Feliz "jaloguien" 🎃🎃 jajajajaja. Por fin acabé el capítulo, lo cierto es que pensé hacerlo más corto y reescribí algunas partes varias veces y cuando fui a publicar, pensé que me faltaba algo y tardé unos días más al añadir un regalito al final que espero que os guste.
Los edits los he sacado de internet y no se quien es la autora o autor de los mismo, desde aquí pido permiso para utilizarlos o mandarme un privado para poner el copyright
xxxxxxx
Las chicas y el resto del equipo, iban camino de la base, vigilantes de no encontrarse con ningún esbirro de Snake o de cualquier otro malhechor que rondara por aquella zona y, por supuesto, de lo que pudiera pasarle a Gaia, especialmente Indra. La mujer de Zecce estaba muy nerviosa e inquieta, no paraba de preguntar donde estaba la comandante y si ya habían localizado a su hija. Cuanto más tiempo pasara, más complicado sería rescatar a Gaia y eso lo sabía.
Por su parte, Jonas se mantenía abrazado a Clarke, que acariciaba dulcemente, su cabellera, para tranquilizarlo. La inquietud de Indra, ponía más nervioso al chico y Clarke pensó que podría ayudarle a descansar. Había sido un valiente, corriendo y escapando de esos tipos, pero la rubia sabía que estaba asustado, tenía miedo por lo que pudiera pasarle a su hermana, pero también, por todo lo vivido esas últimas horas, habían sido demasiadas emociones para un adolescente.
Clarke también estaba preocupada por la chica, nadie se merecía pasar por eso, y para Gaia era la segunda vez. Había visto lo que ese cerdo era capaz de hacer y la vida que le esperaba a la chica si no lograban rescatarla, pero lo que más le rondaba la cabeza en esos momentos, eran unos ojos verdes y una preciosa sonrisa de cierta comandante que iba a jugarse, de nuevo la vida, por proteger y salvar a inocentes. En ese momento, se dio cuenta del valor de todas esas personas como policías, bomberos, militares........ todos aquellos que se jugaban la vida por los demás y sobretodo, a sus mujeres, maridos, hijos o padres, que tenían que vivir todos los días con la preocupación de que algo pudiera pasarles, pero con el orgullo de saber que ayudan a los demás.
Sí, estaba preocupada por ella, mucho, joder hasta se había estrellado con un helicóptero y estaba segura que tenía muchas heridas y golpes por ello, pero también había visto a Lexa actuar con tanta confianza, tanta templanza en el momento de su rescate, que estaba segura que todo saldría bien, que lograría traer a Gaia de vuelta y que volvería sana y salva.
No pudo evitar pensar en las atenciones y cuidados que iba a proporcionarle a su bonita comandante para agradecerle todo lo que había hecho por ella, y por todos.
-¿pensando en la comandante? - le susurró Raven al oído. No le hizo falta escuchar la respuesta porque la mirada de Clarke lo decía todo - estará bien.
Clarke suspiró - lo sé, ................sé que ella sabe lo que hace........
-y tanto, no perdió la ocasión para acabar de nuevo encima tuyo -sonrió la latina que recibió un ligero codazo de su amiga - ¿quéeeee? es cierto y no pareció importarte.
-nos estaban disparando.
-claro, buena escusa - Raven sonrió de forma pícara y Clarke le sacó la lengua - en lugar de en el pecho, pensé que le volaría las pelotas a ese cerdo de Jay, tendría que habérmelo dejado a mí iba a darle una paliza...........
- tranquila pequeña Rambo, creo que has acumulado mucha violencia.
-yo solo quería hacer justicia, hacerle pagar todo lo que esos cabrones te estaban...............nos estaban haciendo - la voz de Raven se quebró un poco mientras se acurrucaba más sobre su propio cuerpo, recogiendo las ropas sobre él. Clarke puso su mano en la mejilla de su amiga en la que, unas lágrimas en fuga de esos hermosos ojos marrones, resbalaban por ella. Su amiga se hacía la dura, como si lo que hubiera pasado no le afectara, pero había estado tan asustada como ella, por suerte, la comandante había llegado entes de que pudiera pasarles algo más, pero, por unos instantes, habían estado a merced de esos bastardos, medio desnudas, con las manos de esos tipos en sus cuerpos y sin poder hacer nada y eso............. eso podía pasar factura en sus cabecitas.
-Raven, yo también estaba asustada, aterrorizada, pensé que iban a matarnos............ a todos - acarició el rostro de Jonas que se había quedado dormido en su regazo y besó su frente - y no es malo haber tenido miedo............... lo importante es que estamos juntas y estamos bien.
-siempre juntas rubia - Raven abrazó a Clarke.
-siempre juntas mi alocada amiga - se sonrieron.
-Gaia!!!! Gaia!!!!! mama!!!!!!!- Jonas despertó repentinamente.
-sssshhhhh, tranquilo, tranquilo...... - dijo Clarke acariciando su cabello - todo esta bien.
-ven aquí hijo - dijo Indra, haciendo que Jonas cambiara los brazos de Clarke por los de su madre.
-¿dónde esta mi hermana? quiero que Gaia vuelva.
-lo sé cariño, y yo.
-Bruce ¿sabes algo? - le preguntó Clarke al soldado que iba en esa parte trasera del camión con ellas.
-solo sé que vigilan los movimientos de Snake, y que no quieren precipitarse para no poner en peligro a la chica, de todos modos, queda poco para llegar a la base, allí Ray y la cabo Blake podrán decirnos más.
El no saber y no poder hacer nada, era muy frustrante para todos los que iban en ese camión, en concreto para Indra, que envolvió, fuertemente entre sus brazos a su hijo, como si se aferrara a algo que le diera esperanzas de que pronto tendría a su hija también en esos mismos brazos.
Clarke, le miró con cariño intentando transmitirle tranquilidad y confianza en que todo iría bien, pero no estaba segura de conseguirlo, ya que su preocupación por Lexa era algo que no podía controlar y el latido desbocado de su corazón era prueba de ello. Suspiró, y esta vez fue ella la que se acurrucó entre los brazos de su amiga latina, que entendió perfectamente, lo que rondaba por su cabecita o mejor dicho quien, inundaba todos los pensamientos de su rubia.
xxxxxxxxx
-Octavia!!!!!
-Raven!!!!!!
Las dos chicas corrieron la una hacia la otra en cuanto sus miradas coincidieron, cuando la latina llegó a la base militar. Octavia, había tenido su corazón encogido desde que se enteró que su chica estaba en manos de Snake y más, no estando allí con la comandante para ayudar, por culpa de un tonto malestar estomacal. Aun sabiendo que todo había ido bien, necesitaba verla, abrazarla, comprobar personalmente que su preciosa latina estaba perfectamente. Por supuesto, en cuanto estuvieron cerca, sus labios fueron los primeros en entrar en contacto, una caricia suave, dulce y necesitada.
Al separarse, una lagrima rodó por la mejilla de Octavia, al ver las marcas de los golpes que Raven tenía en su rostro y acarició con cariño cada marca.
-pero ¿qué te han hecho? .............malditos cabrones....... voy a.......
