Dejaría por siempre de acariciarte, porque sé que de alguna manera me sientes.
No quiero que el mundo me vea, porque no creo que lo entendiera.
Cuando todo parece como en las películas, sí, sangras solo para saber que estás vivo.
Dejaría por siempre de acariciarte, porque sé que de alguna manera me sientes.
No quiero que el mundo me vea, porque no creo que lo entendiera.
Cuando todo parece como en las películas, sí, sangras solo para saber que estás vivo.
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club nocturno, lugar donde conocerá a freen, una empres...