Grecia. En un mes. ¿Wats? Diría Ámbar por no decir "What"
Me siento una mierda de persona.
Basicaménte una mala persona.
Si tan solo podría dejar ese miedo atrás. Olvidarlo. Todo sería más fácil. Para mí y para él. Para todos mejor dicho. A Kevin le haría un gran favor de descanso psiquiátrico y Liam no estaría tan alerta a los demás si no fuera por mí hace años.
Solo causo problemas, preocupaciones y daño. Y para recalcar también miento.
Todo el año pasado estuve en un excelente estado por así decirlo. No lloraba, y menos por un chico. Ya no.
¿Cuánto me duró? Sí, menos de un año.
Los brazos de Liam eran los más reconfortantes en un momento difícil. Te rodeaba y te daba calor hasta que te sientas mejor.
Ningún abrazo se va a comparar con los de él. Pero Cassie se aproxima mucho.
Y ahora ella me reconforta, y es cuando lloro aún más.
La sensación familiar en mi pecho encogiéndose es lo que más me duele.
—Hey, Ámbar, no, no llores— dice Cassie en un tono preocupado acariciando mi cabello y mi espalda.
—Me odio tanto, soy una mala persona— murmuro en su pecho.
—¿Qué? no, estás loca, eres la mejor persona que he conocido en toda mi vida— besa mi cabeza y nos levanta a las dos.
Dejo de abrazarla y ella me agarra las manos y las aprieta en consuelo.
»¿Quieres contarme qué fué lo que pasó? Me dijiste que ibas a ir a casa de Ryan— frunce el ceño.
—Es que lo hice, necesitaba hablar con él. Pero, no precisamente hablamos— ella se cubre la boca de sorpresa.
—Espera, primero lo primero. ¿De qué tenían que hablar?— suspiro. No quiero mentirle, pero quiero saber bien como es la historia para contársela.
—Quería decirle que nos atrasamos tres putas semanas por su culpa de señor-evito-a-su-amiga y aún nos falta cosas del trabajo.
—¿Y entonces?
—¿Entonces qué?
—¿Cómo pasaron de hablar a follar?
—¡Cassie!
—Sabes que eso pasó y que también quiero distraerte.
—Lo sé, y te lo agradezco.
—Bien señora triztona, cuéntame ya— saca un pañuelito y me seca las lágrimas delicadamente.
—No me quiso decir porqué me evitó, lo cual me molestó demasiado, osea ¿Quién se cree que es? y me estaba por ir, pero me acorraló en su puerta y...
—¿Y qué? ¡¿Y qué?! Joder, solo dilo.
—Me besó— toco mis labios sonrojándome.
—¡Mierda, te sonrojaste! ¡No puede ser! ¡Ah!— grita soltando risas.
—Lo sé, y de besarnos pasamos a su cama y de ahí, nosotros... tú sabes.
—No, no sé nada— ruedo los ojos —cuéntame, detalles.
—No terminaré más así— me río.
—Solo cuenta.
—Me dijo que me deseaba mucho, y ¡Dios! fue tan sexy, me dijo que me follaría con la falda y lo hizo.
—Madre santa, no lo tenía así de descarado— se abanica y me rio.
—Ni yo— me doy vuelta y nos tiro para atrás. Literalmente la estoy aplastando —ay Cassie, fue tan lindo el momento y no sé, me gustó su dulzura y rudeza. No rudeza a lo Christian Grey pero sí me decía cosas sucias mientras lo hacíamos.
—Es que nadie se compara con Christian— suspiramos al mismo tiempo asintiendo.
—Es cierto— me masajea en pelo relajándome.
—Sigue contando.
—Despues él me dió su remera.
—¿Te pusiste su remera?
—Él me insistió y a mí me gustó el aroma.
—Nunca te pusiste la remera de otro chico con el que terminaste de follar.
Solo con un chico pienso.
—¿Y eso tiene algo de malo?
—No, pero es mucha intimidad y confianza, solo eso, continúa.
—Y solo nos quedamos en su cama conversando y besándonos— sonrío.
—Hasta que...— reemplazo mi sonrisa por una mueca —mierda, lo siento pero necesito saber que es lo que te hizo entrar aquí así.
—Lo sé, yo...— suspiro —nosotros estábamos bien y de repente le pregunté que significaba un tatuaje en su clavícula. Él me explicó que representa a las personas que ama infinitamente y le pregunté cuantas personas ama de esa forma y él...— mi labio tiembla.
