Con cada paso y acción, los días pasaban, como también semanas, entre meses hasta convertirse en días muy rápidos para cierta pareja.
Jungkook y Jimin.
Desde aquel día con la inesperada propuesta ambos decidieron conocerse y salir a citas para crear confianza, para el castaño fue muy apresurado en un inicio, pero una vez empezó a conocer más de aquel Alfa que lo traía loco, jamás pudo arrepentirse de su decisión.
Ahora con cinco meses de embarazado y conocerse, era muy feliz. Cuando empezaron los antojos Jungkook deseó tanto estar a su lado cumpliendo cada capricho suyo, por Jimin haría cualquier cosa, hasta se desvelaria por cocinar y darle todo el amor que podría necesitar.
Porque así se sentía estar enamorado.
Actualmente Jimin vivía más en la casa de Jungkook que en la suya, estaba feliz, su vida había cambiado completamente y todo se debía a su primer amor. Ya que como jamás tuvo tiempo para sí mismo, nunca pudo conocer a más gente ni socializar.
No podría quejarse.
— Jiminie — la voz del Alfa resonó por las paredes y con una sonrisa fue hacia la puerta para recibirlo.
Claro, con bastante cuidado ya que también tenía a su cachorrito dentro suyo. Al llegar fue recibido por un abrazo y sintió un beso en su barriga haciéndolo sonreír, su pecho se sintió cálido y su corazón empezó a latir ante tan hermoso sentimiento de amor.
— ¿Cómo están los bebés más hermosos del mundo?
— Estamos bien
Jungkook le sonrió y plantó un pequeño beso en su frente mientras su cuello era rodeado por el más bajo, acurrucandose en su pecho, oliendo su fragancia a Café, chocolate y menta. Para muchos era un olor raro, sin embargo ante el olfato de Jimin era lo más rico y tranquilizador que podía sentir.
— Te extrañe — acarició la espalda del menor cerrando su ojo al sentirse completamente tranquilo.
Con Jimin todo era pacífico, gracias a que este emitía su olor a flores, chicle y vainilla, se sentía que estabas en un lugar con olores tan ricos y frescos. Al castaño lo podría describir como el agua y él como un pez, pues, sin Jimin no podría vivir. Era su todo.
— Tengo hambre ¿Me trajiste frappuccino de fresa? — preguntó empezando a revisar las bolsas hasta sentir como era apartado delicadamente.
— Está lloviendo Jimin, te resfriaras
— P-pero ha pasado tiempo s-sin probarla
Pronto las lágrimas se asomaban en sus pequeños ojitos mientras su labio temblaba y hacia un puchero, una imagen tan tierna y convencible ante el Alfa quién siempre caía ante sus encantos.
— Aaah — se revolvió sus cabellos negros — bien, aquí tienes, pero es la última vez que te com-
Sus palabras quedaron al aire cuando de su mano fue arrebatada el frappuccino.
— Gracias, gracias
— ¡Espera! — Jimin miró al mayor — ¿Y mi premio?
El Omega sonrió para ir hacia el pelinegro y dejar un besito en sus labios.
Aquello sorprendió al mayor, pues él sabía que podían dárselo pero eran muy pocas veces ya que aún no quería espantar al menor, por eso estaba sonrojado y feliz de haber recibido un pequeño beso, se conformaba con ello.
Ordenó todas sus cosas en su oficina para cambiarse a un atuendo más fresco, con pasos seguros fue hacia la cocina y pudo ver al menor tomando de su frappuccino balanceando sus piecitos que no llegaban a tocar el suelo. Con una gran sonrisa se puso a su lado besando su frente con amor.
Sin embargo un celular interrumpió tan hermoso momento, Jungkook al ver el nombre se puso tenso para levantarse e irse a otro lugar.
— Ahora vengo Jiminie
El Omega estaba curioso por saber quién lo llamó ya que pudo percibir una actitud nerviosa en el mayor, sin importarle siguió bebiendo de su bebida hasta terminarla e ir por Jungkook. Fue al segundo piso y quedó quieto al sentirlo gritar molesto, se acercó y trató de oír mejor.
