No, esto no debía ocurrir ahora, faltaban poco menos de dos semanas para ese día, según lo que habían escuchado de los nativos de Ciudad Pentagrama, incluso lo tenían marcado en el almanaque de la cocina... ¡Maldita sea! ¡Era imposible, era...! Una terrible noche en la que Moxxie y Millie fueron sorprendidos por un repentino Día de Exterminio.