-Esto no es nada - Raven devolvió la caricia, limpiado esa lágrima del rostro de su morena - ¿si hubieras visto como quedó el otro? - sonrió Raven - estoy bien, culo bon........ - Clarke miró a Raven haciendo una mueca - quiero decir, la comandante llegó a tiempo, aunque ella se encargó de Jay y no me dejó a mí enseñarle modales a ese cerdo - la latina frunció el ceño en forma de enfado, aunque un enfado fingido.
Seguía siendo la misma Raven de siempre, pensó la ojiverde, y eso reconfortaba su sufrido coranzoncito.
-¿y tu? ¿qué te pasó? cuando Clarke me dijo lo del helicóptero.........
-tuve un pequeño malestar y, aunque quería ir, joder, debía ir, no estaba en condiciones de acompañarles.
-se que es egoísta, pero.......... me alegro de que no fueras en ese helicóptero..................
Otro beso unió sus labios.
-lo importante es que todos están bien, o al menos no están graves, y ahora, vamos coger a ese tipo y traer a Gaia de vuelta - Octavia le dio un beso en la mejilla a su chica y se giró hacia Clarke a la que también abrazó.
-me alegro de verte Clarke, supongo que fue un infierno lo que pasasteis.
-sí, pero como dice Raven, la comandante y su equipo llegaron a tiempo............. - la morena y la rubia se abrazaron - Dios Octavia, pensé que todos estabais muertos cuando vi caer el helicóptero.
-¿te hizo ver como derribaba el helicóptero? - Clarke asintió - ese tipo es mala gente.
-sí, lo es, sabía que.............. que la comandante era importante para mí - dijo algo más bajo para que solo lo escuchara la morena - quería que viera como moría junto a todos los demás.............
-no se como pudo enterarse o sospechar que vosotras................
-intentamos ser discretas, pero........ supongo que no hemos sido buenas en eso, en realidad, yo no lo he sido - sonrió levemente la doctora.
- no es culpa tuya Clarke, ese tipo iba a por nosotros.
-Gaia, ¿qué sabéis de ella?
- tenemos localizado el vehículo donde la llevan, la comandante va detrás y se reunirá con Zecce para planear la forma de rescatarla.
- ¿crees que........
-doctora Griffin!!!!!! cuanto me alegro que usted y los demás estén bien - dijo Bellamy acercándose a ella. Apareció por allí en cuanto vio llegar el camión - lamento todo lo que han pasado, le prometo que haremos todo lo posible por rescatar a la chica y detener a ese malnacido - el coronel debía seguir con su actuación para cubrirse las espaldas y para intentar averiguar si Snake se había ido de la lengua y había hablado más de la cuenta.
-gracias coronel, y sí, ha sido muy desagradable, pero por suerte el equipo de la comandante vino a por nosotros.
- estamos al corriente de todo, pensamos que la comandante estaba muerta, por suerte no fue así, Ray y la cabo Blake han hecho un gran trabajo localizando al equipo y mandando a Snow para ayudarles - Bellamy miró a Octavia y le sonrió, sus ojos mostraban orgullo, pero por dentro, se lamentaba del buen trabajo de su hermana - ya he enviado ayuda a la comandante.
-también has estado apunto de matarnos - dijo Raven algo enfadada - nos dispararon tus estúpidos helicópteros.
-sí, no sabe cuanto lo siento señorita Reyes - Bellamy ponía su mejor cara de hombre afligido y apenado por la situación, enfocando también los ojos de su hermana para que supiera que de verdad se preocupaba por lo que le hubiera podido pasar a su novia - me llegó la información de que ese tipo estaba en la zona y la orden era destruir el campamento, no sabía que ustedes estaban allí, nadie me dijo que..............
-ya claro...... - bufó Raven.
Sería el hermano de su novia y todo un coronel del ejército americano, pero era un verdadero capullo y no se fiaba de él.
-Rav....... - Octavia pasó un brazo por los hombros de Raven, no podía creer que Bellamy hubiera querido hacerles daño a propósito - él no lo sabía, nosotros no se lo dijimos........... - Raven miró a su chica cruzándose con unos bonitos ojos verdes que le miraban con amor, algo que no sentó bien a Bellamy, pero tuvo que aguantarse.
Bellamy volvió a girarse hacia Clarke e intentó desviar el tema - ¿escucharon algo que pueda ayudarnos a saber qué quiere hacer ese tipo? ¿Qué nos ayude a atraparlo o detener a sus compinches?
-no, lo siento, solo dijo que nos mataría y que se llevaría a los chicos para venderlos como mercancía.
- mi hija............. - dijo Indra con los ojos húmedos.
-no se preocupe señora Mays, le prometo que haremos todo lo que este en nuestra mano para traerle a su hija sana y salva................. ahora, deberíais descansar. y dejar que hagamos nuestro trabajo.
-pero queremos saber qué pasa - dijo Clarke.
- no te preocupes - Ray parecía el más tranquilo de todos los que allí había - os mantendremos informadas de todo, además, aquí no podéis hacer nada, de hecho, creo que sería bueno que visitarías a Jasp y Chen para ver que tal están e intentar tranquilizaros, habéis pasado por un mal rato.
-esta bien - se resignó Clarke - pero si hay novedades, por favor, nos informáis.
-claro, yo os llamo - dijo Octavia agarrando la mano de Raven y la de Clarke para tranquilizarlas. Se acercó a esta última para decirle algo - estará bien, la comandante es la mejor y si ese helicóptero no pudo con ella, menos ese cerdo de Snake.
Clarke le respondió con una sonrisa y rezando para que eso fuera verdad.
xxxxxxxxx
-¿Woods?
-sí, dime Ray.
-Las chicas han llegado sin problemas.
-bien, puedes encargarte de que.........
-ya lo he hecho, las hemos enviado a su campamento para descansar y cualquier cosa, Annie o el padre Thomas nos avisaran.
El corazón de Lexa se relajó al saber que su bonita doctora estaba a salvo. No era lo mismo perseguir a ese cerdo sabiendo que Clarke podría estar en peligro a tener la certeza que estaba segura.
-gracias Ray.................
-no te preocupes, estarán bien..............
Ray sabía del interés de Lexa por la doctora, y que era importante que supiera que estaba bien para centrarse en la misión, de todos modos, iba a decirle algo que podría alterarle uno poco.
- tengo que hablarte de algo.......... en privado
Lexa sabía a qué se refería con ese "privado"........... el traidor. Eso era lo bueno de contar con Ray en su equipo, no solo estaba controlando todo el operativo, sino que seguía buscando al soplón, porque sabía, que mientras estuviera escondido, podría poner en peligro, no solo dar caza a Snake, sino la vida de militares y de gente de a pie como Gaia.
Lexa accionó su radio para quedar en conversación a solas con Ray.
-adelante.
-he encontrado algo que........................... podría complicar la misión.
-¿cómo de complicado?
- he descubierto transacciones, cuentas bancarias, empresas ficticias que podrían relacionar al teniente Colt con el dinero de Snake.
-joder, ese cabrón, intuía que escondía algo.
