Dabi sentía los párpados pesados, intentó abrirlos varias veces pero nada funcionaba, los abría en un lapso muy corto y volvía a cerrarlos, escuchaba la máquina de su ritmo cardíaco acelerarse, no entendía qué era lo que pasaba pero prefirió seguir durmiendo, estar observando a Tomura toda la noche lo cansaba, pero verlo cerca lo emocionaba. Volvió a abrir los ojos, se sentía igual de cansado y más pesado de lo normal, se sentó sobre la cama y vio a sus padres durmiendo en una silla, se alegró de que lo habían ido a visitar pero él debía ir con Tomura, cerró los ojos, estaba en el cuarto del peliceleste, se acostó en la cama y volvió a dormirse, sintió algunos toques sobre su rostro, al abrir los ojos vio a Tomura, se veía preocupado
-¿Qué es lo que sucede?- Preguntó Dabi, se sentó en la cama y talló sus ojos, Tomura tomó una almohada y lo golpeó- ¿Por qué me golpeas?
-Me preocupaste idiota, volviste a desaparecer sin decir nada, te fuiste en año nuevo y no regresaste- Tomura rascó su cuello y lo encaró- Es 5 de enero te fuiste por 5 malditos días
-¿Cinco días? No puede ser yo solo quería dormir un día, estaba cansado y necesitaba descansar- Comentó Dabi intentando hacer cuentas- Bueno ahora estoy aquí
-¿Querías dormir un día? ¿Tú te sientes cansado? ¿Te sientes bien?- Preguntó Tomura preocupado, Dabi asintió- Es que te ves más pálido de lo normal, eso explicaría todo
-Oh, supongo que es el cansancio- Dabi se volvió a acostar en la cama y se tapó con la cobija, Tomura se recostó a su lado y lo miraba mal- ¿Qué pasó Tomura? ¿Te gusta lo que ves?
-No idiota, es que... se supone que nos dormimos a la misma hora, tú estás cansado y yo no, lo cual no tiene sentido porque dormimos el mismo tiempo- Dabi le dio una sonrisa nerviosa y Tomura entendió- Espera un momento ¿Tú finges estar dormido? ¿Qué es lo que haces despierto?
-Nada, nada... solo te observo dormir- Tomura frunció el ceño, tomó una almohada y comenzó a golpearlo- Por eso no quería decirte, te ibas a enojar
-¿Para que me quieres ver dormir? Estamos juntos todo el día, no hay razón por la cual quieras verme- Tomura estaba sonrojado al escuchar eso- Será mejor que lo dejes de hacer, por que te está afectando
Dabi asintió y volvió a dormir, estaba cansado y no entendía el por que, ya había dormido 5 días y volver a dormir no era bueno, pero no le hizo caso a sus pensamientos y cerró los ojos. Al abrir los ojos vio a Tomura observando, le dio una sonrisa floja y se sentó con cuidado en la cama. Al intentar levantarse no sintió su pierna derecha, se tensó por no poder lograrlo, a los minutos la pudo sentir y caminó hacia la ventana, estaba nevando más de lo normal, al voltearse vio a Tomura con la misma sonrisa
-¿Qué es lo que pasa?- Dabi caminó lentamente hacia la cama nuevamente y se sentó frente a Tomura, el peliceleste le enseñó un sobre- No puede ser, es la respuesta de tu universidad, espera un momento ¿Qué no se supone que llegaría el 8?
-Para dormir 3 días tu cerebro no está funcionando, son las 1:30 de la mañana, es 9 de enero - Tomura guardó la carta en su abrigo- Has estado durmiendo, eso has estado haciendo ¿Ya te sientes mejor?
-... Sí, ya me siento bien- Dabi le dio una sonrisa para tranquilizarlo, Tomura asintió y se recostó sobre la cama, Dabi hizo lo mismo- ¿Qué dice la carta? ¿Ya puedo felicitarte?