— Te dije que no te metieras en mi vida, yo ya tengo a alguien y no pienso enlazarme con cualquier Omega que a ti te parezca conveniente para mi, es la última vez que hablo de este tema
Pronto hubo silencio y Jimin por alguna razón se sintió triste ¿Acaso alguien estaba en contra de su relación?
Si es que se le podría llamar así.
Tratando de ser silencioso bajó las escaleras para ponerse su chaqueta e irse, quería estar solo por unos momentos, no quería sacar conclusiones rápidamente pero el estar embarazado era peor ya que su estado de ánimo era constante.
— Jimin ¿A dónde vas?
— I-iré a visitar a Jin, le prometí pasar tiempo con él — trató de no verse nervioso.
— Pero está lloviendo y enfermaras — Jungkook detuvo su acción y lo volteó — dime la verdad ¿Pasó algo?
— N-no, sólo quiero ver a Jin
— Estas esparciendo feromonas de tristeza Jimin
— Déjame
El castaño se alejó para irse al baño y cerrar la puerta, trató de tranquilizarse, no podía hacer mucho porque tampoco quería que su cachorrito dentro suyo le pase algo.
— Jimin abreme la puerta por favor, hablemos para solucionar esto, debes decirme lo que pasa
— E-es muy estúpido
— Es estúpido el no decirme nada y dejar esto a un lado, tu me importas mucho y no quiero que estemos así
Jimin un poco convencido abrió la puerta y fue recibido por unos brazos, frustrado consigo mismo al sentirse de esta manera lloró hasta cansarse, fue cargado al sofá para sentir caricias en sus mejillas húmedas.
— Dime cariño ¿Qué pasa? —
Jungkook le habló tan dulcemente, derritiendo el corazón del menor — cualquier cosa podemos solucionarlo
— Yo subí y te escuché hablar por teléfono — más lágrimas salieron — J-Jungkook tu eres mi primer amor, contigo tuve mi primer beso, eres el primero en todo y e-escuchar que no aceptan nuestra relación me hace sentir un inútil que solo carga a tus cachorros, siento ser una carga para ti, no sé cómo sentirme, ni siquiera puedo darte nada porque no tengo tanto dinero como otros que si pueden-
Todo se volvió silencioso, Jimin solo pudo cerrar sus ojos disfrutando del beso que compartía junto al pelinegro, sus manos fueron al cuello del mayor acercándose más hasta entrelazar sus lenguas, pronto la sala se llenó de pequeños jadeos por parte de ambos al sentirse tan amados.
— Escuchame Jimin — Jeon agarró la cara del menor — no quiero escucharte menospreciandote, porque eres lo más valioso en mi vida, no pienses que no puedes darme nada porque con sólo tenerte en mi vida junto a este hermoso cachorrito me haces el Alfa más feliz, tu me haces feliz y con eso es suficiente ¿Me entendiste?
— S-si
— Ahora bésame
Pegaron sus labios una vez más hasta ir a la habitación y dormir abrazados, sintiendo el calor del contrario junto al latir de sus corazones.
Porque el amor podía vencer todo.
¿Verdad?
꒰࿐։❀
Pasó una semana desde lo ocurrido y su relación había avanzado más de lo esperado, oficialmente Jimin empezó a vivir junto a Jungkook y estaba feliz de verse todos los días, disfrutando de cálidos momentos, donde solo eran ellos dos y nadie más.
— Quien diría que mi amigo encontraría por fin a su alma gemela — dijo Jin removiendo los cabellos castaños del menor.
— ¡Hyung mis cabellos! — chillo.
— Me tienes en el olvido
— Estar embarazado cansa — se tiró a la cama cerrando sus ojitos, tal cual mimado.
— Le diré a Jungkook que ya no te de cariños, eres un flojo
— ¡Y yo le diré a Namjoon que te deje en abstinencia por hablar con Jungkook! — pataleo fingiendo estar enojado.
— Ya quisieras enano
— Cállate
— Ya no hay respeto
En ese momento Jin recibió una llamada y al ver que Namjoon estaba afuera esperándolo se despidió del menor.
Al quedar solo hizo un puchero al no saber que hacer, aunque una idea se le cruzó por la cabeza. Le haría bento a su Jungkook.