Lincoln y Ellen acompañaban a Lexa en el jeep,miraron a la comandante como preguntándole qué pasaba.
-luego os explico - les dijo - bien Ray, pues presenta las pruebas al alto mando para que se investigue y poder detenerlo.
-eso sería lo ideal, pero aun no tengo todas las pruebas, sabes que él tiene familia importante en altos cargos militares y podrían echar por tierra todo lo que tenemos, por eso he de comprobar algunos datos e informaciones para tener algo muy seguro.
-bien, hazlo, pero entonces............ ¿cuál es el problema?.
- el problema es que el equipo de Colt, es el que ha enviado el coronel para apoyaros, y si es cierto que él es el topo..........
- puede ayudarle a escapar e incluso actuar contra nosotros............... - la sangre se le calentó más de lo normal al pensar que ese imbécil podía haber dejado que se llevaran a Clarke.
Se hizo un pequeño silencio y Lexa se quedó pensativa..........
-¿donde está Colt?
- como nosotros, sabe que Snake se dirige a su casa en la capital, piensa interceptarlo allí, pero si os dais prisa, tanto Zecce como tu llegaréis antes.
-bien, hemos de sacar a Gaia de las garras de ese tipo antes de que salga de su casa o llegue al aeródromo...................... por cierto Ray, ¿no había más equipos que el coronel pudiera enviar?
-supongo que sí...................... aunque, es posible que pensara que podía remediar su ineptitud por dejarse atrapar tan fácilmente y que Snake se llevara a las chicas.
-puede ser.............. - Lexa hizo una mueca apretando su mandíbula - cuando lleguemos al objetivo contacto contigo.
Cortaron la comunicación y de camino a la casa de Snake, Lexa puso en conocimiento de Lincoln y Ellen todas sus sospechas sobre el traidor, merecían saberlo si iban a jugarse la vida, y qué hacer si se encontraban con él. De momento, supondrían que les ayudaría a liberar a Gaia para ocultar sus intenciones, pero debían esperar cualquier cosa.
Algo le volvía a rondar la cabeza, y no solo esa pequeña migraña que se había instalado en ella después de caer de ese helicóptero, sino una preocupación de que algo se le escapaba, había algún cabo suelto que no conseguía enlazar con todo eso del topo, pero.......¿el qué?.
Ahora su primera preocupación era rescatar a Gaia y si podía, atrapar a Snake y después.................... después ya vería que hacía con el capullo de Finley Colt.
xxxxxxxxxx
Como habían previsto, Snake había llegado a su casa hacía quince minutos y por supuesto, el edificio estaba fuertemente vigilado. Divisaron dos furgonetas a la entrada de la casa y una en la parte trasera, además de varios coches. En una de ellas habían metido la mercancía del camión y suponían que eran para llevar a Snake al aeródromo. Zecce hacía un rato que estaba allí controlando todo lo que pasaba y poniéndolo en conocimiento de la comandante. Vio como sacaban a su hija maniatada del camión y como era arrastrada y empujada por esos cerdos dentro de la casa. Quería ir a por ella y hacerles pagar a esos cabrones todo el mal que estaban haciendo, pero Lexa le había convencido que él solo, con un par de hombres, sería un completo suicidio, también le informó de que Indra y Jonas estaban a salvo en el campamento de la ONG junto a los demás y que allí, todos recibirían protección hasta poder sacarlos del país.
Por otro lado, el teniente Colt estaba apunto de llegar, pero la comandante, como persona al mando de la operación, le ordenó vigilar la carretera que llevaba al aeródromo. No debía hacerle sospechar que no se fiaba de él, pero sí podría realizar esa vigilancia que estaría supervisada a través del satélite por Octavia, de esa manera no podría dejar escapar al delincuente.
-Ron, - empezó a decir Lexa por radio - avanzarás por el lado izquierdo hacia la parte de atrás, nosotros iremos por delante, nuestro primer objetivo es Gaia, hay que sacarla lo antes posible ¿de acuerdo?
-afirmativo comandante.
-¿cómo vas a hacerlo? hay mucha vigilancia, puedes poner el peligro a mi hija - dijo Zecce que estaba junto a Lexa.
-¿confías en mí?
Zecce miró a los ojos de la comandante y vio determinación y seguridad, si una persona, podía sacar sana y salva a su hija de allí, esa era Lexa.
-claro, Lexa, pero........
-la sacaré de ahí amigo, te lo prometo...................... necesito que vigiles aquí delante, nosotros entraremos y cuando saquemos a Gaia, te irás a la base con ella y si Snake intenta escapar, nosotros iremos tras él - Zecce asintió.
- pues vamos allá, Ray, Blake, ¿nos tenéis?
-sí, comandante, tiene cuatro hombres en la entrada y ocho dentro además de Snake, y hay un par en la parte de atrás.
-bien, vamos a patear unos cuantos culos - dijo Ellen sonriendo.
Con sigilo, Ellen y el sargento se cargaron a dos de los tipos de la entrada y dos disparos certeros de la comandante, se ocupó de los otros dos. Por desgracia, uno de ellos, logró efectuar un disparo lo que alertó al resto de gente que había en la casa, empezando un intercambio de disparos entre los soldados y los delincuentes en esa parte delantera y también en la zona donde estaba Snow.......
Dentro de la casa......
-Joder, Lenon ¿qué ha sido eso? - preguntó Snake que guardaba algunos papeles en un maletín.
-voy a ver.
El tipo desapareció por la puerta, mientras Snake cogía dos pistolas de un cajón, una la guardaba en su cadera y la otra la empuñó con mano derecha.
-señor - Lenon volvió con rapidez a ese despacho - son los militares, han rodeado la casa.
-mierda, seguro que es esa zorra de Woods, ¿cuántas vidas tiene esa puta? - gritó agitando la pistola.
-tenemos un coche en la parte de atrás, podemos mandar a los hombres allí y creo que podemos huir, pediré refuerzos.
-bien - Snake se acercó a Gaia - vamos, tu serás mi seguro para salir de aquí - dijo sujetando a la chica y apuntándola con la pistola.
Salieron a un pasillo, escuchando disparos detrás de ellos.
-no te saldrás con la tuya, te atraparán, mi padre y Lexa lo harán.
-calla niña - Snake abofeteó a Gaia.
-¿por qué no te metes con alguien que pueda defenderse?
Snake se giró en dirección a esa voz y apuntó con su pistola.
-Woods........... ¿preparada para morir de una puta vez?
El estruendo de varios disparos llenó ese pasillo..........
Unos instantes antes...........
- vamos sargento, entren en la casa, yo les cubro - dijo Lexa disparando a los lugares desde donde salían las balas de los delincuentes.
Tanto Lincoln como Ellen, se movieron hasta la puerta y ahora eran ellos cubrían la carrera de la comandante.
-Blake ¿donde está Gaia?
-comandante, creo que están saliendo de la penúltima habitación que hay en el pasillo, a sus doce y se mueven a la parte trasera.
Una ráfaga de disparos que provenían de una escalera superior les hizo cubrirse.
-joder, no puedo dejar que se la lleve.
