Mina:
Mis dedos titubean mientras sostengo la dichosa carta.
¡Debería romperla, tirarla y asegurarme de quemar sus restos!
Christofer no se merece más de mí por Imbécil. Pero el que sea un imbécil que me lastimó a conciencia no cambia el hecho de que soy una adolescente herida y ansiosa que está en un gran momento de mierda.
Pero ¡Dios! Aunque sé que lo que le hice se lo tiene bien ganado por idiota y que ya deberia de intentar seguir, y a pesar de que el poco orgullo que queda a penas vivo dentro de mi me pide que no lo haga, enderezo la hoja de papel y comienzo a leer la impecable letra apresurada e inconfundiblemente masculina del imbécil.
Preciosa mía:
El comienzo de la carta hace que me plantee si necesito seguir leyéndola ¡Será cara dura! ¿Ahora se acuerda de que soy su preciosa? ¿Qué diablos le pasa?
Sé que en estos momentos estarás enojada y confundida por lo que estoy haciendo. Probablemente realmente tengas ganas de destrozarme las pelotas
La rabia me recorre las venas viajando por mi cuerpo entero ¿me está tomando el pelo?
pero es hora de que sepas que todo lo que hago tiene un motivo muy valido para mí: Cuidarte, pequeña.
Hace unas semanas, el mismo día en el que te dejé en tu casa por última vez, mi abogado se contactó conmigo, lo sabes, la prensa estaba volviéndose loca con las dichosas fotografías, estaban sacando conclusiones, atando cabos y si no le ponía un alto a todo esto ellos no tardarían en encontrar la manera de descubrir quien eres.
Mi abogado me dio dos soluciones posibles al problema: dejarte o mentir.
Esa misma tarde comencé a preparar la farza de mi relación con Paula.
Me quedo en blanco.
Paula es mi amiga, lo sabes, y no está enterada de nada de esto. Aunque entiendo que estarás muy molesta, te agradecería que no intentras hacer que se entere, me gustaría hacerlo yo a su debido tiempo, de manera sutil, no quiero lastimarla.
Te extraño, y aunque te pedí que confiaras en mí sé que necesitas al fin saber porque estoy haciendo esto, pero también sé que entenderás que protegerte a tí, a tu imagen y mantenerte segura es muy importante para mi y que si te contaba antes lo que planeaba hacer sé que jamás me lo hubieses permitido por muy necesario que fuera.
Inevitablemente una de mis lágrimas se estrella sobre el papel.
Dios, Christofer.
Sólo espero que puedas entenderlo ahora que ya está hecho, necesito que me des sólo unos días más. Pronto acabará todo, cariño, confía en mí.
Te amo con locura, mi vida, te pido que confíes en que sé lo que hago.
PD:Y por favor, Estate quieta y alejate de ese maldito profesor, si? te extraño y te amo mi amor.
Christofer.
Mis manos tiemblan mientras cierro la carta y la dejo caer sobre la cama.
Mi mente confusa no logra procesar lo que acabo de leer y un horrible frio recorre toda mi espina como agua en un glaciar, dejándome pasmada, dura, desconcertada.
Oh, dios.
En principio me niego en rotundo a creer lo que Christofer dice en esa carta.
Me siento sobre mí cama y rememoro todos los nefastos sucesos viví por su culpa recientemente: Todas las veces que me hizo sentir una estúpida por creer que él en verdad podía haberse enamorado de mí; Todas las veces en las que me hizo sufrir por su indiferencia y me hizo llorar en el momento en que más lo necesité. Ese maldito beso en cámara, joder.
Pero de pronto mi mente comienza a divagar por las cosas que en realidad nunca tuvieron sentido: Los mensajes en los que me pedía que confiara en él y en los que se preocupaba por mi salud; El que halla ordenado que su chofer siga estando pendiente de mí sin ningún sentido; El terror en su rostro al verme tumbada en esa cama de hospital; El maldito hecho de que toda está pesadilla halla comenzado justo aquel día en que la prensa estuvo a un pelo de descubrirnos en la calle.. Pero sobre todo, lo que me hace creer cada palabra de esa carta es el recuerdo de la profunda tristeza y el espanto en el rostro de Christofer al verme besando a Damián.