Fue a la cocina e hizo arroz primero, para proceder a cortar verduras junto a dos salchichas, la carne lo hizo hervir para freirla, así su contextura sería más blanda al momento de comerla, hacía su labor mientras escuchaba música. Una vez terminó, con una sonrisa las puso en pequeños taper para envolverlo en un pequeño trapo y meterlo en una mochila chiquita.
Se alistó para verse bonito y salió, tomó un taxi viendo la calle al pasar por muchos lugares, en ese momento vio a una pareja junto a un niño, se veían tan felices y se preguntó si así se verían ellos junto al cachorrito que nacería dentro de pocos meses. Estaba feliz en solo pensarlo.
Al llegar pagó al señor para entrar y decirle a la recepcionista que era la pareja de Jeon, esta lo dejó ir ya que anteriormente Jungkook habló a los guardias y entre otros quién era su pareja.
Fue al último piso mediante el ascensor, con una gran sonrisa se acercó hasta fruncir su ceño y nariz al percibir un olor fuerte, pero no de un Alfa, si no de un Omega en celo. Aquello lo mantuvo alerta y con el miedo recorriendo por todo su cuerpo se acercó hasta abrir un poco la puerta y sentir su mundo caer.
Una chica se encontraba encima de Jeon besandolo y aunque hubiera huido como un cobarde, siempre supo que los problemas se debían enfrentar cara a cara, aunque uno se sintiera de la peor manera.
Abrió la puerta con fuerza y quitó a la chica para mirar fijamente a Jeon, transmitiendole todo lo que sentía en estos momentos, tristeza y enojo.
— Jimin no es lo que crees
— ¿Así? ¿Es puro accidente que ella esté encima tuyo besándote mientras tú no haces nada para evitarlo?
— Ella se abalanzó contra mí y me tomó desprevenido — Jungkook agarró los hombros del menor sin lastimarlo — por favor Jimin
El menor se volteó para ver como la chica aún estaba en celo pero miraba a Jimin con tanto odio.
— ¿No te da vergüenza abrirle las piernas a cualquiera? Hazte respetar como mujer, entiendo el dolor del celo pero jamás me he comportado de esa manera
Seguido de eso dejó el bento en la oficina de Jeon e irse de ahí rápidamente, escuchaba la voz del mayor llamando su nombre pero prefería ignorarlo, siendo sinceros, se sentía de la mierda.
No se consideraba muy hermoso, pero considerando el que nunca tuvo pareja y que todo esto era nuevo para él, se sintió inferior ante la hermosa Omega que vio, su lobo estaba llorando en un rincón y él también quería llorar. Odiaba sentirse de esa manera, por un momento se preguntó si su relación con Jungkook estaba bien.
— Jimin, espera
Se soltó del mayor con brusquedad y hasta que sintió unos dedos limpiar sus mejillas, se dio cuenta que estaba llorando.
— S-sería mejor si solo nos alejamos, n-ni estoy seguro si esto funcionará — decía entre hipidos.
— Jimin, ven, escuchame
Jeon agarró la cara del más bajo y se acercó lo suficiente como para que sus respiraciones se mezclen — mi Alfa te eligió a ti y yo también, no hay razones o motivos para engañarte porque tu vales mil, primero muerto a que hacerlo, eres mi Omega y siempre estaré para ti, todo eso fue un malentendido porque no estoy interesado en ella ¿Te acuerdas que mi mamá me eligió una Omega? — el menor asintió — es ella, la mandó a mi oficina aún estando en celo pero yo jamás accedí porque ahora te tengo a ti junto a mi cachorrito
— ¿Puedo confíar en ti Jungkook? — dijo entre lágrimas.
— Eso depende de ti bebé — besó su frente para abrazarlo — pero quiero que sepas que jamás me atrevería a hacerte daño
El menor cerro sus ojos oliendo a su Alfa mientras trataba de confiar plenamente en él, esperaba no desilusionarse más adelante.
꒰࿐։❀
Pasó una semana desde lo ocurrido y ahora Jungkook era más apegado al menor, llegaba hasta el punto de besarlo y darle todo el amor que se merecía.
