Cuando te presentas con alguien nuevo en mayoría,tratamos desesperadamente en demostrar las mejores cosas que somos e incluso para encajar fingimos cosas que nunca seremos realmente.... Y te sientes ofendida por algo que alguien se atrevió a decir en voz alta,que tú ya estabas pensando,pero que misteriosamente no tenías la suficiente paz mental de aceptar,ni el suficiente amor propio como para soportarlo, normalmente es porque te pesa demasiado esa realidad y prefieres arrastrarla detrás de ti que cargarla en tus hombros.... ¿Cómo te debes sentir cuando alguien espera tantas cosas de ti que probablemente no pasarían si no lo estuvieran esperando? ¿Y si te roban la sonrisa,como cuándo un niño extraño se llevaba uno de tus antiguos juguetes y te duele pero no dices nada porque eres demasiado grande para jugar con él,sin querer,mucho menos queriendo lastimarte,solo no se dan cuenta, están demasiado ensimismados en lo lindo que es el juguete o solo no tienen la edad suficiente para darse cuenta de eso.... A veces, quisiera volver a esos días....dónde mi mayor preocupación era correr por los pasillos de mi hogar en Navidad buscando bajo el árbol el regalo del desconocido y totalmente real para mí en ese entonces Noel