La policía acordonó la zona con la típica cinta de "NO TRASPASAR" mientras la ambulancia atendía a los testigos ya que uno de ellos tenía un fuerte golpe en la cabeza y el otro estaba en shock por haber visto como un animal gigantesco rompía el cristal del escaparate y salía huyendo. La gente estaba muy sorprendida, intentaba acercarse para saber qué había pasado pero la policía volvía la retiraba hacia atrás e intentaba tranquilizarla mientras hacían su trabajo.
-¡Eh, mirad! ¿¡Eso es un muerto?!-gritó uno de ellos señalando a la camilla que los médicos sacaban del videoclub totalmente tapada con una manta blanca-.
-¡Todo el mundo atrás! ¡Atrás!-ordenaron los agentes intentando contener a la gente que se daba empujones unos a otros buscando el mejor sitio y haciendo fotos y videos-¡He dicho que atrás!
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-¿Ahora lo entiendes?-preguntó Derek observando desde el techo de la tienda junto a Scott que estaba agachado mirando anonadado la escena-.
-Veo que va matando gente pero no entiendo por qué-se giró hacia él- Es decir, esta no es la práctica habitual, no salimos por la noche con el objetivo de matar¿verdad?
-No-replicó molesto- somos depredadores, no asesinos.
-¿Y él por qué asesina?-saltó sin comprender nada-.
-Tenemos que averiguarlo-se resignó dándose la vuelta y dándole la espalda a Scott mientras él seguía mirando abajo, se levantó del suelo y siguió a Derek-.
Se marcharon a la antigua casa de Derek, aquella casita chamuscada por las llamas hacía diez años del bosque, había estado discutiendo durante todo el camino de vuelta con lo cual Scott llegó un poco crispado.
-¿Sabes, tío? yo tengo una vida
-No la tienes-se burló él subiendo las escaleras sin darse la vuelta-.
-¡Sí que la tengo y no me importa lo que digas de si soy su mascota o qué..!-gritó subiendo un par de escaleras detrás de él-.
-De su manada-espetó girándose hacia él de forma sarcástica-.
-Lo que sea. Tengo deberes, he de ir mañana a la reunión de padres y profesores porque he suspendido química
-¿Quieres deberes? ¿O prefieres seguir vivo?-replicó al tiempo que Scott suspiraba indignado- En menos de una semana habrá luna llena y si no matas con él, él te matará a ti
-¿Lo dices en serio? ¿Quién hizo esas reglas?-protestó Scott metiéndose de mala manera las manos en los bolsillos de su chaqueta-.
-Es el rito de iniciación de su manada
-¿Sabes cuál es otro rito?-esperó un segundo- ¡Graduarse en el instituto y no hace falta matar a nadie para conseguirlo! ¿¡Por qué no puedes encontrarlo tú solo?! ¿Y si le rastreas cuando es humano?
-Su esencia de humano puede ser totalmente distinta y tienes que ser tú. Tienes un vínculo con él, algo que no puedes entender y si te enseño a controlar tus habilidades podrás encontrarle
Scott comenzó a morder su mejilla por y esperó a saber que responder.
-¿Y si te ayudo lo cazarás?
-Solo no, somos más fuertes en grupo. La manada hace que él sea más poderoso-protestó haciendo especial énfasis al principio de frase-.
-¿Cómo puedo ayudarte si no tengo ni idea de lo que hago?-insistió rodando los ojos hacia un lado-.
-¡Sí cuando te haya enseñado!-protestó- ¿Recuerdas cuando te dispararon en el brazo? ¿Justo después?
-Volví a ser yo-dijo más calmado-.
-¿Y cuándo te atropellaron?-esperó unos segundos esperando a que él lo comprendiera pero no dijo nada- ¿Qué tienen en común?
Al ver que no respondía le cogió del antebrazo y comenzó a apretarlo con fuerza al tiempo que los huesos empezaban a crujir y Scott a gritar hasta quedárse de rodillas pero no por eso Derek dejó de apretar.
-¿¡Qué demonios estás haciendo!?-consiguió decir entre alaridos-.
-Se te curará
-¡Dios! Sigue doliendo-gruñó sujetándose el brazo contrario y tratando de contener el dolor-.
-Eso te convierte en humano, el dolor-se volvió a oír un crujido proveniente del brazo de Scott, se estaba curando y él lo estaba viendo- ¿Ves? Puede que al final sobrevivas
Y se marchó subiendo las escaleras al piso de arriba.
Al día siguiente todo había vuelto a la normalidad, Amber y Ethan estaban en clase como el día anterior pero no podían concentrarse, un león de montaña andaba suelto por su cabeza además de por la ciudad y ya había matado a cinco personas inocentes en su paseo por las calles.
Sonó el timbre que daba fin a la segunda clase y los dos salieron disparados hacia el comedor.
-He buscado por internet sobre los ataques y los expertos dicen que hay ciertos rasgos que no encajan con la forma de actuar de ese bicho, mira-sacó unas fotos con bastante mala pinta de su mochila pero como a ella no le sorprendía ya nada de lo que hacía Ethan no pareció importarle mucho- ¿Ves el arañazo de la cara y que el resto de la cabeza está casi intacto?
-Sí, ¿qué le pasa?
-Un león de montaña no habría hecho solo un pequeño arañazo, le habría atacado al cuello con la mandíbula y lo habría matado.