Y es que en verdad lo merecía porque Jimin era un chico hermoso, no había nadie que pudiera igualarlo.
— Bebé ¿Dónde estás? — preguntó Jungkook apenas llegó a casa.
Fue en todos los rincones y optó ir hacia la terraza, cuando llegó sintió su corazón latir con fuerza.
Su Omega dormía en las sillas con la pancita al aire, su mano estaba encima de ella mientras el sol alumbraba hacia su cuerpo tan pequeño.
Jeon lo cargó para llevarlo a la habitación y dejarlo ahí, su cometido de ir hacia la cocina fue interrumpida por unos pequeños dedos, volteando su rostro se agachó para besar los labios del castaño.
— Llegaste
— ¿Cómo están? — acarició los cabellos suaves del menor.
— Estamos bien
Jungkook sonrió para echarse a su lado mientras sus cálidos brazos lo abrazaban tal cual bebé.
— Hoy se hará una fiesta para celebrar que tuvimos éxito al alianzarnos con Ondey — dijo Jungkook oliendo el aroma del menor.
— ¿Quieres ir?
— Bueno, soy el Jefe, pero si me pides que no vaya no iré porque eres primero
— No seas así, sería irresponsable de tu parte no asistir — golpeó al mayor.
— Pero tu eres mi pareja, lo entenderán
— Igual, puedes ir a hacer un brindis y venir rápido, es fácil
Jeon hizo un puchero pero asintió ante la insistencia de Jimin.
Durante las horas se dedicaron a ver películas hasta que se hizo de noche y Jungkook ya se encontraba yéndose.
— Ve con cuidado — Jimin depositó un beso en sus labios.
— ¿Hay posibilidad de quedarme?
— No — alzó una ceja — ahora ve
Se dieron un último abrazo y por fin Jungkook se fue, el castaño prefirió comer mientras se dedicaba a ver The Umbrella Academy, su serie favorita. Y aunque ya fuera mayor de edad tuvo un flechazo con Aidan, número cinco.
— ¡Diego hijo de puta! — gritó molesto al ver su mal temperamento en la escena presentada.
No supo hasta que hora se quedó viendo pero ya iba por el capítulo cuatro, de pronto el timbre sonó así que tuvo que pausarlo.
Al abrir ladeo su cabeza confundido al ver a una hermosa mujer delante suyo, esta era Alfa y por alguna razón su cara era idéntica a Jungkook.
Espera un momento...¿Acaso?
— Por fin te conozco Park Jimin — una sonrisa se plasmó en su rostro — es mala educación no dejarme pasar
— Oh, p-perdón, pase por favor
Se hizo a un lado hasta que estuvieron dentro, el ambiente era muy tenso.
— No quiero alargar esto así que iré al grano — habló la mujer — como ya sabrás, soy la mamá de Jungkook
— Si
— No te quiero como pareja para mi hijo, estuve investigandote y por todo lo que he visto tengo más razones por las que te quiero lejos de él — de su cartera sacó un sobre — por eso vengo con una oferta, te daré el doble que pagó mi hijo porque lleves a esa cosa — señaló su estómago — deberías saber tu lugar, no eres nada, no vales y encima vivías en un lugar tan asqueroso, todo tu es repulsivo al verte ¿Qué dices?
Jimin estaba enojado, bastante como para tirarse encima de la señora y decirle que era una maldita bruja, pero el no era así, no se rebajaría a su nivel.
— Disculpe lo que diré pero no pienso hacer eso, podré venir de una familia que no supo educarme pero en la escuela aprendí de los valores, y respecto a su hijo, yo lo amo y él me ama como para separarnos, prometí estar con el y el también lo prometió
— ¿En serio? — la mujer empezó a reírse — si tanto dice amarte no estaría revolcandose con su compañera de toda la vida, Omega inútil
Jimin mordió su labio inferior.
— Eso no es verdad, él ahora está en una fiesta con los que trabajan en su empresa
— Si no me crees puedes ir y verlo por ti mismo — sus tacones resonaron hasta abrir la puerta — esta es la dirección por si tienes curiosidad — después de eso la puerta se cerró y todo quedó en silencio.
