"Lo más sabio es el tiempo, porque esclarece todo"
La realización de la nueva Cumbre de los Kage fue rápida y eficiente. El tema principal fueron los hechos recientes que involucraban al Tsuchikage y Uzukage, y sus respectivas aldeas. Los kages aceptaron el hecho que Onoki era un criminal así como Sakura Haruno.
El Raikage y Mizukage solicitaron por la pena de muerte. El Kazekage ofreció tiempo encarcelado. El Hokage apoyaría al Uzukage como muestra de buena fe.
— Entonces, ¿qué deseas como sentencia para el Tsuchikage? — preguntó el Raikage con extraña calma
— Que viva sus días sin chakra hasta que el Shinigami venga a la tierra de los vivos para llevárselo — afirmó Misato — no tenemos derecho a quitarle la vida
— Él intentó quitar tu vida una vez — comentó la Mizukage levantando una fina ceja
— Lo sé, pero no continuaré con el círculo de odio — respondió Misato mirándola — y creo que merecemos tiempos de paz y no más guerras
— Apoyo a la Uzukage — asintió Kakashi
— ¿Qué hay de la kunoichi de Konoha? — preguntó el Raikage
— Es un shinobi bajo mi mando, yo me encargaré de su sentencia — asintió Kakashi
Todos aceptaron la propuesta y fue así que sellaron el destino de Onoki. El Raikage no estaba muy satisfecho así que instó a que Iwagakure fuera penalizada por dos meses en tratados comerciales.
Para apalear la posible caída económica de Iwagakure, Misato propuso una serie de tratados comerciales entre Uzushiogakure e Iwagakure como muestra de buena fe y amabilidad. Ambas aldeas serían beneficiadas.
El Kazekage sugirió firmar una alianza entre todas las aldeas para concebir la paz definitiva. No lo dudaron y cada Kage firmó la alianza y así sellaron una paz duradera. Una gran carga acababa de ser levantada.
Ese mismo día celebraron un gran banquete con todos los Kages presentes y sus consejeros y asesores. Fue un gran momento, compartieron historias de cada aldea y experiencias graciosas.
Al día siguiente, cada Kage partió rumbo a sus aldeas y rutinas. Todos se despidieron cordialmente y marcharon por caminos separados.
Cuando Misato llegó a Uzushio notó que Tsunade comandaba un grupo de personas que arreglaban partes de edificios de la aldea. Lo atribuyó seguramente a su batalla con Sakura.
— Lo siento, Misato — habló Tsunade con el rostro serio — debí haberlo visto venir
— No es tu culpa, Tsunade-obasan — negó Misato mientras entraban a la sala de reuniones
— Vi sus señales inquietantes, sentimientos que no eran sanos en ella — continuó Tsunade
— Quizás siempre fue así
El año pasó sin más inconvenientes. Misato se enfocó en mejorar la aldea en sus enfoques socioeconómicos, así como también sus políticas y calidad de vida de sus habitantes. Itachi y Sasuke aportaron mucho con sus contactos e incluso crearon el nuevo Compuesto Uchiha. Aquello les dio mucha paz, una tranquilidad que nunca antes habían sentido quizás porque no lo sabían o porque siempre estuvo allí asomando como una tristeza.
Incluso las demás aldeas prosperaron bastante, más de lo que en años previos habían prosperado. Misato realizó varios tratados comerciales y Uzushio tenía productos y alimentos de todas las aldeas. La población estaba muy contenta desde ninjas hasta civiles. Las misiones de los ninjas y samurai fueron ascendiendo cuando más viajeros y la misma población solicitaban los servicios de la aldea.
Un día, Misato recibió la visita de un sapo y le dio una carta. Al abrirla, Misato leyó las experiencias de Naruto ya que estaba siendo entrenado para convertirse en el futuro Hokage y también sería padre nuevamente. Hinata estaba embarazada esperando a su segundo hijo y sospechaba que sería una niña. Misato se alegró mucho por ellos y les escribió una larga carta contándole sobre Uzushio y sus felicitaciones por el pequeño bebé en camino.