—¿Él qué?— me abraza alentándome para que siga —¿Qué te hizo?, lo mataré si te lastimó
—Entonces deberías matarme a mí— ella niega conociéndome muy bien y pasándose al bando de Ryan —me dijo que hay una persona que ama infinitamente que hace poco conoció y me miró tan extrañamente que yo pensé, no, estoy segura que me dijo...— me corta exhalando con nostalgia.
—Indirectamente que te ama.
—Si.
—Dios mío— y vuelvo a llorar.
»¿Ay Ámbar que hiciste?—
—Yo-yo le menti diciéndole que supuestamente estabas embarazada
—¡¿Que dijiste qué?!— grita justo en mi oído.
—Lo siento, pero era lo más creíble.
—¿Y ahora tengo que comprar un test de embarazo que diga positivo para mostrárselo?— me río con las lágrimas en mi cara y me doy vuelta. Me está fulminando con la mirada.
—Pero le dije que aún no se sabe. Obviamente solo le vas a decir que era un retraso si pregunta.
Ella suspira. La convencí.
—Bien, lo haré, pero esa no es la razón por la que estás llorando— corre mis lágrimas y niego a su afirmación.
—Es que, él... él se merece a alguien mejor que yo. Necesita una chica que lo amé y no una como yo que es ajena y opuesta al romance.
—Puedes cambiar.
—¿Pero cuando eh?
—No lo sé, no soy psíquica— rodeo los ojos—Aún.
Me río.
»Entonces cuando te dijo indirectamente que te ama, tú le mentiste diciéndole que tenías que ayudarme a decifrar si estaba embarazada.
—Exactamente.
—Huíste— hago una mueca.
—Basicamente.
—¿Sabes que de ésto tiene la culpa Katherine no?
—No, ella no tiene nada que ver. El problema soy yo porque nadie en su sano juicio tiene miedo de enamorarse, excepto yo.
—Alguna vez te enamorarás pero tendrás que olvidar eso Ámbar ¿Por qué te cuesta tanto seguir adelante? ¿Hay algo que no sé?— pregunta frunciendo el entrecejo. Me tenso y niego rápidamente.
—No Cassie, es solo eso. Es que su cara... debiste ver su cara. Estaba llena de dolor, se contraía cada vez que él no le negaba que la había engañado. Si ella estaba así, yo no lo soportaría que me lo hagan a mí. Entiende que no quiero llorar por alguien que me lastime.
—Pero estás llorando porque tú lastimaste a alguien.
—Yo...— ok, eso es un punto para ella —bien, tienes razón.
—¿Tengo razón qué?
—Touché Cassandra, touché.
—Bien, ahora vete de aquí y pídele perdón, seguido de explicarle todo.
—¿Qué? no haré eso— ella me reprende con la mirada —Cassie en serio, solo déjalo estar.
—Esta bien, pero si le mientes otra vez, iré yo misma a contarle todo.
—De acuerdo sargento— no mentirle a Ryan va a ser más difícil que ponerle una cinta en la boca a Cassie —se supone que estás conmigo y ayudándome.
—Eso hago, ¿No lo notaste?— sonríe.
—Ya lo noté— la miro seria.
—De acuerdo, arriba, ánimo "cari"— ruedo los ojos.
—¿En serio? Solo Danna Paola puede decir cari.
—El intento estuvo, córrete— me empuja tanto que caigo al piso —sorry bitch, let's go.
—Cosas bilingües no, solo entendí bitch.
—Que raro. Levántate— nos paramos y ella me agarra las mejillas —no eres una mala persona ¿Ok?, solo no sabes reconocer que te pasan cosas con Ryan. Pero lo sabrás Ámbar, solo espera y por favor deja de mentirle y menos con que yo estoy embarazada.
—Lo intentaré.
—Por favor— me sonríe y me abraza . El calor y la sensación de la primera vez que fuimos amigas se instala en mi cabeza cuando me rodea con sus brazos.
Sí, se siente muy bien.
Nos separamos y bajamos hacia abajo donde escuchamos que provienen voces de la cocina.
Son risas. Fruncimos el ceño y nos dirigimos a esas voces.
Abro la boca y los ojos como platos cuando lo veo.
¡¿Qué carajos?!
No, no, no.
—¿Con que el lugar era en el parque eh?— sonríe de oreja a oreja —Hola linda.
Mi mamá sonríe y mi papá está un poco incómodo. Como yo.
—Sientate amor. Cassie, tú también.
—Claro que sí Raquel— me guiña un ojo la perra traidora y se sienta en la isla.
—¿Ámbar?— la miro a mi mamá.
—¿Qué?— digo apenas.