Estaba desconcertado, furioso, devastado.
Uno no se aflige de tal manera tan perturbadora por alguien que simplemente es "Dulce pero demasiado Complicada como para seguir con ella" como dijo a cámara en aquel evento al que justamente decidió asistir el día después de que publicaran nuestras fotos.
Vi lágrimas derramar de sus ojos, uno no llora por simplemente ver a tu última conquista "Demasiado Complicada" Siguiendo con su vida.
De repente todas las frases que me dijo en el hospital inundan mi mente a borbotones: "Tienes que creerme" "todo tiene una explicación" "Jamás pensé que tú te creerias la farza" pero sobre todo sus "Te amo".
¿Porqué seguiría jurandome amor cuando simplemente podía quitarme de en medio de una vez cuando decidió que en realidad quería a Paula?
Oh mierda ¿Qué he hecho?
Con las manos aún temblorosas y la mente a mil tomo mi teléfono y, sin siquiera permitirme pensarlo, marco su número.
Un tono, dos tonos, tres tonos, cuatro tonos.
Con mis dedos vacilantes sobre la pantalla, cuelgo y vuelvo a llamar.
Y otra vez, y otra más..
¡Dios, atiende!
Vuelvo a llamar.
Ya no sé cuantos tonos van.
Pero Christofer no contesta.
Christofer:
Luego de que Anna terminara de confirmar que efectivamente Mina está con otro luego de que no ha querido ni escucharme y de demostrar que no me quiere, decido dejar mi casa e irme hacia mi oficina para bloquear mi mente de la única forma que sé para no correr a por ella como un cavernícola.
Dejo todo tirado en el suelo como lo dejé después de la llamada a Anna. No me llevo el móvil, su pantalla quedó hecha añicos luego de que lo tiré contra la pared. Mejor, no quiero saber nada de nadie, sólo quiero trabajar. Y es a lo que me dedico a hacer durante muchas horas hasta que Carly insiste en pasarme una llamada "Urgente"
-¿A qué te refieres con "urgente " Carly?- Le pregunto molesto.
He dicho que no quería hablar con nadie hoy. Mis secretarias están lo suficientemente calificadas para solucionar cualquier llamada de la empresa ¡Por algo les pago esas pequeñas fortunas al mes!
-Me refiero a que es una señorita y se está mostrando muy insistente en hablar con usted. Ha llamado varias veces.
Mi mente piensa que podría ser... Pero no, no puede ser ella, nunca he alcanzado a darle el número de teléfono de mí oficina.
Pero quizá..
Mi corazón palpita fuertemente.
-Pásame esa llamada, Carly.
-Enseguida, señor- corta.
Espero nervioso varios segundos hasta que me conectan con otra línea.
-Habla Hunter- Me aclaro la garganta, Intento que mi voz suene seria y calmada pero fallo estrepitósamente.
-Chris, cielo ¡al fin!
Suena una voz ronca y femenina. La ronca y femenina voz de Paula, y siento la decepción caerme encima como un cubo de agua glacial.
-Llevo toda la noche sin noticias tuyas y no me atiendes al teléfono ¿ha pasado algo?- Inquirere ella.
Largo un estruendoso suspiro esperando a que me libere un poco de esta tención, aunque no lo logro.
Pero de algo estoy seguro, luego de toda la mierda que me trajo la farza con Paula, estoy decidido a terminar con esto ya.
Si, me ayudó a mantener a Mina protegida y en el anonimato pero el precio que me costó fué el más caro e insoportable.
-Paula, tenemos que hablar- Exhalo.
-Si, tenemos que hablar, Hunter. No puedes simplemente cancelar nuestra cena, desaparecer de la nada e ignorarme toda la noche. He intentado llamarte a tu móvil pero no respondes, Chris ¿Ha pasado algo?
Santo cielo ¿Como debo de proseguir ahora? ¿Como se lo digo sin lastimarla?
-Paula, te agradezco que hallas estado ahí para mí durante todos estos dias- Le digo sinceramente y con tacto -Y lamento lo que voy a decirte y por ser tan capullo..
