Elizabeth estaba sentada en el piso del pequeño balcon que estaba en su cuarto. Estaba amaneciendo y a su lado se encontraba una de las criaturas mas fascinates que ella hubiera visto en su vida: Un fénix.
-¿Qué crees tu Razgut? ¿Seré adecuada para ese colegio Hogwarts? -
La chica acaricio las plumas rojas del animal y este se acerco más a ella, permitiendole ver sus enormes ojos dorados.
-¿Quieres venir conmigo? - El fénix inclino la cabeza en señal de asentimiento.
-¿Te las vas a saber arreglar para llegar solo? No te pueden ver…
Razgut se separo y extendió sus majestuosas alas. Chillo en señal de indignación y Elizabeth rio.
-De todas formas no creo que debas venir - dijo la chica mirando para abajo - No me puedo arriesgar a que te pase algo. ..
El fenix lanzo un graznido otra vez y se dispuso a salir volando.
-Nisiquiera se si esta permitido llevar mascotas de tu tipo... Y por mas que quiera que me acompañes no se como te arreglarias con la comida y...
Eso fue suficiente para que el animal saliera volando y se perdiera entre las primeras nubes de la mañana.
Si. Razgut era un fenix. Y Razgut tenia sentimientos y entendia todo lo que su dueña le decia. Y hasta a veces se enojaba.
Elizabeth lo dejó ir. De todas formas iba a volver...
Razgut estaba con ella desde que sus 6 años, cuando, junto a su madre, lo habían rescatado de una muerte segura. Pero esa historia no venia al caso. Porque Elizabeth tenía menos de una hora para salir de su casa, y dirigirse al anden 9 ¾.
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Su baúl estaba a medio llenar, no encontraba su varita y se había torcido el dedo pequeño del pie. Estaba nerviosa por todo.
Todo esto porque tenia la maldita costumbre de dejar todo para ultimo momento.
Decidió ir a la cocina a tomar un vaso de agua para despejarse. Cuando llego se encontró con su mama haciendo que la plancha se moviera y arreglara sus túnicas y ropas, un poco alterada.
-¡Con razón no las encontraba! No importa mama, esta bien. - dijo levantando la pila de ropa planchada para llevarla a su cuarto.
-¡No la arrugues! - gritó
Llegó y metió todo en su baúl, que había quedado casi lleno. Tomo algunos de sus libros favoritos y su cuaderno de dibujos y los metió dentro.
Cerró el baúl y lo bajo de su cama. Debajo de el se encontraba su varita. Respiro aliviada y la guardo en el bolsillo de su pantalón.
Liz vio su cuarto una última vez, y tomando su baúl, cerró la puerta.
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Cuando Elizabeth llego a la estación de King Cross con sus padres, que sorpresivamente llavaban a Razgut, solo había algunos pocos muggles policías.
Cruzaron la barrera.
Entraron en un nuevo mundo y el cambio se noto de mil maneras distintas. La gente era diferente, el paisaje, el animo. Este mundo estaba lleno de magia.
Un nuevo año. Un nuevo colegio. Por fin podría aprender magia. Por fin podría tener amigos… Este iba a ser un nuevo comienzo para Liz…
-¡¡VALERIE!! - le grito una mujer a su madre corriendo a abrazarla apenas habían salido.
-¡¡Narcisa, tanto tiempo!! - dijo su mama mientras la abrazaba. Ambas esbozaban amplias sonrisas y Beth y su padre se miraron confusos.
-¿Sabes quien es? - le susurro ella a él
-Nunca la había visto -
Las dos mujeres se separaron y Beth pudo divisar un hombre de largo pelo platinado, y un niño de unos 11 años, que se dirigían hacia donde estaban ellos.
-Narcisa, quiero presentarte a mi esposo, Charlie, y a mi única hija, Elizabeth. - dijo la madre de esta ultima al ver a los otros acercarse.
La mujer, de un cabello rubio y grandes ojos, estrecho la mano con Charlie Pierce y luego le sonrió dulcemente a Liz.
-Valerie, conoce a mi esposo Lucius Malfoy - dijo señalando al hombre que había llegado. Luego miro al pequeño y dijo - Y a mi único hijo, también, Draco
A esas alturas Elizabeth sintió que se tambaleaba un poco, pero nadie lo noto. Osea que se llamaba << Draco Malfoy >>
Draco Malfoy como el Draco Malfoy que habia soñado. Pero...
Pero no. No podía ser como en su sueño porque...porque sus sueños no podian tener nada que ver con la realidad y punto.
<Olvidate, tonta> Se dijo a si misma <Vas a ir a Hogwarts, tratar de hacer amigos, dejar todo atrás>
Lucius le estrecho la mano a ella y a su padre y luego Draco se dirigio a ella:
-Hola -
-Hola - respondió ella
Sus madres los miraron como si esperaran que pasara algo pero como vieron que su conversación había terminado ahí, siguieron charlando.
Elizabeth estaba un poco confusa ¿De donde conocía su mama a esa mujer?
Luego le podría preguntar.
Mientras tanto, el anden 9 ¾ se estaba llenando de estudiante con jaulas de lechuzas, sapos y ratas. Algunos ya tenían puestas las túnicas. A Elizabeth le pareció notar una cabellera roja por ahí, pero no. En realidad eran muchas. Una familia, creía ella.
No importaba porque en ese momento había que subir al tren.
Luego de que su mama le diera miles de indicaciones y que la de Draco haga lo mismo con el, saludo a sus padres con un beso y un gran abrazo.
