El gnosticismo no es una filosofía, es una creencia sincrética, una corriente muy antigua de pensamiento que fluye desde el origen y atraviesa toda la historia de la humanidad impregnando nuestra mente de remanencias en forma de supersticiones, leyendas, mitos, misterios y religiones que revelan la eterna preocupación del hombre ante la inevitabilidad de la muerte, el acabamiento del ser y la necesidad de trascender la realidad del mundo físico y realizar nuestros sueños de inmortalidad.