brazo y me acerco a su pecho, recargue mi cabeza en su hombro mientras el hacia círculos en mi espalda de manera cariñosa.

Tentación: Escenas Extrasحيث تعيش القصص. اكتشف الآن