-nosotros le cubrimos comandante - dijo Lincoln devolviendo los disparos junto con Ellen - coja a ese desgraciado.
Lexa entró en ese pasillo con cuidado, vigilando cada puerta y al fondo vio como Snake golpeaba a Gaia.
-¿por qué no te metes con alguien que pueda defenderse?
-Woods........... ¿preparada para morir de una puta vez?
El tipo le apuntó con una pistola a la vez que cubría su cuerpo con el de Gaia, después disparó.
Lexa se movió rápido y se cubrió de esas balas. Podía intentar dispararle, tenía puntería, aunque con Gaia de por medio, era peligroso, pero no podía dejar que saliera de esa casa con ella. Efectuó varios disparos, uno impactó en el tipo que acompañaba a Snake y que también le disparaba. El tipo cayó al suelo, y los otros disparos, buscaban impactar cerca de Snake para despistarlo y conseguir que su agarre sobre Gaia fuera menor.
El delincuente corrió hacia la parte de atrás para escapar arrastrando a Gaia con él, pero por suerte, esa parte estaba cubierta por Snow que impedía su huida, de momento. Optó por uno de los laterales de la casa, pero al dar la vuelta en el pasillo, recibió un golpe en la cara que le hizo soltar a la chica y caer desestabilizado hacia una pared y entonces sintió que alguien se abalanzó sobre él.
- ya te tengo cabrón.
Lexa le dio un golpe en un costado y cuando intento golpearle de nuevo, le esquivó y consiguió empujarle para quitársela de encima. Snake sacó la otra arma que llevaba en la cintura, ya que la primera había caído al suelo con el primer ataque de la comandante. Cuando intentó apuntar a la castaña, ésta ya estaba junto a él y de una patada, consiguió deshacerse también de esa pistola al golpear con fuerza su mano.
-maldita zorra, deberías estar muerta.
-ya ves, vi que tenías montada aquí una fiesta y me pareció de mala educación que no me invitaras - sonrió la comandante, algo que cabreó a Snake - así que decidí venir por mi cuenta con unos amigos.
El moreno se abalanzó sobre Lexa y empezaron un intercambio de golpes que acabó con los dos en el suelo luchando por recuperar una de esas armas.
-Gaia, corre, busca a Lincoln al final del pasi.........aaarrrrggggg
Lexa no pudo acabar la frase porque un golpe en el estómago le dejó sin respiración, aun así, vio como Gaia huía hacia su sargento.
-estas acabado Snake, no vas a poder huir de aquí.
-jajajaja, ¿en serio? eso ya lo veremos.
-vas a pudrirte en la cárcel el resto de tu vida y pagar por todo lo que has hecho.
-al final tendré que matarte con mis propias manos.
De nuevo se produjo otro intercambio de golpes, Snake utilizaba sus largos y fuertes brazos para golpear a Lexa y ésta, utilizaba sus poderosas piernas para devolverlos.
Snake consiguió sujetarle por el cuello y pegarla contra una pared.
- voy a divertirme contigo igual que hice con la puta se tu novia, ¿sabes? Tiene unas tetas preciosas jajajjaja.
-maldito cerdo.
Esas palabras enfurecieron a Lexa, el tipo estaba restregándole en la cara que había abusado del cuerpo de Clarke lo que hizo que fuera su rabia la que actuara, en lugar de su cabeza, acabando en el suelo al intentar golpear a ese malnacido.
Lexa se encontraba tumbada en el piso, boca arriba y cuando Snake intentó darle una patada, esta sujetó su pierna y lo tiró al suelo. En un movimiento rápido envolvió su cuello entre sus piernas, le cogió y retorció un brazo sobre su espalda y esperó a que la presión fuera dejando fuera de combate al cabrón............ ya lo tenía.
Cuando casi lo había conseguido apareció Lenon, el esbirro de Snake al que Lexa había disparado, y vio como le apuntaba con un arma. No tuvo más remedio que soltar su agarre sobre Snake y hacer un giro rápido para evitar el impacto de bala, pero no lo consiguió............
Al final de ese pasillo.......
- Lincoln!!!!!!
-Gaia, ¿estás bien? - le preguntó el sargento mientras desataba sus manos.
-sí , yo........ -Gaia no pudo evitar unas lágrimas mientras se abrazaba al moreno.
-tranquila, tranquila, ya estas a salvo - Lincoln abrazó a la chica para calmarla - Ellen, llévala con su padre, yo busco a la comandante.
El moreno avanzó por el pasillo a la vez que escuchó un par de disparos al fondo del mismo, sabía que era ahí donde la comandante estaba forcejeando con Snake. Al llegar, el corazón se le aceleró un poco más de lo que ya estaba al ver a la comandante boca a bajo e inmóvil.
-¿comandante, comandante?- dijo el sargento girando el cuerpo de la castaña y comprobando si estaba herida. No parecía haber sangre.
-aaaarrrrgggg, joder........ - Lexa se llevó la mano al pecho, justo donde una bala había impactado en su chaleco - nunca me acostumbro a esto......... como duele.
-gracias a Dios, ¿esta bien comandante? - Lincoln ayudó a Lexa a levantarse.
-sí, gracias, ............. lo único herido es mi orgullo, ese cabrón se me ha escapado................. y ¿Gaia?
- esta con Ellen camino de reunirse con su padre - Lexa asintió.
-Blake, ¿qué sabemos de Snake?
-ha logrado salir de la casa y subirse a un vehículo.
-¿qué ha pasado con Snow?
-Llegaron más esbirros de ese tipo y los acorralaron, he mandado el predator para ayudarle, pero no ha podido evitar que escapara.
-Linc, consigue un vehículo, tenemos que ir tras él............
En la base militar...........
-¿Finley me escuchas?
-sí coronel, alto y claro.
- Snake va hacia tu posición, pero la comandante le sigue muy cerca.......... no podemos dejar que lo atrape, definitivamente hay que eliminarlo, si habla, estamos perdidos.
-pero la orden es atraparlo vivo.
-no te preocupes por eso, diremos que no tuviste otra alternativa.
-pero su hermana nos vigila desde el satélite.
-lo tengo controlado, en dos minutos, perderán la señal, tiene vía libre para hacer lo que quiera.
-bien, lo haré volar en pedacitos.
-date prisa, Woods te pisa los talones.
Dentro del vehículo de la comandante.........
Snake había salido de su casa en dirección al aeródromo como habían supuesto. La persecución se complicaba, porque, las carreteras de salida de la capital estaban bastante transitadas. En esa zona, no todo era selva y caminos, sino que había un red de carretas y autovías con bastantes vehículos.
-Blake ¿los ves?
-si, está a unos diez coches por delante, es un Rover negro.
-¿y Colt?
-el teniente esta encima.
-que no lo pierda, lo quiero vivo. Vamos Linc, no podemos dejar que el teniente llegue antes, me da mala espina.
-claro - dijo el moreno con decisión acelerando para adelantar a algunos vehículos.
-comandante.............. acabo de perder la señal de satélite - dijo Octavia.
-joder!!!!!!!!
