La vida de Mikahela no es tan sencilla como le hace pensar a sus amigos y personas que la conocen, la sonrisa que muestra a todos solo es una fachada, una simple máscara que le ayuda a sobrellevar lo que sucede en la intimidad de su casa. La llegada de un cuaderno será la vía de escape a esos pensamientos que no puede compartir con nadie más, dicho cuaderno compaña a Mikaelah en sus momentos más oscuros, es su amigo y su confidente cuando el mundo parece que se le viene encima.