El tiempo continuó transitando, Misato cumplía sus deberes como Uzukage y el resto del día pasó tiempo con su familia, especialmente con el pequeño Shisui que había crecido bastante. No hubo incidentes en la aldea lo cual se sentía extraño para Misato, no estaba acostumbrada a la paz pero se obligó a relajarse. Kakashi le informó que Sakura Haruno transcurría sus días en una prisión por dos años y luego viviría una vida como civil.
Llegó el día en que Misato, Itachi y Sasuke celebrarían su boda. Tuvieron muchos invitados provenientes de muchas aldeas y pueblos. Uzushio tuvo la mayor concurrencia en la historia. Todos los antiguos compañeros shinobi de Konoha estaban presente y Naruto estaba sumamente feliz en la celebración acompañado de su familia.
Misato estaba hermosa en su kimono blanco con detalles florales en dorado e incrustaciones brillosas diseñadas por un sastre de su aldea. Sasuke e Itachi también vestían un bello kimono claro. El pequeño Shisui era sostenido por Tsunade que lagrimeaba al ver a su sobrina tan hermosa en ese día tan especial.
El gran banquete fue maravilloso y recorrió toda la aldea para que cada habitante y visitante disfrutara de la celebración. Los casados saludaron a mucha gente, especialmente Misato que tenía el favor de los habitantes.
Fue una gran reunión que pasaron de maravillas. Los Kages se relajaron mucho y disfrutaron toda la celebración. La paz era un sentimiento hermoso.
La luna de miel que tomó por sorpresa a Misato había sido organizada por ahora sus esposos. Visitarían un hermoso pueblo del País del Fuego, disfrutarían de aguas termales, ocios y diversión. Haruo y Tadao le aseguraron a Misato que cuidarían de Uzushio hasta su regreso.
Al cabo de quince días, Misato volvió a la aldea junto a Itachi y Sasuke. Realmente habían pasado un gran tiempo en aquel hermoso pueblo. Disfrutaron más de lo que admitirían.
Haruo y Tadao eran grandes consejeros y tenían la plena confianza de Misato. Ellos se encargaban de los detalles que Misato a veces no tenía tiempo de ver. La kunoichi trabajaba incansablemente cada día.
Un día mientras Misato firmaba varios pergaminos sobre suministros medicinales provenientes de Kumo, su chakra fue repentinamente drenado causando que se sintiera extremadamente mal y por consiguiente que le provocara dolor en su cuerpo.
La hospitalizaron, fue atendida por muchos médicos y enfermeros muy preocupados por su salud. Le hicieron exámenes de sangre junto a jutsus de diagnóstico. Y vieron que el problema radicaba en que Misato estaba nuevamente embarazada y su hijo no nato consumía mucho chakra y era una situación letal para la madre, estaba en riesgo de un aborto espontáneo.
No le permitieron abandonar el hospital hasta solucionar el asunto del drenaje de chakra. Claramente su hijo por nacer tendría un chakra excepcional. Itachi y Sasuke estuvieron severamente preocupados acosando al personal médico hasta que Misato los regañó.
Ella misma ofreció una solución para continuar con sus deberes sin que el embarazo estuviera perjudicado. Utilizaría su Byakugou como suministro para el feto cuando éste haya consumido un 30% de su fuente de chakra. Los médicos estuvieron de acuerdo y Misato finalmente pudo alegrarse por la noticia de su nuevo embarazo.
Felizmente le escribió una carta a Naruto sobre lo ocurrido al principio pero luego finalizó muy alegre por la noticia y esperaba que Hinata estuviese bien.
El embarazo fue bastante difícil para Misato, soportó los peores síntomas y hubo días en que no podría levantarse de la cama. Las últimas semanas de gestación fueron particularmente complicadas por su chakra, especialmente que era una sensor y sentiría las sensaciones al triple. Estuvo monitoreada por médicos hasta el día del nacimiento.
El parto fue difícil ya que el bebé estaba en una posición no buena. Los médicos intentaron acomodar al bebé pero éste se negaba así que Misato intervino y movió al bebé con sus propias manos hasta que estuvo en correcta posición, le tomó tres horas.
Las siguientes horas fueron caóticas, el dolor de las contracciones torturó a Misato. Ella intentaba aguantar hasta que fuese el momento correcto. Después de muchas idas y vueltas, Misato dio a luz a su segundo hijo. Era un niño y lo nombraron Hideki.
