- Un café expreso, por favor -
- Si señorita, y usted caballero? -
- Lo mismo -
- Bien, algo para acompañar? -
- No, gracias -
- Bien, enseguida vuelvo con su pedido - dijo amablemente el rubio retirándose de la mesa.
Caminó hasta la barra y dejó la órden.
- Katsuki, quita esa cara larga -
- No me digas que hacer perra, no eres mi jefa, y no vuelvas a llamarme por mi nombre -
- Creo que si tu me dices perra, tenemos la suficiente confianza para llamarnos por nuestros nombres, no lo crees? -
- No, no te confundas, que seas la novia de Deku no te hace mi jefa, así que pierdete -
- Kacchan, otra vez peleando con mi novia? -
- Lo siento Deku, pero "tu novia" me está tocando las pelotas -
- Literalmente? - se burló el peliverde.
- Cariño, solo le dije que no puede estar con cara enojada aquí, espantara a los clientes -
- Tranquila Ochako, yo me encargo -
La joven suspiró pesadamente y se dirigió a la cocina.
- No es justo que le des tantos privilegios - sentenció antes de salir de la barra.
- Yo atendí bien a los clientes -
- Lo se Kacchan, no he recibido una queja sobre ti desde hace 4 meses, lo estás haciendo bien -
- Entonces por qué no le dijiste a la perra de tu novia que estaba equivocada? -
- Oh no... No puedes decirle a una mujer que está equivocada Kacchan, acaso quieres que me quede sin sexo? -
- Tsk, como si ella fuera la única -
- Pero no lo sabe, además, tiene un culo y unas caderas impresionantes, tú harías lo mismo en mi lugar -
- Por algo no salgo con mujeres -
- Tienes razón, son complicadas, pero cuando la noche llega, y me espera con las piernas abiertas en la cama, no me importa que sea una maldita histérica, entiendes? -
- No -
- Claro que no, tu eres quien espera con las piernas abiertas a Shinso, no? -
- Cállate nerd -
- Es un niño rico Kacchan, no sé porque no le sacas su dinero y ya, entiende, no tendrías que trabajar aquí y luego en el bar, yo te doy un salario mucho más alto que a mis otros empleados, pero igual no te alcanza para pagar la deuda -
- Lo se Deku, pero como dijiste, es un niño rico, el dinero es de sus padres, y tiene que pedir permiso para sacar cada centavo del banco -
- Pues deberías buscar a alguien que te dé el dinero que necesitas -
- Deku, los hombres son ingenuos, pero nadie va a regalarme 7 millones de dólares solo por abrirle las piernas -
- Entonces deberías enamorar a alguien, que tal Shindo? Él también tiene mucho dinero -
- Si, pero no tanto -
- Pero desde que sales con él, siempre te está dando cosas -
- Pero no es lo mismo tarado -
- Puedo presentarte a mi amigo Iida, es asquerosamente rico, es heterosexual pero si le muestras tus encantos tal vez lo pases para tu lado -
- Iida? El cuatro ojos? -
- Si, hace mucho está soltero... Quién sabe? Tal vez y le gusta tu culito Kacchan -
- No hables de mi trasero Deku, es asqueroso -
- Asqueroso es que vayas de cama en cama y que no sepas ni sus nombres -
- Si sé sus nombres okey? Además, tú no eres muy diferente a mí, si tu estúpida novia supiera que -
- Kacchan, baja la voz, puede escuchar, Ochako no debe saberlo, entiendes? -
- No puedo saber que? - preguntó la castaña entrando a la conversación
- Como dije, no puedes saberlo nena - respondió simplemente el pecoso.
- Pero ahora quiero saber cariño -
- Luego lo sabrás -
- No es algo malo, verdad? -
- Oh no, claro que no, verdad Kacchan? -
- Tsk... - chistó el rubio tomando el pedido de hace un momento para poder entregarlo.