-¿Sabes que?- Me interrumpe ella -No hay problema. Ya reservaré otra mesa para mañana. Cariño, podemos..
¡Puta mierda! No me perdonaré nunca el haber utilizado a mi única amiga para cuidar de mi novia, pero no pude evitar tener mis prioridades bien claras al hacerlo.
Soy una escoria.
-No, Paula. No podemos- Suspiro -Lo siento pero no podemos salir más.
Silencio.
-Pau, estoy enamorado de otra mujer.
Silencio.
-Sabes que te aprecio y que siempre contarás con mi apoyo, pero no puedo seguir ilusionándote ni haciéndote daño si al estar contigo estoy pensando constantemente en otra persona.
No le cuento lo de mi plan para distraer a la prensa. Me siento una basura, pero contárselo sería demasiado cruel, a demás de que ha sido para nada.
Se hace puro silencio en la línea ¿Me habrá cortado?
-¿Paula?
-¿Es la mujer de las fotos, cierto? Esa de la que hablaban todos antes de que comenzáramos a salir.
-Sí - Contesto con sinceridad.
Y luego de mi contestación me corta.
Genial, Christofer. Lo has hecho todo genial.
-¡Puta mierda!- Maldigo en voz alta y me contento de tirar este teléfono también a la mierda ¡No quiero que nadie me moleste!
Durante horas trabajo y trabajo sin parar, haciendo mi deber de supervisar cada proyecto, estudiar cada contrato y de organizar varias reuniones.
Me enfocó tanto en no pensar que pierdo la noción del tiempo y es el saludo de Anna al entrar a trabajar el que me hace dar cuenta de que ya es un nuevo día y que me he pasado toda la noche trabajando.
Cristo, necesito un baño y dormir pero estoy tan ansioso y enojado conmigo mismo que sigo con lo mío a pesar del cansancio.
Sobre las ocho de la mañana Anna entra en mi oficina con cara de circunstancias.
-Señor Hunter, sólo quería disculparme por no estar en mi puesto ayer cuando me necesitó- Dice ella, levantándo la mirada para mirarme a los ojos con seguridad -prometo que no volverá a ocurrir.
-No se preocupe, Anna. No tiene por qué disculparse. La salud de su sobrina es más importante que unas cuantas horas de trabajo- Digo, tratando de que mi voz no vacile al pensar en ella.
-Oh, señor, si al menos hubiese estado mal herida tendría una buena excusa para no haber estado en mi lugar de trabajo pero la muy sinvergüenza de mi sobrina no estaba enferma. Ni mucho menos- Levanto la mirada - Cuando entré en esa habitación y la vi besándose con ese hombre.. por poco los mato a ambos.
Si me hubiese apuñalado el corazón no me habría dolido tanto.
- Así que.. ¿Estaba besándose con un hombre en el hospital?- Pregunto, por puro masoquismo, intentando que mi voz suene como quien no quiere la cosa -Interesante velada la suya.
-Digamelo a mí. Y no sólo eso, sospecho que no es la primera vez que se ve con él, ya la he piyado antes saliendo del coche de un extraño.. puede que sea el mismo que la tenía sujeta contra la pared de ese hospital mientras se basaban- Divaga arrugando la nariz con disgusto -Fué asqueroso.
Cierro los ojos unos segundos y trato de acompazar mi respiración que comienza a alterarse.
Anna, al notar mi incomodidad, se interrumpe.
-Dios, Señor Hunter. Lamento haberle vomitado toda esa información innecesaria nuevamente. Quizá necesite buscarme un psiquiatra mientras esa niña dure en mi casa.
-No sé preocupe, Anna. Los jóvenes pueden resultar dificiles parece, es entendible- Digo ya más calmado- Puede seguir con su trabajo.
-Gracias señor- Dice, antes de salir de mí oficina para ocupar su lugar.
Ella cierra la puerta al salir y yo vuelvo tragarme otro nudo de dolor.
¿Cómo terminé metido en esta mierda? ¿Cómo se supone que tengo que seguir ahora? ¿Porqué fui tan rematadamente estúpido?