Misato estaba sumamente feliz de tener a su hijo en brazos a pesar del cansancio. Sasuke lo abrazó cuando estuvo en sus brazos, Itachi observó el bonito cabello rojo del bebé y notó que era un hermoso bebé.
Más tiempo transcurrió. Los años de paz eran duraderos y estables para todas las Naciones Ninjas. Naruto y Hinata ya tenían dos hijos, y Kakashi se había retirado de su cargo como Hokage dando lugar al próximo Hokage llamado Naruto Uzumaki, Hachidaime Hokage.
Misato y Sasuke estuvieron presentes en el ascenso de Naruto como Hokage. Aquello sorprendió al ninja, no esperaba sus presencias. Misato sabía que en el fondo de su corazón él deseaba que estuvieran allí. El antiguo Equipo 7 viendo sus sueños cumplidos.
Los tres estuvieron en un bar Akimichi hasta entrada la madrugada recordando viejos tiempos y hablando del futuro. Los embargaba una gran felicidad de pasar ese tiempo juntos como lo habían estado en el pasado. Su amistad era imparable y eterna.
Aprovechando la visita, Misato visitó a todos sus antiguos compañeros shinobi y pasaron tiempo tomando té o jugando Shogi mientras se ponían al día. Naruto le presentó a su hijo Boruto y a la pequeña bebé Himawari. Misato los abrazó dulcemente, eran pequeñas versiones de Naruto y Hinata. Boruto se sonrojó furiosamente mientras Himawari la miraba con grandes ojos azules. Hinata se veía espléndida y la invitó a cenar a ella y Sasuke.
Misato acompañó a Hinata a realizar unas compras y ponerse al día sobre sus vidas. Hinata le relató anécdotas muy graciosas sobre Naruto y Boruto. De vez en cuando, Misato recibía saludos de ninjas y civiles siendo llamada Rokudaime Hokage. Aquello movilizó a su corazón. Konoha no la había olvidado. Su rostro seguía tallado en la Montaña Hokage.
Finalmente, Misato y Sasuke volvieron a Uzushio tranquilamente. La kunoichi estaba ansiosa por abrazar a sus hijos.
El tiempo continuó en su curso natural. Todos fueron avanzando en sus vidas, en edad y objetivos personales, en familia, en sanación post guerra y todo en lo que habitan en sus corazones y mente. Durante los años venideros, Misato tuvo gemelos, dos niños y los nombró Katashi y Katsuro. Katashi nació con un hermoso cabello negro y Katsuro con cabello rojo. Ambos eran idénticos a excepción del color de cabello y Misato agradeció internamente la diferencia.
Y cuando pensó que no tendría más hijos, tuvo otro bebé y esta vez era una niña y la nombró Saori. Era una hermosa bebé de cabello ébano y ojos oscuros.
Cuando Shisui ya tenía doce años, era reconocido por todos. Lo saludaban muy seguido, era el hijo de Misato Senju. Era un niño serio, muy contemplativo y pensativo. Pocas veces se enojaba y amaba a sus padres. Le incomodaba lo muy reconocido que era cuando no había hecho nada para ganarlo.
Sabía que su madre era la líder de la aldea y que había sido una kunoichi muy poderosa. Era su madre y con su carácter tan tranquilo y maternal a veces dudaba seriamente que haya sido tan poderosa. También pocas veces vio a los dragones volar sobre Uzushio, a ellos les agradaba transcurrir sus días en las pequeñas islas aledañas de Uzushio y de vez en cuando volaban sobre Uzushio trayendo grandes vientos y miradas no tan sorprendidas de ver dragones.
Nunca se acostumbraría a los dragones y sabía que su madre los había traído de vuelta a su hogar. También sabía que su madre solía ser una kunoichi de Konohagakure y discípula de los Legendarios Sannin.
Hoy había sido su graduación de la Academia. Su madre, Misato había dado un discurso de felicitaciones y motivador para los tiempos venideros. Ahora era oficialmente un ninja genin.
