Las clases habían finalizado, en el almuerzo ahora se les había unido Zayn, no habían comentado nada sobre lo pasado en el cine. Niall cada vez que veía a Harry, el cual había empezado a usar camisas con cuello de tortuga para ocultar los chupetones, no podía disimular la pequeña risa que salía sin aviso de sus labios, simplemente no podía dejar de pensar en que su amigo supuestamente inocente le había hecho una mamada a su otro amigo, Louis aún quería golpear a Niall.
–No puedo creer que mi bebé vaya a cumplir dieciséis años –. Anne se limpiaba una lágrima mientras hablaba con una de sus amigas por teléfono, estaba algo sentimental últimamente por ese hecho, sería el cumpleaños de Harry en unos días solamente y eso la hacía entristecerse, su pequeño estaba creciendo, en unos años iría a la universidad y la dejaría, abandonaría el nido como suelen decir. Tenía que aprovechar el tiempo que le quedara con su hijo al máximo.
– ¿Dieciséis? Creía que cumpliría mínimo dieciocho. –Su amiga reía, no sabía que le estaba lastimando el hecho de que su pequeño cumpliera esa edad. –Cuidado, un chico con dieciséis es lo más peligroso que puedas tener.
– ¿Por qué, Maura? –Pregunto confundida. Si, Maura era la madre de Niall.
–Porque en esa edad es cuando las hormonas los controlan, he revisado el historial de navegación de Niall… Créeme Anne, cuando te digo que las hormonas los controlan no estoy jugando. –Maura lo tomaba con diversión, su hijo tan solo estaba experimentando. En cambio Anne estaba aterrada, pero tendría que confiar en Harry, no sería capaz de revisar su historial. No era ese tipo de madres.
–Tengo que colgar, Harry acaba de llegar de la escuela, besos.
–Dile que le mando saludos, adiós Anne.
Y corto, Harry entro a la cocina donde se encontraba su madre con una sonrisa de idiota, como las que últimamente traía. Anne seguía preguntándose la razón de sus sonrisas recurrentes pero no se atrevía a cuestionarle ello a Harry.
–Buenas tardes, mamá –; Le dio un beso en la mejilla, Anne sonrió enternecida, en el mundo había varios tipos de hijos, desde los más obedientes y educados, hasta los delincuentes y drogadictos pero aunque hubiera miles de millones de tipos de hijos ella no cambiaria a Harry por nada del mundo. Estaba agradecida con Dess por haber hecho realidad su sueño de ser madre, agradecida por ayudarla a hacer un hijo tan hermoso como lo era el suyo, había hecho mal al dejarlo de esa manera tan fría y cruel pero no se arrepentía ya que gracias a eso había conocido a Robin, quien después de Harry era el amor de su vida.
–Deja de crecer, por favor. –Le suplico dejando que lagrimas rodaran por sus mejillas, Harry la observo preocupado.
–Yo no lo controlo. –Trato de bromear para tranquilizarla, no funciono. Anne lo abrazo aferrándose de su camiseta, jalándole el cuello de tortuga que este llevaba y dejando ver sus chupetones que parecían como si apenas los hubieran hecho un día antes pero Anne no se percato de eso, empezó a sollozar sorprendiendo a Harry.
–Eres lo mejor que me ha pasado Harry. –El susodicho quería decirle lo mismo, decirle que ella también era lo mejor que le había pasado, porque claro sin ella él no podría estar vivo. Pero simplemente las palabras no salían de su boca, no podía pronunciarlas enfrente de Anne porque lo mejor que le había pasado no había sido ella, lo mejor que le había pasado a Harry tenia nombre y apellido, un cabello color castaño y unos ojos impresionantemente azules. Louis Tomlinson era el nombre del dueño de aquellas palabras y solo podrían ser dirigidas para él.
Harry amaba a su madre porque como ya había dicho, era su madre y gracias a ella estaba donde se encontraba en ese momento, respirando, con pulso y un corazón latiente, además de que Anne lo había cuidado con todo su ser durante toda la vida de este.
Pero había un problema.
Harry amaba a Louis.
Y Anne no podía competir contra ello.
Harry amaba a Louis porque gracias a él tenía el corazón latiente, pero no latiente por estar vivo como en el caso de su madre, sino porque con cada gesto que Louis realizaba el corazón de Harry se agitaba, latía desbocadamente, se alegraba. Sí, su corazón era feliz al estar con Louis. Harry amaba a Louis porque de alguna manera se sentía diferente, y le gustaba esa sensación. Harry amaba cada pequeña cosa de Louis, porque Harry amaba a Louis.
Harry amaba a Louis.
Sin siquiera tener un razón importante.