Mina:
No me contesta. El maldito no me contesta.
¿Es que estará demasiado enfadado por que cree que en verdad estoy con Damián?
Duh! Pregunta idiota ¡Por supuesto que lo está! Si piensa que mientras él estaba intentando protegerme, maquinando farzas e intentando manipular a los medios yo estaba ligándome a mi maestro.
Me paso horas de la noche y el dia entero intentando llamarlo pero no consigo que me conteste al móvil y jamás le pedí el número de su casa u oficina.
¿Debería presentarme en su trabajo? Claro que podría hacerlo pero ¿Como le explicaría a Anna que estoy allí para hablar con su jefazo y no para seguir con nuestra conversación pendiente? Ella trabaja justo en su oficina, me vería..
¿Y si me presento en su casa? Él vive en un barrio privado así que ¿Me dejarían pasar? Pff, claro que no.
De tantas vueltas que doy en mí cuarto comiendo ansias y nerviosismo pero pero la vez con unas ganas demoledoras de ver a Christofer, comienzo a marearme, así que decido sentarme un momento y acordar en la mejor manera de contactarme con él y decirle QUE LE CREO.
Claro que le creo! Aunque mi cabeza dura y mi corazón lastimado me hicieron querer alejarme y protegerme de él y de todo lo que su ridículo plan me hicieron sufrir, yo le creo; Porque ahora veo cosas que por culpa de mi aniñado sentimiento de abandono no veía..
¿Como no iba a creerle estando él siempre tan pendiente de mí y dejándome un ojo protector como siempre lo hizo, a pesar de lo que mostraba en cámaras? ¿ Cómo no le creería si siempre me hacía saber que se preocupaba y me cuidaba a su manera aún sin poder revelarme nada? ¿Como iba yo a obviar su atormentadora preocupacion al verme en el hospital o el dolor crudo y su expresión de abandono cuando le hice creer lo de Damián y le pedí que me dejara en paz?
Todo lo que me pareció extraño en su momento encajó perfectamente como las piezas de un rompecabezas..
Christofer me ama, nunca dejó de hacerlo. Sólo quiero verlo y saltarle encima de la emoción. Mi estúpido, imbécil grandulón.
El mareo que siento se intensifica y me veo obligada a sentarme en la cama para evitar caerme, lo que me recuerda que mañana debo de ir a buscar los resultados de mi análisis al hospital pero no me preocupa tanto como debería. Ese miedo se ve eclipsado por algo mucho más fuerte: Felicidad.
Una lágrima solitaria de dicha hace su camino en mí mejilla, pero a diferencia de las otras, esta no me quema, esta es de alegría.
Ese hombre que nunca dejó de quererme, ese que siempre siguió cuidándome y el imbécil que creyó mis mentiras y que ahora sufre por mí, me ama. Nunca dejó de hacerlo.
Me ama lo suficiente como para obrar ese ridículo plan para protegerme, y me ama lo suficiente como para no dejarme incluso cuando él podía perderlo todo y arriesgarse a meterse en serios problemas solo para estar conmigo.
Mi hombre me ama tanto como yo nunca dejé de amarlo a él y, a pesar de todo lo que hice, sé que sigue amandome de igual manera.
Si tan sólo me contestara, si pudiera verlo.. Podría aclarar todo y demostrarle que aunque me comporté como una niña despechada y dolida, lo amo y sigo siendo suya igual que él sigue siendo mío. Mi hombre fuerte, dulce, amoroso aunque algo posesivo y demandante. Mi hombretón.
Si tan sólo contestara..
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Hola de nuevo!
Antes que nada gracias por sus mensajes! Son muy lindos.
No me imaginé que habían tantas personas esperando aún la continuación de la novela y debo de decir que me siento algo culpable😅
Besos a México, Colombia, Ecuador, Argentina( país de la grandísima marti benza) y de donde sea que me leas!
Sus ánimos me llegan y aquí les traigo otro capítulo que espero que hallan disfrutado de leer tanto como yo disfruté escribiéndolo! Trataré de subir otro pronto.
Mientras tanto VOTA Y COMENTA si te gustó este capítulo y muchas gracias por leer❤️