-no te preocupes, los tengo a la vista - dijo el sargento
En ese momento, un vehículo se acercó a ellos y comenzó a dispararles. Era uno de los esbirros de Snake. Lexa disparaba mientras Lincoln intentaba no perder al Snake. Habían salido a una carretera secundaria, ya no había vehículos, pero el tiroteo con el otro coche les estaba retrasando. Al final, la comandante acertó en una de las ruedas del otro vehículo haciendo que diera un giro inesperado y volcara. No se preocuparon de sí el tipo pudiera huir, su objetivo era Snake, pero al dar una curva bordeando un montículo, vieron como el coche de Snake estaba volcado en el suelo y con algunas llamas y otro que había parado a su lado. Intercambiaban disparos con Colt y sus hombres que se protegían con sus vehículos. Lexa pensó que ya lo tenían, que no podía escapar, entonces vio como Colt disparaba una granada hacia donde estaba Snake haciendo saltar por los aires su coche. Lexa corrió hacia el delincuente ya que había salido huyendo de la explosión. Lincoln le cubría mientras ella ya estaba a punto de atraparlo, entonces escuchó varios disparos detrás de ella que pasaron muy cerca y vio caer al suelo el cuerpo de Snake. Alguien le había disparado varias veces en la espalda. Llegó hasta él, le dio la vuelta, ya que había caído boca abajo. Se estaba formando un charco de sangre a la vez que de su boca se llenaba de ese mismo líquido.
-maldito cabrón, no, no, no!!!!!!!no te mueras, te necesito vivo.
Lexa sabía que si Snake moría no podía ayudarle a atrapar al traidor. Ese tipo se merecía un gran castigo, debía pagar todo el mal que había hecho, pero lo que de verdad enfadaba a Lexa, es que uno de los suyos, se dejara comprar por ese tipo y provocara el fracaso de misiones e incluso heridos o muertes de sus compañeros.
Snake intentó decir algo, pero no pudo, ya estaba muerto, aunque Lexa sí se fijó que sus ojos miraban a algo detrás de ella o mejor dicho a alguien............. Colt.
El teniente sujetaba su arma recién disparada y su mirada mostraba satisfacción.
Lexa se acercó al teniente hecha una furia.
-¿pero que coño has hecho? dije que lo quería vivo !!!!!!!! - gritó Lexa
-buena manera de agradecerme que me encargara de ese tipo.
-¿agradecerte?!!!!!!!!!! maldita sea, no hacía falta hacer volar el coche ni dispararle, ya lo teníamos.
- No me digas lo que tengo que hacer !!!!!!!!!!!! - contestó Finley con el mismo tono de voz - estaban escapando y disparándonos.
-maldito gilipollas , eres un..........
Lexa no acabó la frase porque le propinó un puñetazo en la cara al teniente que lo llevó al suelo. Deseaba hacer eso desde que sospechó que había facilitado que Snake se llevara a Clarke.
Finley se levantó y se quitó algo de sangre que brotaba de su labio inferior y después de mirar ese rojo líquido en su mano, miró a Lexa con rabia.
- hija de putaaaa!!!!!!!!!! estás acabada voy a hacer que te echen.
Finley intentó atacar a Lexa, pero uno de sus hombres lo detuvo del mismo modo que Lincoln sujetó a la comandante para que no acabara machacándole la cara a ese idiota y se metiera en un lío. Tenían indicios de su posible relación con Snake, pero hasta que no se probara, no podía tomarse la justicia por su mano, es lo que buscaban algunos superiores para acabar con la carrera militar de la comandante y no se lo pondría fácil.
-esto no acaba aquí, Woods.
-vamos comandante, no merece la pena............ por ahora - le susurró Lincoln.
-te estaré esperando donde y cuando quieras - dijo Lexa mirando con asco a Finley.
-comandante, sargento, ¿que ha pasado? no tenemos visual - se escuchó a Octavia por la radio.
-Snake esta muerto..............- dijo el moreno
-pero ¿cómo?
- a la vuelta te contamos.
-¿vosotros estáis bien? - preguntó Ray
-sí Ray, lo estamos, gracias - contestó la comandante - ¿Zecce y Gaia?
-están bien y de camino, Snow y Ellen están en la casa de Snake, recogiendo pruebas que nos puedan servir para coger a los socios de Snake.
-bien, nos vemos en la base.
xxxxxxxxx
A pesar de su cansancio, se había ocupado de que Indra y sus hijos estuvieran bien atendidos en las instalaciones de la ONG. Había sido una gran alegría cuando vieron aparecer a Octavia junto con Gaia y su padre en el campamento. Por fin Zecce había recuperado a su familia y estaban todos a salvo. Thomas no se había separado de ella ni un momento, le insistía en que descansara, que lo que había pasado era muy traumático, pero era demasiado cabezota para hacer caso, incluso se acercó al pequeño hospital que tenían para ver como estaban Chen y Jasp. En la base tenían hospital y serían bien atendidos, pero decidieron que lo mejor era dejarlos descansar y al día siguiente serían trasladados, sobre todo el piloto, que había perdido mucha sangre y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente de sus heridas. Pero, lo que más había tranquilizado su corazón, era saber que Lexa estaba bien. No les habían explicado lo que había pasado, solo que Snake estaba muerto y que, a parte de algún herido leve, todos los soldados, incluidos la comandante, volvían a la base.
Habían pasado varias horas y hacía un rato que había anochecido.
Se había relajado con una ducha templada, limpiando de su cuerpo, no solo toda la suciedad acumulada, sino también todas las desagradables sensaciones que Snake, Jay y sus hombres, habían dejado en él con sus sucias manos. Algunas lágrimas se le escaparon cuando al cerrar los ojos, revivió el momento en que tirada en el suelo de ese cobertizo y con sus ropas rasgadas, Jay se encontraba encima de ella dispuesto a violarla. En ese momento, ya lejos del peligro, se dio cuenta del horror que habían vivido, de la huella imborrable que eso hubiera dejado en ella para siempre, sintiéndose impotente al saber que no podía hacer nada para evitarlo, pero........... se quedaría solo en una pesadilla gracias a Lexa.
Sabía que la comandante hubiera hecho lo mismo por cualquier persona que hubiera estado retenida por esos cerdos, pero la mirada de ese iris verde con el que se encontró en ese momento, le decía que por ella, Lexa hubiera hecho mucho más.
De vuelta a su barracón, se asomó a la habitación de su amiga que dormía como un tronco junto a Octavia. No dudaba que también ella tendría algunas pesadillas por lo que habían pasado, pero para su suerte, había podido conciliar el sueño, abrazaza a su novia que ya le había proporcionado dulces y cariñosas atenciones.
A pesar de saber que Lexa estaba bien, necesitaba verla, tocarla, jodeeeeer, necesitaba sentir de nuevo esos carnosos labios en los suyos, y esa mirada tan dulce y llena de ternura que le regalaba cada vez que sus ojos se cruzaban y eso le impedía conciliar el sueño.