(…)
Era sábado por la noche cuando Louis lo llamó, aproximadamente eran las nueve pero Harry ya estaba en proceso de dormir.
–Hola bonito. –Harry gruño en respuesta por el apodo que Louis le había otorgado provocando las risas de este. –Tengo muchísimas ganas de verte.
–Nos vimos ayer Lou. –Protestó sonriendo aunque el castaño no pudiera ver su sonrisa.
–Iré a tu casa en este mismo momento, claro, si no te molesta.
Iba a negarse ya que sus padres estaban despiertos, lo sabía porque desde su cuarto que estaba en la planta alta se podía escuchar lo que decían en la sala la cual estaba en la planta baja, las paredes eran bastante delgadas y al parecer los pisos también.
Bien, Harry ansiaba que Louis fuera a su casa, quería verle pero era demasiado peligroso que fuera a esa hora de la noche, Anne y Robin lo castigarían o algo similar. Entonces recordó que era sábado y que el domingo era su cumpleaños, así que no lo podrían castigar por el momento si llegaban a descubrirlos, pero es decir no iban a hacer nada digno de descubrir tan solo querían verse.
Otro asunto a tratar, ¿por dónde entraría Louis? No había lo que se dice un árbol o algo para trepar y poderse colar por su ventana, las únicas vías de entrada eran la puerta principal y la puerta del patio trasero, en la primera opción sus padres se encontraban bastante cerca y lo descubrirían, en la segunda opción tendría que bajar las escaleras que estaban casi a un lado de la sala donde ellos dos estaban y entonces también se darían cuenta. Tenía que pensar en algo rápido. No se había dado cuenta que Louis seguía en la línea.
– ¿Estás vivo?
–Eso creo. –Le respondió, Louis solo reía.
– ¿Voy o no?
–Te estaré esperando.
Para eso de las diez, Louis ya estaba en su habitación con el seguro de la puerta puesto, Harry había convencido a sus padres de que al día siguiente iban a necesitar estar descansados ya que era su cumpleaños y el planeaba tenerlos despiertos todo el día por lo que tenían que ir a dormir desde ya. Louis entro por la puerta principal con sutileza y ahora se encontraba en la cómoda cama de Harry, y este a su lado.
Ambos estaban tapados con una cobija gruesa y suave, hacia bastante frio y ellos solo querían entrar en calor. Siempre Harry había leído acerca de silencios cómodos e incómodos pero con Louis, simplemente no podía haber un solo silencio. Y cuando llegaba a pasar lo terminaban con un beso.
Debajo de la cobija estaban dos cuerpos cubiertos de pies a cabeza, él rizado soltaba gemidos al sentir los labios del castaño succionando su cuello y tratando de sacarle la camiseta, si cada vez que se vieran harían eso Harry estaría más que agradecido.
–No hagas ruido Hazz. –Louis le suplico antes de colar su mano entre sus pantalones de pijama los cuales eran bastante holgados y rozar su hombría con delicadeza. ¿No quería que hiciera ruido? Si seguía haciendo eso obviamente que no podría realizar aquello que le pedía.
Era apenas el inicio de la noche, si tomaban eso con cautela y de una forma silenciosa bien que podrían pasar varias horas de diversión sin ser interrumpidos.
En otra parte de la casa de los Twist Cox*, en la habitación de la pareja de esposos el celular de Anne comenzó a sonar indicando que alguien le había enviado un mensaje. Pero ella estaba dormida y no lo leería hasta el día siguiente.
Número Desconocido (01:35 AM):
Le deseo un feliz cumpleaños a nuestro hijo, nos veremos pronto.
Hola, bien no tengo mucho tiempo para la nota asi que los saludos los pondré hasta el siguiente capítulo, perdón por haber tardado tanto, ah y… estoy muy triste en serio, desearía que Harry en verdad cumpliera 16 y no 21… Soy Harry Girl y me duele en el alma. MI BEBITO ESTA CRECIENDO.
ESTA DEL ASCO LO SE, no es mi mejor momento para escribir pero no quería actualizar después del cumpleaños de mi bebito hermoso bonito, ay por dios, no saben cuanto lo amo.
Y a ustedes también, gracias por las mas de 8k me hacen muy muy feliz, actualizare pronto lo prometo :)
*Twist Cox. Robin Twist, el padrastro de Harry y Anne Cox.
¿Quieren saludos?
¿Qué edad tienen?
¿Quieren dedicaciones?
Ah, las amo :’)
Dulce y yo estamos casadas huehue:v
~Danny.
PD: Estoy pensando seriamente en borrar este capítulo, lo hice sin ganas y además salio todo raro:(.