- No le hagas caso muñeca, sabes cómo es él -
- Si... Cielo, sabes... Necesito unos nuevos tacones, tengo una fiesta el sábado entrante y quería usar algo diferente -
- Claro nena, ve con Atsuhiro, cómprate algo lindo y pide que lo agreguen a mi cuenta -
- Gracias! Eres el mejor -
- Eso intento, mereces lo mejor de lo mejor preciosa, y eso te doy -
El rubio escuchaba asqueado aquella conversación.
No tuvo que enseñarle a ligar a su amigo de la infancia en primer lugar, pero tampoco es su culpa que Deku haya aprendido tan rápido.
Cuando eran adolescentes, el pecoso era un asco hablando con chicas, y, aunque a Katsuki siempre le gustaron los hombres, intentó guiar por el mejor camino al peliverde para ser todo un casanova.
Resulta que lo hacía muy bien, más de lo que esperaba.
Izuku había conocido a Ochako hacía tan solo unos meses, eran novios pero, el pecoso se negaba a dejar a todos sus demás ligues atrás.
Después de todo, Ochako era otra de sus presas.
Cuando el peliverde entró a la cocina, Katsuki se acercó rápidamente a la castaña.
- No te cansas de sacarle el dinero a Deku? -
- No, por qué? -
- Maldita perra -
- Oye, no puedes enojarte, nos usamos mutuamente si? -
- Tienes sexo con él para que te dé dinero? Al menos admites que eres una asquerosa prostituta -
- Puta o no es mi problema, además tú y yo somos iguales, también abres las piernas por dinero así que no entiendo porque me criticas -
- Yo no hago eso estúpida -
- Claro que sí, y también se que eres una perra arrastrada que le tiene ganas a Deku -
- A Deku? Qué mierda dices idiota? -
- Vamos Katsuki, seguro le abriste las piernas en más de una ocasión, pero él te rechazó, verdad? No eres más que un pobre idiota que le gusta que le den por atrás, tan asquerosamente homosexual -
- Ochako qué mierda? -
- Deku? Cielo -
- Vete -
- No cielo, él comenzó -
- Acaso no me oíste perra asquerosa? Vete de mi restaurante ahora mismo -
- Vas a elegir a éste idiota antes que a mí? -
- Hasta ofende la pregunta, tú eres una zorra que se pega a mi como una asquerosa sanguijuela, absorbiendo mi dinero, está bien, no me molesta, pero no voy a permitir que una regalada como tú, critique a mi mejor amigo, así que vete ahora mismo o voy a llamar a seguridad -
- Deku, yo creo que sería más conveniente llamar a la perrera, tú qué dices? - preguntó el rubio con una sonrisa en los labios, mirando fijamente a la castaña que estaba al borde del llanto.
- Tienes razón Kacchan, vete Ochako, de lo contrario llamaré a la perrera para que vengan a por ti -
- Eres un idiota, jamás vas a encontrar a alguien como yo -
- Eso espero - finalizó.
La chica, totalmente avergonzada, salió corriendo del establecimiento.
- Maldita perra - susurró el rubio.
- Joder Kacchan, eso fue intenso, una verdadera pelea de gatas -
- Cierra la boca Deku, podía arreglarme solo -
- Ah si? Es verdad lo que dijo Ochako? Quieres que yo te de? Estás muy bueno, pero no eres mi tipo, ya sabes, me gustan las vaginas -
- Ahg, no seas asqueroso Deku -
- Oye, solo digo, pero si tantas ganas tienes, puedo hacer un excepción por ti - se burló el pecoso.
- Ni lo sueñes - dijo riendo, dándole un empujón al pecoso.
- Bien, bien, como tú digas -
Hola amores, cómo están?
Por la xuxa que va a estar picante está historia.
Qué me dicen? Les gustó el prólogo?
Está historia la voy a actualizar los lunes, así que estén atentos.
Bueno, no olviden seguirme, dejar su estrellita, muchos comentarios y seguirme en instagram (louisa_dalaizon).
Mil amores.
Xoxo.