-No la he abierto, estaba esperando a que despertaras- Tomura explicó, de la nada se levantó y corrió a su armario- Debe ser especial, tú me hiciste ver lo que de verdad quería, vayamos a la colina, ahí la abriremos
-Tomura está nevando afuera, más de lo normal, seguro hace frío- Tomura no lo escuchó y comenzó a ponerse algunos suéteres y chamarras- Tomura escúchame, vas a congelarte, podemos abrirla mañana
-Eso no sucederá, lo haremos hoy, salté para que pueda ponerme otros pantalones- Dabi se paró de mala gana y lo esperó afuera del cuarto, de verdad se sentía cansado- Listo, tú también deberías ponerte algo
Dabi alzó la mirada, Tomura tenía una orejeras blancas con la cara de un gato, un gorro de colores, tenía dos bufandas que cubrían la mitad de su rostro, tenía el guante que había cortado y uno normal, 4 chamarras y se había puesto 3 pants, ese día hacía demasiado frío, Tomura lo ayudó a pararse y caminaron hasta la colina. Dabi se sentó en seguida se sentía algo cansado, Tomura lo entendió y se sentó, el pelinegro tenía razón, hacía más frío, día más nieve de la normal, pero ahora no importaba eso, sacó el sobre de su abrigo, se voltearon a ver y lo abrió
-¿Qué dice?- Preguntó Dabi, Tomura leía con rapidez los versos, el pelinegro se hartó de eso, intentó tomar la carta pero no lo logró, suspiró enojado- Di algo Tomura ¿No te aceptaron? No me digas eso
-No... Me aceptaron, me quieren dar una beca- Tomura lo volteó a ver, ambos estaban felices, se levantaron de ahí y comenzaron a brincar de alegría- Me aceptaron, me ire a Fukuoka así que se hará realidad lo que dijiste, te irás conmigo Dabi
-Eso haré, quiero verte feliz por escoger eso- Dabi dejó de brincar y quedaron frente a frente- Dejarás lejos a Chisaki, eso también me alegra, aunque le agradezco por ser el único que no te trató mal
-Chisaki es una buena persona, aunque por sus motivos me habló, creo que es bueno y merece a alguien que lo quiera de verdad, yo no lo quiero- Tomura explicó, ambos miraron al cielo- Chisaki encontrará a alguien que de verdad no aprecie, pero ese no soy yo
-Parece que te gusta ¿Acaso eso es verdad?- Preguntó Dabi, el peliceleste negó y suspiró- Por un momento me había espantado, no puedo competir con esos ojos dorados
-Tus ojos están bien, son profundos- Tomura veía el vapor que salía cada vez que hablaba- Quiero me enseñes nuevamente mi constelación, soy aries, nací el 04 de abril
-Pensé que era una tontería para ti- Dabi suspiró y vio por el rabillo de sus ojos- Supongo que no sería malo enseñartela... Es una pequeña raya y luego se une con esas 4 estrellas, esa es la constelación de aries, la mía es la de acuario, es más extensa y parecen dos figuras unidas, me gusta que me escuches
Tomura sonrió cerrando los ojos, amaba ver a Dabi sonreír por hablar sobre las constelaciones pero no se veía o escuchaba entusiasmado, al abrir los ojos lentamente y fijar su mirada en Dabi veía claramente como estaba pálido, como estaba cansado, se veía que quería dormir pero aguantaba por Tomura y su gran noticia. Lo que no había notado era que veía luz a través de él, guardó la carta en su abrigo y se le acercó, llevó una mano a su rostro y al intentar tocarlo su mano pasó a través de él, ambos se sorprendieron ante eso, Tomura volvió a hacer la misma acción varias veces pero pasaba lo mismo, sus labios comenzaron a temblar, el aire se iba de sus pulmones y sentía un nudo en la garganta
-No- dijo en un susurro, comenzó a jadear, sus manos temblaban cada vez más, alzó la vista, Dabi estaba pálido y se veía a través de él, negó con su cabeza varias veces y apretó su boca- No, no estoy listo