El castaño nuevamente se sintió inseguro y tenía miedo, bastante a decir verdad. Aunque pueda arrepentirse fue al lugar.
Y al llegar lo buscó pero no había rastro, necesita salir por el fuerte ruido junto a muchos olores que lo mareaban. Pero no podía hacerlo hasta encontrar al mayor.
Fue al segundo piso y abría las puertas con cuidado, así fue hasta llegar a la última, al abrirla se tapó la boca mientras lloraba. Esto ya no podía ser verdad.
Jungkook estaba con el pecho desnudo y la misma chica estaba encima suyo refregandose, el mayor sostenía sus brazos y al parecer murmuraba algo pero no lograba escuchar nada.
Jimin solo pudo irse sin decir nada y refugiandose en su mejor amigo.
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Jungkook fue despertando hasta abrir los ojos, al voltear y ver a una mujer dormida se maldijo inmediatamente. Jimin lo mataría y esta vez no sabría que hacer.
Antes de irse se detuvo abruptamente al unir muchos cabos, todo esto estaba planeado, porque si de verdad se hubiera acostado con la mujer ya habría muchos condones, la ropa tirada por los suelos pero él solo tenía el pecho desnudo. Aparte que si estuvo con sus empleados bebiendo, el jamás invitó a Hyoin.
Tomó un taxi y fue a casa rápidamente para abrirla bruscamente.
— ¡Jimin!
Empezó a buscarlo por todas partes pero no sabía dónde más encontrarlo, hasta que se acordó de Seokjin, fue por su carro y empezó a ir al lugar.
Esperaba no perderlo porque Jimin supo como ganarse su corazón al pasar tiempo juntos. Cuando diviso la casa bajó del carro y tocó la puerta, insistió tanto hasta que fue abierta y en ella pudo ver a Namjoon.
— Hola Nam, se que está acá Jimin, por favor necesito verlo
— Él no quiere verte Jungkook, podría ser en otro momento ¿Si?
— No Namjoon, no entiendes, se que mi madre estuvo ayer por la noche ya que percibir su olor al llegar, todo fue una trampa, yo jamás podría engañar a Jimin — apretó los hombros del moreno — por favor déjame verlo
— Espera acá por favor
Por otro lado al llegar a la habitación donde estaban ambos omegas abrió la puerta.
— Es Jungkook, esta buscandote Jimin
— N-no
Sus lágrimas bajaban mientras Jin acariciaba sus cabellos.
— Jimin, se que esta situación duele pero debes enfrentarlo porque si el vino acá es porque habrá algo de lo cuál hablar porque por todo lo que me decías antes del problema, se nota a lenguas como Jungkook daría su vida por ti, te ama mucho
—
Las cosa no son así, el es mi primera pareja, mi primer amor, mi primer todo y esto es demasiado, no creo soportar mucho, soy débil y lo aceptó, pero yo no puedo más — lloró con fuerza — jamás creí que dolería tanto el amor
— ¿Qué harás Jimin? — preguntó Nam.
— Lo que debí hacer desde un inicio
El castaño se paró y fue hacia la puerta para abrirla, al ver al mayor llorando sintió su corazón encogerse, en su mente pasó todo lo que pasaron y las palabras de la señora Jeon. Su decisión estaba hecha.
— Jimin — fue abrazado — por favor déjame explicarte, esto fue un malentendido, fue una trampa de mi madre, porque tu más que todo en el mundo sabes perfectamente que no podría hacerte sufrir, no sabes como te amo tanto, no quiero que nos separemos
— Jungkook — lo separó — pasé muchos momentos a tu lado, estoy agradecido de conocerte porque me hiciste muy feliz, me amaste tanto logrando ganarte mi corazón, pero también me duele mucho que todo esto esté pasando por mi culpa, yo soy quien está arruinando tu vida y creo que jamás podremos estar juntos
— ¿Qué estás diciendo Jimin? — preguntó Jungkook triste.
Ambos lloraban y sus lobos sufrían al no poder estar cerca, tanto sus partes racionales como irracionales se necesitaban tanto.
