Verde Escarlata (Harry Potter)

Capitulo 15: Los otros colegios

La pobre Elizabeth no sabia que había estado a punto de pasar.

Ella solo quería consolar a Draco, pero casi había terminado besándolo. 

Al menos, eso, aunque ella no lo supiera claramente, si que habia consolado al rubio. 

El momento de la única vez que había besado a su amigo aparecio en su mente. ¿Acaso se iba a repetir? ¿Acaso ellos dos querían que se repitiera?

Ella no sabia que quería. Tal vez existía la posibilidad de que Draco la atrajera un poco...

Pero de todas formas su amigo no era capaz de amar ni a una mosca. Por más que ella lo quisiera, él seguiría siendo el mismo. Por mas que la hubiera besado una vez, y hacia rato hubiera estado a punto de hacerlo otra vez... Draco no le iba a prestar atención ni a sus propios sentimientos.

Y eso lo tenia bien claro. 

Elizabeth se acostó temprano, como la noche anterior, y cerro los ojos. Pero no se pudo dormir hasta mucho mas tarde. 

Como siempre, Liz quería evadir sus problemas una vez mas olvidándolo todo.

Pero iba a llegar a un punto en su vida, en que no podría volver a hacer eso nunca más. 

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Semanas después del comienzo de las clases, todo siguió un transcurso normal.

La primera vez que Draco y Elizabeth se vieron despues de "ese momento especial" nada habia cambiado aparentemente. El chico la trataba como siempre. Y nunca menciono lo que habia pasado.

Elizabeth siguio su ejemplo. 

Asi, las cosas para Liz y Draco se volvieron solo un poquito incomodas, y al cabo de un tiempo siguieron igual. La relación de la chica con los gemelos, también. Nadie se había enterado de su encuentro con Draco y nadie no la haría nunca. Fred y George aceptaban la amistad de Elizabeth con él apenas, asique no seria bueno contarles detalles de su relación. Ella les estaba ayudando a conseguir una poción envejecedora para que pudieran entrar al concurso de los tres magos. 

En un frió día de Septiembre, llegaron a Hogwarts los estudiantes de Durmstrang y Beauxbatons. Ambos haciendo una asombrosa entrada. Hubo un especial revuelo por el famoso jugador de Quidditch: Victor Krum.

Todas las chicas se volvían locas, pero a Liz no le interesaba mucho. 

Ese día tuvieron un banquete. Los chicos de Durmstrang se habían sentado en la mesa de Slytherin y Elizabeth podía ver como se quitaban las grandes pieles que los cubrían y se acomodaban relajadamente en las sillas. Ninguno le llamo la atención.

Las chicas de Beauxbatons acaparaban mucho la atención de todos. Una rubia de bufanda rosa, se acerco a la mesa de Gryffindor y pidió algo. Liz observo atenta como Harry Potter le respondía y como su amigo Ron se quedaba sin habla. Dio vuelta la cabeza y se dio cuenta de que varios chicos de Slytherin también la estaban mirando. En especial Draco que seguía todos sus movimientos. 

-Oye, cuidado. Se te esta llenando el "Bouillabaisse" de baba - le dijo Liz intentando ser divertida

-¿Qué? - dijo volviéndose hacia ella

Elizabeth solo rodó los ojos y se concentro en su plato. 

Luego de que todos comieran, Dumbledore anuncio que los que quisieran participar de El Torneo de los tres magos debían poner su nombre en el cáliz de fuego, que se encontraría mañana por la mañana en el vestíbulo. También que ni intentaran participar los menores de 17 años porque había trazado una raya para que ningún menor la cruzara.