-Tomura... yo... estoy desapareciendo- Dabi miró su mano veía la nieve detrás de ella, veía como caía y se iba al suelo, Tomura seguía negando con la cabeza- Tomura... Estás llorando
-¿Qué?- Sus dedos tocaron su rostro, el pelinegro tenía razón, las lágrimas fluían sin cesar, recordaba que la última vez que había llorado había sido cuando su madre y hermana habían muerto, miró a Dabi- No, todavía no puedes irte, no debes irte, por favor
-Tomura, tal vez viva, no lo sabes- Dabi intentó sonreírle, pero el peliceleste no podía escuchar bien, para él eso significaba que Dabi no volvería- Tomura, veme por favor y dime algo antes de que me vaya
-No, tú no irás, tú estarás bien y volverás a la normalidad- Tomura alzó la mirada, vio como Dabi se hacía cada vez menos visible, apretó su abrigo con fuerza- Dabi, has sido lo mejor que me ha pasado este año, quiero pasar contigo más tiempo y quiero que se detenga y no te vayas
-Tomura yo ya te dije todo lo que siento por ti- Dabi sintió dolor en su cabeza, cerró los ojos e intentó concentrarse- Y eso no cambiará sin importar que
-No puedes irte, debemos hacer todo lo que planeaste, debemos ir a todos los lugares a los que has ido, debes ir a la universidad- Tomura comentó entre sollozos, limpió algunas lágrimas y vio a Dabi sonreír- Tú también me gustas Dabi, no quería aceptarlo pero me gustas, me haces feliz y te quiero
-Tomura... gracias por todo- Tomura vio como salía sangre de las quemaduras de Dabi, ambos lloraban, no querían separarse- Te encontraré, lo juro
Dabi alzó su mano, Tomura talló sus ojos y corrió hacia él, alzo su mano que tenía los dedos descubiertos, quería ver si podía sentirlo por última vez, pero era tarde Dabi había desaparecido por completo, su cuerpo se había desvanecido, solo quedaba el recuerdo de su sonrisa, el peliceleste se desplomó en el suelo, intentó recuperar la respiración pero los sollozos y jadeos eran cada vez mas fuertes, apretaba con fuerza su chamarra, le dolía el pecho, sentía un dolor inexplicable, sentía como si su vida estuviera vacia nuevamente, Dabi había desaparecido, él no sabía si seguía con vida o había muerto, entonces lo supo, debía ir al hspital, necesitaba ir a Tokio y verlo, al intentar levantarse, sus piernas fallaron, la vista comenzó a hacerse cada vez más oscura, de la nada todo se había hecho negro... Dabi ya no estaba a su lado
Tomura comenzó a abrir lentamente los ojos, el techo era blanco, había demasiada luz, volvió a cerrar los ojos pero nuevamente los abrió, movió su cabeza a la derecha vio un florero, al voltear al otro lado vio una ventana y una máquina para ver su ritmo cardíaco, al pasear su mirada vio a Hawks en una silla, parpadeó varias veces, entonces Hawks se puso a su lado, tenía lágrimas en los ojos
-Tomura, nos preocupaste muchísimo, tus padres tuvieron que ir a trabajar, espera- Tomura no dijo nada y vio a Hawks desaparecer, volvió a cerrar los ojos, vio unas batas blancas revisandolo, poco después se fueron- ¿Qué demonios hacías en la nieve?
-Yo... - Tomura volvió a cerrar los ojos, recordó a Dabi desaparecer y las lágrimas volvieron a su rostro, se levantó enseguida- Necesito irme, necesito ir a ver a Dabi, quitame estas cosas
-¿Qué? Tomura no hagas eso, escúchame, Dabi no existe- Tomura lo volteó a ver con lágrimas, Hawks suspiró e hizo que se recostara- Investigué a cada persona en esta ciudad pero no había nadie con ese rostro, no hay nadie así, por favor deja de mentirte
-¡NO! Él está en hospital, necesito ir a verlo, yo le dije que iría a verlo, ahora necesito irme- Tomura se quitó la intravenosa del brazo izquierdo, pero al intentar quitar la sábana se detuvo- ¿Qué me pasó?
