Tomadas de las manos.
Con tu cabello rubio y tu piel blanca.
Tu actitud tierna y cálida.
Siempre alejando el frío, pero jamás los sarcasmos.
La pequeña forma en la que mi codo siempre terminaba sobre tu pelo.
Y la mueca cuando alguien no te presta la más mínima atención.
Siempre prometedor.
A un día mejor o solamente a una sonrisa inesperada.
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Promesa
PoesiaUna vez recorrimos los pasillos escribiendo paredes. Una vez nos reímos de sus exnovios. Una vez le hice una promesa.