-¿Y? El resto del cuerpo si está lleno de arañazos y los tobillos llenos de mordeduras pero eso no significa que...
-Ahí está lo interesante, mira esta otra-dijo pasándole otra foto-.
Ya no recordaba que ahora Amber tenía un grupo y como era de esperar todos se sentaron juntos a tomar el almuerzo tanto el grupo de Ethan como el de las chicas.
-¿Qué hacéis?-preguntó Ryan sentándose con la bandeja al lado de Amber y guiñándole un ojo de forma pícara-.
-Nada que te interese lo más mínimo- contestó ella guardando un par de fotos en su mochila y ayudando a Ethan a recoger las demás-.
-Venga, Amby... Ethan me lo cuenta todo ¿por qué no lo haces tú por una vez? Yo podría estar escuchándote horas y horas...
-Amber-replicó ella- Me llamo Amber ¿recuerdas?
-Es un apodo cariñoso ¿no te gusta?
-No, y tú tampoco. -suspiró poniendo los ojos en blanco y apartando la mirada de él- Ethan ¿de verdad que es amigo tuyo?
-Lo estoy sopesando ahora.-se rio él-.
-No es una chica fácil, me gusta.
-Tío, para ya. -dijo en serio-No la cabrees más porque te garantizo que saldrás perdiendo si sigues sin cerrar tu bocaza.
-¿Te gustan las chicas difíciles? Vale, Ethan ahora volvemos-preguntó agarrando a Ryan del brazo y llevándoselo del comedor-.
-¿A dónde vamos?-preguntó cuándo ella le soltó en el pasillo-.
-Es una sorpresa, sígueme-dijo con voz suave metiéndose al baño de las chicas y haciéndole un gesto a Ryan para que le siguiese-.
Él le hizo caso y entró detrás de ella, le estaba esperando detrás de la puerta apoyada en la pared con las manos detrás de la espalda.
-Bueno, ¿y que vamos a hacer aquí solos, Amber?-dijo de repente acercándose mucho a ella-.
-Dimelo tú, yo creo que ya te has hecho una idea-replicó empujándole ligeramente hasta unas barras de ducha, ahora las tornas habían cambiado y era ella quien invadía su espacio personal-.
-Sabía que no eras tan dura...-se inclinó hacia ella para besarla pero algo se lo impidió-.
-¿Pero qué..?
Tenía las manos atadas con unas esposas del padre de Ethan y no podía moverse de allí.
-Eres una...
-¿Chica difícil?- sonrió dándole un beso en la mejilla y poniéndole la llave colgada de un cordón alrededor de su cuello- Pensaba que habías dicho que ese era el tipo de chica que te gustaba. Pero tampoco soy tan mala como para dejarte ahí colgado sin las llaves
Salió del baño dejándole solo, ¿no quería guerra? Pues ella había ganado la primera batalla.
-¿Dónde está Ryan?-preguntó Will a tiempo que ella se sentaba de nuevo en su sitio-.
-Ha tenido que ir al baño repentinamente-esbozando una sonrisa y dándole y un mordisco a su manzana-.
-Mi padre me acaba de llamar, dice que le han desaparecido unas esposas misteriosamente ¿sabes algo?-susurró de forma irónica-.
-Ni lo más mínimo pero estoy segura de que pronto aparecerán.
-Eres una mala persona ¿sabes?
-Lo sé, pero si no, no aprenderá nunca. Por una vez mi conversación con él ha sido interesante y... muy divertida.
-¿Qué se supone que estáis cuchicheando vosotros dos?-preguntó Rachel divertida con voz baja- ¿Es algún tipo de secreto?
-Amber, ¿se lo cuentas tú o se lo cuento yo?
-¿Por qué tenemos que contárselo cuando puede verlo ella misma?-se giró hacia ella- Ve al baño de chicas y dime si crees que me he pasado o no.
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-¿Quiere que esperemos?-preguntó uno de los hombres cargando su pistola-.
-Ya me lo has repetido...-replicó con una mirada asesina la mujer que se encontraba en medio de los dos chicos que la acompañaban- mil veces...
-Igual no quiere que le matemos-contestó el otro más joven-.
-Pero a lo mejor quiere que le saludemos-sonrió la mujer mirando de nuevo a la solitaria y gris casita medio derruida y acercándose a ella seguida de sus guardaespaldas-.
Escuchó que alguien se acercaba a la casa y de inmediato tuvo que esconderse, segundos después la puerta se abrió de una patada y tres personas armadas entraron pero no se pasaron del recibidor ya que inspeccionaron primero si había alguien a la vista.
Nada.
-No está aquí
-Claro que está aquí-dijo con tono burlón dando un par de paso dentro de la casa- pero no está especialmente hospitalario.
-A lo mejor está enterrando un hueso en el jardín-bromeó el más joven girándose hacia la chica que le devolvió una mirada tan fría e intensa que parecía que quería atravesarlo-.
-¿De verdad? ¿Un chiste de perros? ¿Eso es lo mejor que se te ocurre?-se burló pasando al cuarto de estar- Si de verdad quieres provocarlo, di algo como: Que pena que tu hermana la palmara antes de tener su primera camada, que pena que aullara como una perra.
¡CUANDO LA CORTAMOS EN DOS!
Y en aquel momento se oyó un fuerte rugido y el cazador más joven salió despedido hacia la pared quedando inconsciente en el suelo.