— L-lo que quiero decir es...— dolorosas lágrimas bajaron por sus ojos, apretó sus ojos y manos para decir lo siguiente con tanto dolor — Yo Park Jimin, te rechazo como mi Alfa, Jeon Jungkook
Todo estaba en silencio y solo el viento se encargaba de provocar un alboroto en sus cabellos, el cielo empezó a tornarse un poco oscuro, avisando una próxima lluvia.
Parecía que todo dejó de existir para ambos, Jungkook negó mientras lloraba y cayó al suelo sujetando las piernas del menor, un fuerte ruido sonó de su garganta.
— Jimin espera — un sollozo salió de su garganta — no hagas esto, yo no...
— B-basta, ya no te quiero como Alfa
Ambos estaban rotos por dentro y sus lobos no emitían nada, es como si ambos estuvieran sintiendo más dolor, como si estuvieran muriendo.
— Espera, no te vayas, Jimin
Pronto el castaño se soltó y cerró la puerta para ir corriendo hacia Jin recibiendo un abrazo. Lloró como nunca, sus manos buscaban aferrarse en Jungkook pero solo estaba el cuerpo de su amigo, su cuerpo dolía como el infierno, necesitaba descargarse pero también debía controlarse por el pequeño que llevaba dentro.
¿Ahora que haría?
꒰࿐։❀
Un mes pasó.
En todo ese transcurso Jimin luchaba por comer ya que terminaba vomitando todo, sin embargo la criaturita no merecía sufrir por todo lo que pasaba, él no tenía la culpa de nada.
Tampoco podía comunicarse con su lobo, desde ese día jamás habló, no movía la cola, ningún movimiento, nada.
No sabía nada de Jungkook, jamás supo si estaba bien, no estaba seguro si él ya habrá conseguido otra pareja, quizá y estaba feliz con otro. Uno que si este a su nivel y lo haga feliz.
A pesar de tener a sus dos mejores amigos apoyandolo, se sentía solo. Ahora mismo debía tener más cuidado porque su pequeño estaba por nacer, en cualquier momento rompería fuente.
— Jimin, te traje la comida
— Gracias hyung
Vio la sopa y sin ganas empezó a comer mientras Jin ponía algún canal, Namjoon se encontraba en la sala terminando de limpiar. En ese momento el timbre suena y era raro, pues jamás recibían visita de alguien.
Al abrirla frunció su ceño confundido ante una mujer Alfa, esta tenía puesto unos lentes negro impidiendo ver sus ojos, vestía de negro y al oler un poco mejor, esta olía a estar enojada y triste.
— ¿Dónde está ese chiquillo? — preguntó alterada.
— ¿Disculpe? ¿De quién habla?
— De ese mocoso de Park Jimin, ay, hazte a un lado
Entró por la fuerza y Namjoon molesto al ver tal intromisión la detuvo.
— Usted ¿Quién es y que quiere hacer acá?
— Lárgate
En ese momento Jin sale y detrás de él estaba Jimin caminando con cuidado. Se asombró al verla ahí.
— ¿Señora Jeon?
En ese momento la Alfa desprendió feromonas de enojo mientras avanzaba hacia el, lista para atacar, pero Namjoon la agarró ya enojado de la situación.
— ¡Por tu culpa! ¡Por tu culpa mi hijo está así! ¡Eres un maldito Omega! ¡Jamás permitiré que tengas a ese engendro!
— Pero Jungkook jamás se ha cruzado acá, ya no tengo nada con él
— ¡Pues claro que no lo veías pedazo de mierda! ¡Estuvo encerrado en su habitación sin salir! ¡No comía nada! ¡Parecía un muerto viviente! ¡Y ahora! ¡Y ahora él!...— por fin se sacó los lentes y sus ojos estaban rojos, ella lloraba tanto.
— ¿Qué le pasó a Jungkook? — preguntó temeroso de la respuesta, pronto empezó a respirar impaciente.
— ¡Está muerto!
La mujer seguía hablando pero Jimin no podía escuchar nada, abrió su boca para decir algo pero su cara expresó tanto dolor, pronto lágrimas salieron y negó mientras sus manos jalaban de su cabellera.
No supo que más pudo pasar, pues había caído y no pudo escuchar ni presenciar más.