-Tomura, has estado inconsciente una semana, tus padres se despertaron y no te encontraron en tu cuarto, salieron a buscarte pero no estabas en ningún lado, le avisaron a la policía, comenzaron una búsqueda, te encontraron después de 4 días y te trajeron al hospital, calentaron tu sangre, te llenaron de fluidos calientes y demás pero- Tomura observó su mano izquierda- No pudieron salvar tus tres dedos, no tenías protección ahí y la nieve detuvo el flujo sanguíneo en esos dedos, los tuvieron que cortar... Lo siento
-... ¿Eso es todo? Me tengo que ir- Tomura dejó de ver su mano y se quitó todos los cables que había, se levantó con cuidado y caminó afuera de la habitación seguido por Hawks- Necesito ir a Tokio, Dabi me esta esperando, necesito comprobar que está vivo
-No puedes irte, no te han dado de alta y necesitas seguimiento- Tomura ignoró eso y fue hacia el ascensor- ¡Tomura! ¡Deja de hacer esto! ¡Nos preocupas a todos y no puedes ir a buscar algo que no existe!
-Cállate, tú no sabes nada- Tomura estaba dolido al escuchar eso, Dabi existía y debía verlo, se lo había prometido, cuando el ascensor se abrió vio a sus padres y a Chisaki- Padre...
-Tomura- Su padre salió del ascensor y lo abrazó con fuerza, Tomura correspondió al abrazo- Nos preocupaste tanto ¿Por qué saliste de la casa? ¿Qué hacías ahí?
-Necesitamos ir a Tokio- Hawks lo veía decepcionado y las personas que venían del ascensor no entendían nada- Yo estoy bien pero... Dabi, él me necesita, debe estar asustado
-Dabi no existe Tomura, tienes que entender eso, él no existió- Tomura se sorprendió al escuchar eso y bajó la mirada- Hawks dile a la enfermera que llame a psiquiatría
-¿Qué? No, yo no estoy loco, solo vayamos al Hospital de la Universidad de Tokio y lo conocerás- Tomura vio como llegaban los de ese departamento y lo tomaban de los brazos- No, yo estoy bien... sueltenme
Tomura intentaba luchar para ser soltado, pero no lo dejaban, miró su mano derecha y vio aquel anillo, sonrió un poco, debía luchar y llegar con Dabi, pero ya había sido sedado, su mirada se oscurecía, lo último que había visto fue aquel anillo plateado. Al despertar vio como estaba en un cuarto sin ninguna ventana, se levantó y miró a su alrededor, solo estaba la cama y peluches, la puerta fue abierta dejando ver a un hombre de baja estatura algo relleno, apartó la vista y miró sus manos, las cuales le decían que todo había sido real
-¿Sabes por qué estás aquí?- Tomura asintió sin dejar de ver sus manos- Tus padres y amigos me dijeron que tuviste un accidente en abril y que desde ese momento has imaginado a una persona llamada "Dabi"
-No la imagino, él es real, yo lo toque- Tomura comentó molesto, odiaba escuchar que Dabi nunca había existido- Sí no me creen no es mi problema, usted tampoco lo hará
-Yo te creo Shigaraki, completamente- Tomura lo volteó a ver esperanzado- Para que confíe completamente en ti haremos un ejercicio, debes separar estas imágenes y decirme cuales son reales y cuáles no
Tomura asintió y ocupó su mano derecha para hacer lo que le habían pedido, el Doctor le hizo varias preguntas, él las contestó plácidamente, sentía que alguien lo comprendía, después de hablar con él durante vario tiempo salió de la habitación, fue con sus padres y se sentaron en su consultorio
-No es esquizofrenia, solo ve a una sola persona y cosas que le da, por ejemplo me enseñó ese anillo que tiene en su mano, quiero saber si ustedes no fueron los que se lo dieron- Los adultos negaron- Es una alucinación, se sentía solo y por eso la creó, iniciaremos con antidepresivos y para la alucinación, mejorará