Como no podía dormir, se fue a su consultorio a simplemente no hacer nada, pero pensó en sus padres. Seguro que se enterarían de lo que había pasado y sería mejor que ella misma les dijera que estaba bien. Miró la hora para comprobar que la diferencia horaria le permitía encontrar a sus padres en casa. La alegría de Abby por escuchar la voz de su hija, se transformó en preocupación al escuchar el relato de su secuestro, pero agradeció que Clarke le llamara para contarle que estaba bien, mejor dicho, que todos estaban bien.
Esa conversación había conseguido que se relajara y que por fin, el cansancio empezara a vencerle. Después de más de media hora de charla, cortó la comunicación para intentar dormir.
Estaba cerrando la puerta de su pequeño despacho en ese consultorio, cuando su corazón se alteró al escuchar una voz que estaba esperando oír durante horas.
-¿ya esta cerrando, doctora?
Clarke se giró y encontró esas esferas verdes que llenaban su estómago de miles de aleteos de preciosas mariposas que le generaban un cosquilleo agradable que llegaba hasta ese músculo que bombeaba fuerte en su pecho en ese instante.
-¿cree que podría atender a una paciente más? - sonrió la castaña.
Lexa estaba apoyada en el marco de la puerta con su ropa militar informal, bermudas y camiseta verdes, con su melena suelta descansando en unos de sus hombros, y a pesar de que no había mucha luz, se le notaba cansada, agotada, pero esa sonrisa, esos hoyuelos, ese brillo especial en sus ojos cuando se encontraban con los suyos.................. estaba absolutamente preciosa.
Clarke caminó hacia Lexa y ésta hizo lo mismo hasta encontrarse a mitad de camino, la rubia pasó sus brazos por los hombros de la castaña hasta enlazar sus dedos detrás de su nuca y por su parte la castaña, posó sus manos sobre las caderas de la doctora. Cielo y bosque dibujaron un paisaje hermoso y lleno de cariño.
-por supuesto comandante, siempre tengo tiempo para usted - dijo Clarke y sus labios se unieron en un beso dulce, tierno y necesitado.
xxxxxxxxxxx
A pesar de haberse repuesto a todos los obstáculos que habían sufrido para que la misión tuviera éxito y rescatar a la chicas y la familia del jefe de policía, el humor de Lexa no era el mejor que pudiera tenerse. Habían conseguido cerrar el negocio de Snake y eliminar a un tipo tan corrupto como el capitán Jay, pero la muerte en tan extrañas circunstancias de Snake a manos de Colt, le había trastocado bastante sus planes, ya que no podría interrogarle y sacarle más información para atrapar a sus socios y, sobre todo, al militar que le había estado ayudando y que estaba segura que era Finley. Cada vez que cruzaba su mirada con él, sus ganas de romperle los dientes se multiplicaba por cien y solo una mano tranquilizadora y comprensiva de su sargento y amigo, había podido controlar su enfado.
Regresaron a la casa de Snake después de que los bomberos apagaran las llamas del coche de Snake y de que ellos recogieran todo el material posible del mismo. Cualquier papel, ordenador, teléfono que consiguieran, podría ser de mucha ayuda para acabar con toda la trama delictiva del mafioso. Estuvo pendiente de todo lo que Finley hacía, no quería que ese idiota manipulara o hiciera desaparecer alguna de las pruebas. Le había ordenado que volviera a la base para ocuparse ella y su equipo junto con el teniente Snow de registrar esa mansión, pero el coronel no le dejó, decía que prefería mantenerlo allí por si algunos socios de Snake enviaban a gente para atacarles. A buenas horas se preocupaba el gilipollas del coronel de ellos, primero les había dado por muertos, luego casi les hace soltar por los aires con el ataque aéreo y para colmo, había felicitado a Colt por cargarse a Snake como si fuera él, el que les hubiera salvado de ese tipo. No quería ser malpensada porque conocía los méritos del coronel, había sido un buen soldado, aunque algo gilipollas, además.............. era el hermano de la cabo Blake y ella no se merecería eso, pero.................... algo le olía mal y por lo que había sucedido esos últimos días sospechaba que el coronel sabía algo más de lo parecía................
Al llegar a la base almacenaron todo lo recogido en uno de los almacenes y especificó a un par de soldados que lo vigilaran para que nadie entrara ni se llevaran nada, ya que habían confiscado mucho dinero. No tuvo muchas palabras con el coronel, que parecía más interesado en hablar con el teniente Colt, pero tampoco tenía muchas ganas de hacerlo. Lo que sí le interesaba era su conversación con Ray tenían que poner en común todo lo que el jefe de operaciones había averiguado y lo que ella había visto.
Antes de eso, la comandante se interesó por los heridos comprobando que mejoraban y felicitó a todos por su trabajo, había sido un día largo y lleno de tensión, estaba muy orgullosa de su comportamiento y les había ordenado descansar.
-bien, tendremos que repasar todos los datos que has recopilado, compararlos con lo que podamos sacar de los ordenadores confiscados y los teléfonos, además tenemos que........
-Comandante, debería descansar - le interrumpió Ray.
-luego, ahora debemos comprobar estos.......
-Lexa - Ray puso una mano en el hombro de la castaña haciendo que parara y se miraran en silencio, un silencio cómodo, pero que decía muchas cosas.
Desde que había llegado, la comandante se había hecho cargo de todo, sin ni siquiera tomarse un tiempo para descansar o que atendieran sus heridas. Ray había estado a su lado en todo momento y los gestos de Lexa le habían demostrado que no estaba bien, unas ojeras incipientes, rigidez en algunos movimientos, muecas de dolor que intentaba ocultar, ni siquiera se había dado una ducha para al menos relajarse un poco, y como buen amigo, iba a hacerle parar. Sabía que para Lexa era muy importante atrapar al traidor y cualquier otro colaborador del mismo o de Snake, le había contado sus sospechas sobre la posibilidad que el coronel pudiera estar también implicado de alguna forma y sabía que no pararía hasta averiguar la verdad, pero no estaba dispuesto a que fuera a costa de la salud de su amiga.
-necesitas descansar, Lexa, llevas casi veinticuatro horas en pie, te has estrellado con un helicóptero, has rescatado a cinco personas salvando sus vidas, has estado en varios tiroteos, has acabado con un cerdo como Snake, joder, incluso tienes un agujero en tu chaleco que podía haberte.................. matado.................creo que por hoy ya has hecho bastante.
Lexa soltó aire muy despacio a la vez que llevaba su mano a esa zona donde había impactado esa bala. Ciertamente le dolía todo, no había un músculo ni un hueso de su cuerpo que no le doliera............ y su dolor de cabeza empezaba a ser muy molesto.
-Lo sé, solo que........
-yo también necesito descansar - Ray le sonrió con cariño y con cara de agotamiento, fue el momento en que Lexa se dio cuenta que Ray tenía razón - te prometo que después de una horas de sueño, revisaré todo esto y si descubro algo te aviso.
-esta bien, me daré una ducha y dormiré un poco............... pero también vendré pronto para ayudarte.
-supongo que eres demasiado cabezota para impedírtelo.
-supongo.........