—Es un invitado, siéntate. Aunque ya vino el otro día, tienes que ser educada— me reprocha.
—Bien— a regañadientes me siento en los taburetes. Justo a mi lado está Ryan que me está sonriendo. Decido seguirle la corriente.
»¿Qué te trae por aquí Ryan? Es tan raro que aparezcas así como así— pongo mí hermosa sonrisa falsa.
—¡Ámbar!— me mira enojada mi mamá. Mi papá se ríe y escucho que ella lo patea. Su cara me lo confirma.
—Dijiste que sea educada— me hago la ofendida.
—Déjela señora Parker— y encima habla tan educadamente. Lo que me faltaba.
—No Ryan, porque así de malcriada queda— me tocó el pecho y Cassie se ríe. Una sola mirada de mi madre la hace cerrar la boca —de acuerdo, ahora que estamos serios, hablemos. Ryan.
—Sí. Como tú sabes linda— levanto las cejas, mi papá también y él ni caso —nosotros cumplimos el mismo día.
—Ajám. ¿Y qué con eso?— que vueltera es la gente. Mi papá vuelve a reírse. Somos tan parecidos.
—¡Ámbar, pide disculpas!
—Joder— la clara expresión de mi mamá diciendo que más tarde tenemos que hablar hace que me encoja un poco —lo siento Ryan pero ¿Puedes ir al punto? Gracias.
—Claro. Como decía, los dos cumplimos años y yo te quiero dar mi regalo por adelantado.
Me sorprendo. Nunca me puse nerviosa por recibir un regalo. Ni siquiera de mis padres. Claro, aprecio mucho que tengan un detalle conmigo y me siento agradecida, pero no es algo que ansio con tantas ganas.
Ryan está haciendo todo lo opuesto. Mis manos sudan al instante y mis piernas tiemblan bajo la isla. Estoy muy ansiosa y quiero saber que me va a regalar.
Del bolsillo de su campera saca un sobre color dorado y lo arrastra sobre el mármol hasta que llega hasta mi.
—Ábrelo— parece que él está más entusiasmado que yo.
—Eh... gracias Ryan— agarro el sobre y lo abro.
Lo primero que veo es mi nombre.
Nombre del pasajero: Sevedo/Ámbar E.
Primera clase.
Ida y vuelta.
Las puertas se cierran: 10:30 AM.
Fecha para abordar: 11 de mayo.
Fecha de vuelta: 18 de mayo.
Asiento: 1
Puerta: 2
Desde: París.
Hasta:
—¿Grecia?— sonrío.
—Feliz cumpleaños linda— me guiña un ojo.
—Estas loco. Yo-yo no puedo aceptar esto, lo siento— guardo el pasaje y siento que adentro hay otra tarjeta.
Lo saco y lo leo.
Nombre del pasajero: Cooper Ryan T.
Primera clase.
Ida y vuelta.
Las puertas se cierran: 10:30 AM.
Fecha para abordar: 11 de mayo.
Fecha de vuelta: 18 de mayo.
Asiento: 2
Puerta: 2
Desde: París.
Hasta: Grecia.
—Tú...
—Iria contigo. Exacto.
—No. Yo no... Es que no puedo aceptar semejante regalo.
—Es mi regalo para ti linda. Recuerda que tenía que compensarte por lo del auto.
Aún se acuerda eso. Yo ya lo había olvidado.
Sus dedos tocan mi pierna y siento como cosquillas por todo el cuerpo. Solo deja la mano ahí y sigue mirando a mis padres y a Cassie. Trato de disimular.
—Su nombre es Ámbar— dice mi padre ladeando la cabeza.
—Pero ésto te habrá costado una fortuna Ryan.
—Escucha, mis padres me dieron de regalo adelantado dinero, del cual no te diré cuanto. Me dijeron que podía hacer lo que quisiese con ello y mi mamá como tanto te ama y sabe que yo te quiero mucho como una amiga, me dijo que si yo queria podía comprar dos pasajes para vacacionar unos días donde quisiera. Hoy a la mañana llame a tu mamá, le pregunté de todos los países que visitaste y los que no, a cual te gustaría ir y ella me dijo a...
—Grecia— sonríe mi mamá.
—Es demasiado. Es demasiado— repito.
—Claro Ryan, apreciamos esto pero es demasiado— concuerda mi papá serio. Cassandra suelta una carcajada.
Mi mamá otra vez lo patea y él gime de dolor.
—Tú déjate de hacerte el chistoso, tú, deja de reírte que pareces una foca epiléptica, tú, no seas malagradecida y tú, por favor deja de ser tan adorable Ryan.
