Mirando a la gente hasta hacerlos sentir incómodos.
Nunca preocuparme por caerle bien a tu madre o amigas.
Me bastaba con el saber que me acompañarias a casa.
Si necesitabas de cariño yo te lo decía, falso pero efectivo.
Nunca pedí caricias de tu parte, no las necesite.
Concideralo una verdad.
Dura, cruda, fría y cruel.
Como yo.