Elizabeth acaricio a Razgut, que habia salido de la jaula, tan grande y majestuoso como siempre.
-Nos vemos en un año - le dijo sonriendo. Él habia sido el unico amigo verdadero que habia tenido la chica en todo este tiempo - Suerte por aca
Elizabeth subió al tren luego de una chica con melena castaña y se dio cuenta de que atrás suyo venia Draco.
Sintió otro escalofrió al pensar en ese nombre. Al pensar en el sueño…
Comenzó a buscar un compartimiento. Pero todos estaban llenos de estudiantes charlando y riendo. Nunca había estado ahí, y se sentía verdaderamente sola. No había visto a la chica de la librería por ningún lado. Cuando estaba por llegar al final, Draco le indico con la mano que se sentara con el.
-Mi madre dice que te haga compañía. Ya que eres nueva - dijo desanimado
-Gracias. Pero tu también eres nuevo - dijo Elizabeth levantando una ceja
-Si, pero no necesito a nadie - miro distraído a la ventana - ¿Eres sangre pura, verdad?
-Si - contesto Elizabeth, un poco seria.
-¿En que casa quieres estar? -
-La que sea. Mis padres dicen que me pondrán en Ravenclaw -
-Wow, debes ser una cerebritos ¿no? - Soltó una risita - Yo quiero ir a Slytherin. Es la mejor. Creo que me lanzaría un avada kedavra si me llega a tocar Hufflepuff...
-¿Por que? - pregunto Elizabeth frunciendo el ceño
-Son todos idiotas -
La chica se sorprendió por la actitud altanera de "Draco". Se quedaron mirando cada uno para un lado. Elizabeth no sabia que pensar sobre las casas, ni sobre ese rollo de los sangre pura. Con respecto a las casas, a sus padres les había sacado la mayor información posible para estar preparada. Pero como ellos personalmente no habían ido al colegio, si no sus hermanas, no sabían demasiado. Solo le pudieron decir los nombres y alguna que otra cualidad de cada casa.
Eso de ser sangre pura para Elizabeth era normal. Nunca había conocido a algún mago hijo de muggles pero parecian ser iguales que todos.
Draco rompió el silencio.
-¿Que era esa cosa que salió volando desde donde estaban tus padres? -
-¿De que estas hablando? - dijo ella sin entender bien a que se referia.
-Ya sabes. Esa ave... - dijo mirándola fijamente - ¿Qué era? -
Utilizo un tono amenazador que molesto a Elizabeth. Sin embargo, la chica entendio bien de que estaba hablando.
-Nada que te incumba -
-Vamos. ¿Una lechuza? ... - la miro y ella se cruzo de brazos invitándolo a callar. No le gustaba que la gente se enterara de Razgut. Sus padres le habian advertido que eran criaturas muy valiosas, y que la gente estaba muy interesadas en ellas hoy en dia .- Draco no se callo - No. Era más grande. Y era rojo... - se quedo pensando un rato y dijo - Era un fénix ¿verdad?
Elizabeth tensionó la mandíbula. El chico era observador.
- Lo sabia - mascullo Draco
-Si - dijo Elizabeth - Mi familia tiene un fénix ¿Y?
-Deben tener dinero. He oido que son muy costosos - Elizabeth lo miro con incredulidad ¿Que el chico no pensaba en otra cosa que no fuera estatus social y dinero?
-No tienes ni idea de lo que estas diciendo - Respondio Liz sin molestarse en pelear
-¿Que? ¿Entonces como lo consiguieron? -
En el instante en que Elizabeth estaba por responder con ironia, una chica de pelo negro y bien corto, ojos color miel, y con el uniforme ya puesto, entro en el compartimiento e ignorando olímpicamente a Elizabeth, se dirigió a Draco.
-Hola. Soy Pansy Parkinson - Sonrió armadamente y le tendió una mano como si tuvieran 40 años. Draco la tomo y la miro de arriba abajo.
- Hola. Soy Draco Malfoy. ¿Estatus? - le dijo naturalmente
-Sangre pura, obviamente. - Y ladeo la cabeza
-¿En que casa quieres entrar? -
-Slytherin, tontito. Es una ofensa que lo preguntes - y rió de forma aguda y molesta
-¿Quieres sentarte? Creo que podríamos ser amigos -
-Claro. - y al sentarse al lado de Draco, parecía que finalmente había notado la presencia de Elizabeth, que había estado contemplando la escena, asqueada.
-¿Y tu eres? - dijo como si Liz hubiese sido la extraña que había entrado al compartimiento
-Elizabeth Pierce -
-¿Oye, no es por nada, pero de donde sacaste esa ropa? Es tan muggle - dijo Pansy abriendo los ojos -
-A mi me encanta lo que traigo puesto - dijo contradiciéndola
Pansy hizo una cara como si la mismísima Elizabeth le hubiera dicho el peor de los insultos.
-Mi familia no se rebajaría a dejarme usar nada así. ¿Segura que no es mestiza, Draco? -
-Ella ni siquiera sabia que Huffepuff era la casa de los idiotas asique…no sabría que esperar - contesto el rubio
-Seguro la ponen ahí - completo Parkinson
La chica comenzó a sentirse incomoda. Fuera de lugar ¡La estaban insultando! ¡Claro que estaba fuera de lugar!
Antes de que pudieran seguir hablando, se paro rápidamente, tomo su baúl y sin permitirse soltar ni una lagrima, salió del compartimiento.