--------
Un rato después, Lexa ya estaba bajo la ducha intentando relajar su cuerpo y dejar en blanco su mente para poder dormir. Se vistió despacio porque sus músculos estaban bastante agarrotados. Se puso unas bermudas militares y una camiseta de manga corta y cuando recogió la ropa sucia, el pañuelo que Clarke le había regalado cayó al suelo. Al recogerlo, rápidamente su mente se llenó de imágenes de su bonita doctora. Sabía que estaba bien, a salvo, pero había pasado tanto miedo al pensar que podría perderla............ ...
Llevó esa pequeña prenda a su nariz y por suerte, todavía conservaba el aroma de la rubia y se lo ató al cuello. Estaba agotada y las horas, no eran las más adecuadas, pero............. en lugar de regresar a su habitación, decidió que en otro lugar conseguiría mucho mejor descanso.
Al llegar al campamento de la ONG vio luz en el consultorio médico de Clarke, así que se acercó hasta allí, estaba segura que en ese lugar la encontraría. Llegó a la puerta y para su suerte, vio como la rubia, salía de su pequeño despacho colocándose de espaldas para cerrar la puerta. Camiseta holgada, pantaloncillos cortos, pelo suelto y alborotado..............
-¿ya esta cerrando, doctora?
Clarke se giró, y Lexa encontró eso que estaba buscando en su nocturna visita, unos brillantes ojos azules y una sonrisa que hacía que su corazón bombeara fuerte y que su estómago se llenara de un hormigueo que le hacía olvidarse de todo, e imaginar que en ese instante, solo eran ellas dos.
Aunque había poca luz, Clarke desprendía una belleza que a ella le volvía loca y que le era imposible resistir.
-¿cree que podría atender a una paciente más? - sonrió.
Clarke caminó hacia ella y Lexa hizo lo mismo hasta encontrarse a mitad de camino. Se enlazaron como ya sabían de memoria, algo que les salía de forma natural y que les hacía ser una sola.
Unieron sus miradas y Lexa pensó que Ray no tenía razón, no necesitaba dormir o descansar, lo que de verdad necesitaba para estar bien, era perderse en ese cielo azul y en esos brazos de su bonita doctora.
-por supuesto comandante, siempre tengo tiempo para usted.
Sus labios se unieron en un beso dulce, tierno y necesitado.
Joder, eso era lo que curaba todos sus males, esos dulces labios de su bonita doctora en los suyos y que eran el lugar a donde siempre quería volver y de donde nunca se iría.
Al cortar el beso, Clarke rodeó su cintura con los brazos, dejando descansar su mejilla en su pecho y ella envolvió el cuerpo de su rubia queriendo protegerla de todo aquello que pudiera hacerle daño.
Se quedaron así unos instantes, donde parecía que el universo se hubiera parado, que el espacio y el tiempo hubieran perdido su valor, con Clarke disfrutando del calor del cuerpo de su comandante, escuchando de acompañamiento y sintiendo los latidos de su corazón en su pecho, y Lexa, embriagándose de todos las sensaciones que ese abrazo y el suave aroma de Clarke le regaban.
-he pasado tanto miedo, Lexa - dijo Clarke saliendo de su escondite y reflejando sus ojos en los de la comandante.
-y yo cuando supe que te habían secuestrado - Lexa envolvió entre sus manos el rostro de Clarke - jamás he pasado tanto miedo pensando en lo que ese tipo.......... me dijo que te había.......... no sabes las ganas que tenía de cortarle sus sucias manos por ponerte una de ellas encima, Clarke,
dime que no te .........
-sssshhhh - Clarke le hizo callar posando un par de dedos en los carnosos labios de la castaña - no, no lo hizo porque mi comandante, con su brillante armadura, vino a rescatarme antes se que ese malnacido pudiera hacerme nada.
Clarke sonrió de esa forma que a Lexa le removía todo por dentro de una forma tan agradable, que le parecía estar en el paraíso.
Lexa le regresó la sonrisa haciendo aparecer esos hoyuelos que revolucionaban su corazón, además de humedecer su ropa interior.
El rostro de Lexa reflejaba cansancio, agotamiento, pero en ese momento y por encima de cualquier obligación, Lexa estaba allí, con ella, asegurándose de que estaba bien, otra vez, después de haberle salvado la vida, y dejando que ella comprobara que había cumplido con su promesa de mantenerse a salvo.
Vio en su cuello el pañuelo que le había regalado.
-bonito pañuelo.
-lo es, pero más bonita es la mujer que me lo ha regalado y que me ha dado suerte.
Absolutamente adorable y tierna. Joder, deseaba a Lexa, la deseaba mucho, y no sabía si era el momento y el lugar, pero ahora quería ser ella la que cuidara de su preciosa comandante y demostrarle todo lo que le hacía sentir. Así que empezó otro beso que subió rápidamente la temperatura de ambas cuando la lengua de la rubia buscó y encontró la de Lexa.
Su intención era comprobar con sus propios ojos que Clarke estaba bien, que esos hijos de puta no le habían hecho nada a su bonita doctora, algunos besos, unas caricias y volver a la base a descansar, pero eso era una ingenuidad, sabía que, en cuanto sus labios se unieran, iba a querer más, mucho más.
Subió la apuesta, y enredó sus dedos en la melena de Clarke para impedir que sus labios se separaran y demostrarle que, lo que estaban haciendo, era justo lo que quería. Clarke entendió el mensaje y empujó a Lexa hacia un sofá que ya había sido testigo de la lujuriosa liberación de sus deseos en días anteriores.
Clarke se quitó su blusa con rapidez, observando como los ojos de Lexa se perdían en sus pronunciadas curvas y después, llevó las manos al borde de la camiseta de la castaña y empezó a retirarla despacio, acariciando parte de esa suave piel que iba quedando al descubierto.
Lo primero que mostraron sus ojos fue deseo, pero rápidamente se transformaron en preocupación al ver determinadas marcas rojizas e incipientes moratones en su piel. Se fijó en una zona concreta de su pecho donde había una marca redondeada que sabía reconocer de sus años en urgencias.
-Lexa......... - susurró - esto en la marca de una......
Acarició lentamente con la yema de sus dedos, no solo ese punto, sino el resto de las marcas que tenían la osadía de corromper ese lienzo tan perfecto que era la piel de la castaña.
-no es nada, llevaba chaleco, solo....... aaarrrgggg
Clarke presionó un poco en una de ellas provocando el quejido de la comandante.
-¿como que no es nada? Lexa, tienes heridas por todo el........ ¿te ha revisado un médico?
- estoy bien, solo..... aaarrggg - la rubia presionó otra de esas rojeces.
-¿bien? - miro a Lexa torciendo el morro y alzando una ceja. Clarke era tan adorable preocupándose por ella, por sus heridas.
-vale, vale, me duele un poco, pero con un poco de descanso se arregla, no es la primera vez que.....
-podrías tener alguna lesión interna, podría ser grave............. Lexa............ caíste de un helicóptero, por Dios!!!!!!!.
-lo sé, estuve allí, pero me gusta el tratamiento que me estás dando, no necesito nada más - Lexa cerró la distancia entre sus labios agradeciendo su preocupación, pero tenía claro lo que quería hacer. Clarke no evitó el beso puesto que también lo deseaba, aunque eso no le haría olvidar su intención de tratar esas heridas.