— ¡Felicitaciones, Shisui! — su madre lo felicitó con un gran abrazo
— Gracias, kaa-chan — correspondió su abrazo tan efusivo
— Estoy muy orgullosa de ti, ya eres un ninja — sonrió Misato
— Ese es mi chico — asintió Sasuke acariciando su cabeza junto a Itachi que sonreía a gusto
Los consejeros también lo felicitaron incluida gente desconocida para él. Misato asintió sonriendo cuando otras personas felicitaron y saludaron. Cuando llegaron a la fortaleza, Misato se dirigió a su oficina. Shisui la siguió.
— Shisui, ¿sucede algo? — preguntó Misato apartando unos archivos, la aldea había progresado mucho en tecnología
— Quiero ir a Konoha — sentenció Shisui con firmeza
— ¿Por qué? — preguntó Misato frunciendo el ceño
— Porque quiero adquirir habilidades fuera de la aldea y valerme por mí mismo — admitió el recién graduado
— Aquí también aprenderás a ser un ninja
— No podré valerme por mí mismo, soy el hijo de la Uzukage, descendiente del clan Uzumaki, Senju y Uchiha. Me reconocen demasiado cuando no he logrado nada por mí mismo — afirmó con un deje de frustración, su madre lo miró con el ceño fruncido
— Quieres demostrar tu valía, ¿crees que eso cambiará en Konoha? — cuestionó Misato
— Sí, allí no soy el heredero de Uzushio
— Deberás aprender por tu cuenta lo que significa ser reconocido — habló Misato luego de unos minutos de silencio — le avisaré a Naruto
— Gracias
Shisui se retiró de la oficina y caminó por la fortaleza hasta su hogar en el Compuesto Uchiha y luego a su habitación. Era bastante grande, tenía todo lo que podría desear. Se sintió un poco culpable pero no podía seguir así.
Misato observó por la ventana a la aldea. Contempló los sentimientos de su hijo Shisui. Claramente no le agradaba ser tan reconocido en Uzushio, era inevitable. Seguramente aprendería por su cuenta que su ascendencia lo perseguiría hasta donde vaya.
Aunque Sasuke estaba reacio a que su hijo fuera a Konoha, Itachi estuvo de acuerdo por el hecho de que nada podía detener a un shinobi frustrado. Sasuke le dijo que era un niño nada más e Itachi le recordó lo que ser reprimido podría ocasionar. Permitieron que Shisui fuera a Konoha por tres años y en su viaje de camino iría con un escuadrón para su protección. Y a escondidas lo acompañaría una serpiente y cuervos.
— Cuidate, Shisui. Te extrañaré, y no te olvides de mandarme noticias tuyas — dijo Misato para luego abrazarlo mientras sostenía a Saori que lloriqueaba por su hermano y también lo abrazaba
— Gracias, kaa-chan — asintió Shisui y luego abrazó a su hermana menor
— Ten cuidado, eres un Uchiha y debes mantener tu camino ninja — habló Sasuke colocando una mano en su hombro
— Te extrañaré, hijo. Y cuídate, quiero saber sobre ti y tus progresos — asintió Itachi
Shisui absorbió las palabras de sus padres y abrazó a su hermano Hideki que era un poco menor a él y tenía los ojos un poco acuosos. Y luego abrazó a los gemelos Katashi y Katsuro que se peleaban por quién abrazaría primero, pero los abrazó al mismo tiempo para diversión de sus padres.
La familia observó a Shisui marcharse acompañado de un escuadrón anbu hasta llegar al puerto, para luego cuando llegaran a tierra firme pudiesen continuar el viaje hasta Konoha. Misato observaba pensativa su partida. Estaba segura que estaría bien en el viaje y también en Konoha. Sasuke se retiró en un torbellino de hojas luego de despedirse de su familia y para completar una misión cercana. Itachi lo acompañó. Misato sospechaba que la "misión" estaría cerca de Shisui, en su camino a Konoha.
— Kaa-chan, tou-chan tengo hambre — dijo Katashi haciendo un puchero
Misato sonrió divertida. Los gemelos eran realmente incansables, vivían su tiempo al máximo y era muy difícil detenerlos cuando querían algo. La pequeña Saori abrazó a su madre mientras volvían a casa acompañados también de Hideki que antes de seguirlos dio una última mirada por dónde su hermano mayor Shisui se había marchado.
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¡Gracias a todos por leer! Espero que les haya gustado.
¡Saludos!