Era cierto que si un Alfa u Omega rechazaba a su compañero de toda la vida, este sufriría y moriría.
Jungkook no tuvo en quién aferrarse.
Jimin luchaba por el pequeño pero...¿Ahora que sería de su vida?
꒰࿐։❀
Unos ojitos empezaba a acostumbrarse a la luz, frunció su frente para despertar y pensar que todo fue una simple pesadilla, que Jungkook seguía vivo.
Sin embargo al voltear y ver una pequeña camita junto a un pequeño ser que pataleaba sus frazadas, empezó a llorar en silencio.
¿Por qué todo resultó de esta manera?
La puerta se abrió y de ella apareció Jin, quien le sonrió con tristeza, cargó al pequeño mientras le pasaba al menor.
Al obtenerlo en sus brazos pudo ver sus facciones, todo gritaba a Jungkook y entonces empezó a llorar abrazando el pequeño cuerpo.
— Tu papi estaría muy orgulloso de verte — hipo — eres tan parecido a tu padre que duele tanto, pero te amaré mucho, yo no pude...— se quebró mientras su pecho dolía.
Su lobo lloraba junto a él, sus manos ahora se aferraban al pequeño pero no sabía que hacer o como sentirse.
— Saldremos de esta Jungmin ¿Si? — dijo
꒰࿐։❀
25 años después
— Papá
Un chico de cabellos rojos entró en la habitación junto a un pequeño y su pareja, todos se reunieron al lado de la cama.
— Hijo
— Dime que estás mejor — dijo entre lágrimas.
— Estoy mejor — pronto empezó a toser mientras sentía frío.
— Estás temblando padre — dijo la pareja de Jungmin.
— Es que hace mucho frío querido
— ¡Taparlo papá! — dijo el niño de tres años.
Jimin sonrió al ver todo lo que logró, su hijo era un Omega con una excelente carrera, junto a sus dos amigos ya fallecidos pudo salir adelante, estaba orgulloso de ver como su pequeño Jungmin no sufrió como él en su niñez.
Con tanto sacrificio lo sacó adelante, jamás le faltó nada, estar con su hijo era increíble. Le había contado su historia con Jungkook, su padre y ambos de vez en cuando lo visitaban a su tumba.
Y ahora por fin de tantos años podrán encontrarse, estaba más que listo.
Porque al ver a Jungmin en buenas manos con Hyunyon, supo que siempre sería feliz.
— Hijo — pronto dejó de sentir frío, ahora no sentía nada — te amo mucho
¿Así se sentía morir?
Antes de cerrar completamente sus ojos escuchó sollozos, pero aunque sea egoísta, lo deseaba más que nadie.
— Jungkook
꒰࿐։❀
50 años después
El bullicio perturbaba la mente de un joven de cabellos rubios, alzó su rostro para ver como muchas chicas y algunos chicos se reunían fuera de su salón, girando los ojos se volvió a echar sin importarle nada.
— ¡Buenos días alumnos!
— ¡Buenos días profesor!
— Hoy se transfiere un nuevo alumno, así que espero lo traten bien
Pronto un chico de cabellos negros entró y el salón se llenó de murmullos, el rubio alzó su rostro y sintió su corazón palpitar con tan fuerza.
¿Qué era este sentimiento?
— Puedes sentarse al lado de Park Jimin
Ambos cruzaron miradas y el chico se acercó para sentarse, con amabilidad le sonrió.
— Hola Jimin ¿Nos hemos visto alguna vez?
— Eso debería preguntar yo
Ambos sonrieron calidamente mientras sus lobos estaban alterados al volver a encontrarse, estaban felices.
— Un gusto, soy Jeon Jungkook
— Es un gusto conocerte
Alfa mío.
Omega mío.
Fin.
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Y este es el final.
Yo tenía planeado terminarla con Jimin muriendo y se encontraba con Jungkook en el cielo, pero esto salió ><♡
Espero les haya gustado mucho, me quedé hasta las dos de la madrugada escribiendo ya que no estaba cumpliendo mi promesa del Two-shot ya terminado.
En fin, les amo mucho
En fin, nos vemos en próximos proyectos ❤