—Entoces ¿Por qué tú no te vas con Ryan tanto que lo adoras?
—Claro. Que astuta eres hija.
—Lo sé.
Cassie otra vez se ríe. Su rutina del día al parecer.
—No voy por dos razones. Uno, ya cumplí años hace dos meses y dos el regalo es para tí, no para mí.
—¡Buenas! ¿Quién tiene un regalo para mí?— entra Ethan con una sonrisa pero se le borra cuando ve a Ryan y mira que él me está tocando el muslo.
Oh, no. No terminará bien.
Deja de mirar y me mira a mí. Su apriete se intensifica cuando Ethan me saluda con un beso en la mejilla. Saco su mano de ahí y le presto atención a él.
—Hola enana.
—¿Cómo estás jirafa?— toco su ojo y hace una pequeña mueca —¿Aún te duele mucho?
—Solo un poco.
—¿Dónde estuviste?
—Después te cuento— sonríe.
—Encima misterioso. De acuerdo, hablamos después.
—Hola feo— lo saluda Cassie.
—Hola fea— besa su frente.
—Hola mi vida— mi mamá lo abraza bien fuerte y él le corresponde. Me río por dentro.
Ni a mí me abraza así, porque sabe que me asfixia. Literalmente.
—Estas demasiada...asfixiante Raquel— dice apenas y me río.
Ella lo suelta y bufa.
—Son todos unos débiles y flojos.
—O tú eres muy fuerte. Hola William— los dos chocan puños.
—¿No tomaste no?— suelta una carcajada y Ethan rueda los ojos.
—No señor, creo que nunca más voy a beber.
—La próxima trata de no vomitar en mi camioneta.
—No prometo nada.
Y ahora mi papá rueda los ojos.
—Ryan— él asiente.
—Ethan.
—¿Ustedes de dónde se conocen?— pregunta mi papá.
—Yo solo se un cuarto de lo que debería. Imagínate si te cuentan a tí.
Los dos se miran. Ethan con demasiada confusión ya que él nunca me contó su pasado con Ryan, y Ryan me mira diciendo lo que ya sé: después de nuestro cumpleaños.
—¿Qué cuarto sabes y qué y por qué deberías saber tú?— pregunta Ethan.
Mierda, aveces se me va la lengua.
—Ese cuarto es el que me contaron el segundo día de clases y lo que debería saber es porqué mi mejor amigo no me contó nada de eso.
Dios, solo Liam se daría cuenta que miento.
—Luego hablamos— dice y se sienta al lado de Cassie.
Ryan me mira. La cagaste linda. O algo asi me estaría diciendo.
—Bien, como decía. Linda, este es mi regalo. Y me encantaría demasiado que vayas conmigo, te aseguro que la vamos a pasar bien. Son siete días.
—Una semana— digo para mí misma —¿Y la escuela?
Wao, eso es lo más estúpido que dije en el día. No lo más estúpido fue mentir con que Cassie estaba embarazada.
Creo que hubo un año en el que falté como más de tres meses y yo preguntando que pasaría si falto una semana.
—Yo ya me ocupé de eso— dice mamá.
—¿Acaso ustedes conspiran en mi ausencia?— rodeo los ojos.
—¿Y en la mía?— pregunta mi papá.
Ella bufa.
—Eso no importa. Lo que importa es si quieres ir conmigo. ¿Nos vamos a Grecia?
Ir a Grecia.
Con Ryan.
Solos.
Una semana.
Con el chico que me gusta.
Y con el que le miento más que hablarle.
Ethan abre los ojos mirándome.
Mi mamá sigue con su sonrisa.
Mi papá... Mi papá no tiene expresión alguna.
Cassie sonríe aún más que mi mamá.
Ryan tiene una sonrisa tranquilizante y natural.
Y yo... Bueno yo ya no sé qué decir o pensar.
Solo tengo que decir si o no.
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Hola. Hola. Hola!!! Mi gente hermosa jsjsjsjs.
Cómo andan? Tanto tiempo.
Por dios, ya ni me acordaba de que se trataba la novela ahre😂.
Creo que hace tres o más meses que no toco Wattpad, les juro.
La tarea me tenía a full, pero por suerte ya terminé todo. Cómo siempre Lucero una genia, pasando de grado y encima todo 10😌.
Ahora ya me voy a dedicar en las vacas a escribir ya que voy a estar al pedo y la inspiración va a estar a tope.
Preguntas:
♥¿Ámbar aceptará el regalo?
♥¿Les gustó el capítulo?
Respondan, comenten y voten.
Los quiero y nos leemos luego ❤️