-Gracias Doctor Ujiko- El hombre asintió, llamó a una enfermera y dio lo indicado, fueron llevados la habitación del menor- Tomura, me alegro que estés bien, dime cómo te sientes
-Lárgate- Comentó Tomura al ver al empresario, tomó los peluches y comenzó a lanzarselos, estaba enojado- Me tratan como loco y no lo estoy, no quiero verlos
Tomura fue sedado nuevamente al ver su agresividad, el solo quería mostrarles que no estaba loco. Los días pasaban y Tomura sentía que ahora sí perdía la cabeza, era medicado, estaba amarrado a su cama cuando había visitas, los antidepresivos no le funcionaban, perdía cada vez mas el brillo de sus ojos se, su mirada se quedaba fija en su anillo y aveces miraba la ventilacion del techo, lloraba todas las noches al recordar aquel día bajo la nieve, nadie confiaba en él, lo llamaban loco y le hablaban como si fuera un retrasado, comía cada vez menos, había pedido libros para distraerse pero todo tenía una razón.
Eran las 6 de la mañana, Tomura había apilado los libros para llegar a la ventilación y salió por ahí, había sido difícil solo ocupar una mano pero lo había logrado, fue a su casa, tomó ropa y algo de dinero, corrió hacia la estación de autobuses y compró un boleto hacia Tokio, subió tranquilamente al autobús, era menor de edad y tenía una pulsera que decía "Paciente psiquiátrico" Por suerte el viaje iba tarde y no había dado tiempo de revisar aquello, al llegar pidió un taxi al hospital, subió a terapia intensiva y buscó el cuarto. Al entrar no había nada, las lágrimas se acumularon en sus ojos, vio a una enfermera entrar y lo sacó de ahí
-¿Qué haces aquí? ¿Cómo lograste pasar?- Tomura no decía nada, solo veía aquel cuarto vacío, no había ni una nota, la enfermera lo sentó en una silla- ¿Qué pasa? ¿Estás perdido?
-¿Dónde está el paciente de esa habitación?- Tomura dijo en un susurro, la enfermera lo vio confundida, pero al ver las lágrimas intentó acariciar su mano izquierda, notando su amputación- ¿Dónde está Dabi?
-Llama al Doctor, ahora- La enfermera vio su pulsera, leyó el nombre del hospital y lo recordó- Shigaraki Tomura, lo siento pero ese cuarto no ha sido usado, nunca se uso
El peliceleste se sorprendió al escuchar eso y se quedó en trance, le ofrecieron té y algo de comer mientras era revisado por un Doctor, poco después fue subido a psiquiatría pero eso ya no le importaba a Tomura, él había perdido a Dabi, volvieron a hacerle un examen pero el no dijo nada esa vez ¿Para que hablaría si nadie creía lo que él decía? Lo hicieron quedarse en un cuarto, pero él solo miraba hacia la ventana. Después de dos horas llegaron sus padres, lo abrazaron y comenzaron a llorar
-Tomura ¿Por qué hiciste eso? Pudiste afectar al hospital por escaparte- Tomura no dijo nada y miró hacia su mano- Tomura por favor, dime algo... Lo que sea, solo háblame
-...- El peliceleste comenzó a llorar nuevamente y alzó la vista- Dabi no está
Sí, decidí hacer doble actualización de esta historia, perdón porque sea cortito el cap, pero lo repondré en el siguiente, me gusta esta historia, por eso actualice y estaba a triste y si yo me voy al infierno también lo demás... No es cierto, solo me dieron ganas de compartirlo. Bueno ¿Qué les parece? ¿Dabi está vivo o muerto? ¿Esta bien que le digan loco a Tomura? ¿Esto afectará a Tomu?