-lo sé, y a mí me gusta administrártelo, joder - resopló - me encanta besarte, pero, estas heridas necesitan otra cosa......... - Clarke posó una mano en el pecho de la comandante y acarició su mejilla con dulzura - Lexa, déjame que ahora sea yo la que cuide de ti.
¿Cómo iba a negarse ante esos gestos y ese hermoso azul cielo?
Lexa asintió dejando que Clarke le llevara hasta una camilla donde espero a que la doctora sacara el material médico que necesitaba e hiciera su trabajo. Clarke volvió a ponerse la camiseta provocando un gruñido de decepción en la castaña.
-no hacía falta que te la pusieras - sonrió con picardía.
- es muy traviesa, comandante.
-solo cuando estoy contigo.
Unas sonrisas y un casto beso, zanjó ese flirteo de la castaña.
Clarke necesitó mucha fuerza de voluntad para no sucumbir a los encantos de Lexa, ya que no paraba de robarle besos, de llevar las manos donde no debía y de mirarle como si ella fuera lo más hermoso del universo. Después de un rato de curas y algún que otro punto de sutura, mezclados con caricias y besos cortos, pero llenos de cariño, la rubia doctora acabó su trabajo.
-Lexa, tienes dos costillas fisuradas, varios hematomas y un fuerte golpe en la columna, no parece que haya vertebras afectadas, pero debe dolerte mucho, te he puesto un antiinflamatorio, pero deberías descansar.
-Es bueno tener una doctora personal a cualquier hora - Lexa sujetó las manos de Clarke, las besó y le sonrió - gracias.
-debes revisarte esos golpes durante varios días.
- ¿me esta dando una cita, doctora?
Lexa bajó se la camilla, rodeó las caderas de Clarke con sus manos y unió sus cuerpos de manera que fuera imposible que el aire pasará entre ellas.
¿Cómo podía ser, que con todo lo que ese cuerpo había soportado en veinticuatro horas, pudiera tenerse en pie y además coquetear con ella?
-Lexa, hablo en serio, debes descansar y......
-y yo también hablo en serio - ahora Lexa acarició con la punta de su nariz la de Clarke - no podría estar en mejores manos.
Clarke acarició el rostro de la comandante comprobando que incluso tenía problemas para mantener los ojos abiertos.
-pues como tu médico, te ordeno que descanses, necesitas dormir.
-últimamente no hago mucho caso a las órdenes que me dan, pero contigo podría hacer una excepción si............. pudiera dormir contigo.
En eso estuvieron las dos de acuerdo, Clarke se aseguraría que Lexa descansara, además de que dormir entre los brazos de la castaña era lo que deseaba hacer, y por su parte la comandante, tendría el premio que buscaba, tener entre sus brazos a la mujer que era dueña de su corazón.
Llegaron a la habitación de Clarke, evitando hacer ruido para no despertar a Raven y Octavia. Lexa comenzó a desnudarse quedándose solo en sus bóxers. Clarke le miró extrañada, ya sentada en la cama con su blusa y el pantaloncillo puesto, al parecer, Lexa no quería que hubiera obstáculos que impidieran el contacto entre ellas y pensó que, ¿por qué no? lo cierto es que sería la mejor manera de entrar en el mundo de los sueños, sintiendo esa tersa piel de la comandante en la suya.No tardó en quedar en las mismas condiciones que la castaña bajo la atenta y pícara mirada de Lexa. Como disfrutaba de ese verde brillante perdido en su cuerpo, nunca nadie le había mirado de esa manera, mezcla de deseo y amor.
Se acurrucaron la una contra la otra y Lexa no pudo evitar besar esos labios que le enloquecían. Estaba cansada, agotada, pero la necesidad de amar a su bonita doctora, después de lo que habían pasado era algo que no podía controlar.
-Clarke, quiero......... quiero sentirte, necesito....
Solo pretendía abrazarse a Clarke y viajar por el mundo de los sueños, pero quería algo más de realidad, quería tener algo más con lo que soñar. Lexa movió su cuerpo para colocarse encima de la doctora encajando una pierna entre las de Clarke comenzando un balanceo que la rubia acompañó con sus caderas y uniendo sus labios de nuevo.
Cada vez sus cuerpos se encendían más, las gotas de sudor comenzaban a perlar sus pieles, sus respiraciones se alteraban entre beso y beso........... estaba claro lo que Lexa quería y Clarke no iba a ser la que opusiera resistencia, no, había estado a punto de perderla y no iba a impedir que se demostraran lo que se amaban.
Lexa paró su movimiento para quitarse sus bóxers y después hizo lo mismo con esa prenda de la doctora arrastrándola lentamente por sus piernas, no quería obstáculos entre ellas.
No se decían nada, sus ojos ya hablaban por ellas, ya se lo decían todo.
La comandante volvió a colocarse sobre la doctora haciendo que sus sexos entraran en contacto y continuando ese balanceo que elevaba su excitación y la presión en sus entrepiernas.
Lexa apoyó los codos a ambos lados de cuello de la rubia, enredó sus dedos en esa sedosa cabellera rubia y atacó los labios de Clarke con hambre. La doctora llevó sus manos a los glúteos de la comandante para intensificar el contacto de ambos clítoris, duros e hinchados, calentando más sus centros que estaban apunto de explotar en el placer.
-Lexa.......... aaahhh, aaahhh, aaahhh.
Clarke ya no pudo contener sus gemidos y Lexa se alimentó de ellos haciéndose dueña de su boca, de sus labios, de su lengua, aumentando el vaivén de su cuerpo logrando que también sus pezones gozaran de su unión con los de la rubia.
El placer no tardó en alcanzarles, el cuerpo de Clarke tembló y las endorfinas inundaron su sangre a la vez que Lexa se desplomó sobre el cuerpo de Clarke, arrastrada también por ese éxtasis que provocó un tsunami en su interior.
La comandante ladeó su cuerpo para dejar a Clarke recuperar su respiración, mientras ella se acurrucaba sobre el pecho de la rubia, envolviendo con su brazo su estómago y descansando su cabeza sobre el pecho de su bonita doctora dejando que el latido agitado de su corazón, le llevara con Morfeo.
Clarke tapó sus cuerpos desnudos mientras el eco de su placer todavía recorría su interior, con su corazón desbocado, dejando que Lexa se durmiera sobre ella. Besó su castaña melena, pasó el brazo por su espalda para acurrucarla más contra ella y se dejó llevar al mismo lugar donde su valiente y bonita comandante le estaría esperando.
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
¿Qué? ¿ha merecido la pena? ¿os ha gustado ese final de capítulo?
Snake finiquitado, ahora vamos a por Finley y Bellamy.
La comandante es nuestra gran Heda, rescate, persecución y finalmente, hacerle el amor a su doctora. Amamos a la comandante ❤❤❤❤
Y nuestra doctora....... ¿no es adorable cuidando de su comandante?😍😍😍
Como veis, las tramas empiezan a cerrarse, así que, no se cuantos capítulos puedan quedar, pero no serán muchos.
Besos power y abrazos power para todas y gracias por seguir por aquí. 😘😘😘😘😘