Existen un sinfín de ejemplos para explicar con detalle que es ser la segunda opción. Es algo que nos sucede a todos en algún momento de nuestras vidas. A Martina Stoessel, una joven de tan solo 19 años esto nunca le había sucedido. Porque era hermosa, talentosa, inteligente y buena. Los chicos la definían como una "Trifecta". Nunca fue el plato de segunda mano de nadie. Pero dicen que siempre hay una primera vez para todo. Y Martina fue el plato de segunda mano de Jorge Blanco, y en el peor de los casos...