POV Lisa
Me quedé en mi cuarto hasta que Bambam llegó y bajé con la intención de hablar con él. Aún seguía molesta, pero no podía pasarme la vida entera molesta con él.
Los días que me pase con Joy me sirvieron de mucho. Al comienzo, no me sentí segura de si debería o no decirle el por qué de mi molestia con Bambam, pero luego de una dulce charla de su parte, no pude siquiera dudarlo.
Sé lo conté todo.
Incluso mi reciente miedo a permanecer cerca de Jennie. Eso era lo que más que alteraba. La forma en que intentaba mantenerme lejos de ella pero inevitablemente regresaba a su lado, era algo que comenzaba a inquietarme.
Joy le puso nombre a eso. Y sin importar cuánto deseara olvidarlo, cada día que la veía a lo lejos, era más y más evidente.
- ¿Ya lo aceptaste?
- No hay nada que aceptar
- Oh, por favor. Tu eres una buena amiga Lisa, pero a ninguna de nosotras nos darías explicaciones ¿Por qué te cuesta tanto verlo?
- Ustedes no viven conmigo, es diferente
- No, no lo es. Lo diferente es su relación. Aceptalo, te..
- Ni siquiera te atrevas a decirlo.
Bambam estaba en la cocina cuando entre, apenas escuchó los pasos volteó con una sonrisa que se fue transformando poco a poco en una mueca tímida. Nos quedamos en silencio, yo no sabía exactamente de que manera comenzar, pero descarte la primera idea de decirle "Bambam, te perdono por ser un cretino e inmiscuirte en mis asuntos personales."
- Hola..- Saludó con timidez.- Volviste..
Intenté sonreír pero sólo conseguir resoplar con cansancio. Tenía que terminar con esto.- ¿Creiste que me iría para siempre?.- Preguntó irónicamente y lo veo bajar su cabeza avergonzado.- Ni siquiera puedes cocinar un par de fideos, vivirias a pizza sin mi.- Él asiente dándome la razón y me sonríe.
Antes de que pueda abrazarme, hago unos pasos hacía atrás y le dejo el claro todo lo que he estado pensando desde hace días. Él asiente fervientemente y me pide perdón ciento catorce veces mientras me abraza.
Jennie baja unos minutos después, cuando ya estamos comenzando a hacer la cena. Toma asiento en una de las esquinas de la mesa, participa animadamente de nuestra conversación con Bambam sobre lo poco original que son algunos de los disfraces que llevarán nuestros conocidos y amigos.
Cada tanto, volteó disimuladamente sobre mi hombro para ver en su dirección, más de una vez nuestros ojos se conectan, seguidos de algunas sonrisas.
Es sólo por la conversacion. Es sólo por la conversacion.
Cenamos en el sillón pequeño que tanto eche de menos durante mis días en casa de Joy. Bambam está sentado a la derecha, Jennie en el medio y yo del lado restante. Mi codo choca con el suyo en reiteradas oportunidades por el poco espacio que tenemos.
Le he pedido disculpas más veces de las que he masticado mi comida. Ella sólo se limita a sonreirme por lo bajo.
"¿Ya lo aceptaste?"
"No hay nada que aceptar."
No lo hay.
Vuelvo a recostarme en mi cama, mi pequeña pero cómoda cama. Mis ojos se clavan en la pared que está justo frente a mi, allí descansa el cuadro de Jennie. El que pedí que me regalará, justo antes de que todo se fuera a la mierda.
Me muevo entre mis sábanas, sin apartar la mirada de ese lugar. Me siento en casa, estoy en casa. Pero es una sensación distinta a la que antes me llenaba. Algo cambio, y me da miedo aceptar que las palabras de Joy continúen regresando a mi.
- No lo hay..- Murmuró antes de caer dormida.
El jueves por la mañana voy a clases normalmente, nos juntamos con Joy y las chicas para almorzar. Luego de mucho tiempo, volvemos a compartir todas como el enorme grupo que eramos.
Nayeon se queda todo el tiempo abrazada a mi, recordandome lo mucho que desea patearme el trasero por mi distanciamiento. A veces miro a Joy, quien está sentada frente a mi y cada tanto, voltea sus ojos.
- No estés celosa, aún eres mi preferida.- Digo con un tono coqueto y bromista.
Ella me guiña el ojo y lo siguiente que escuchamos es un golpe seco. Todos los ojos se fijan en Jennie, quien dejo caer su móvil en la mesa. Su rostro está teñido de un rosado encantador que me roba el aliento.
- Lo siento..- Ríe, encogiendose de hombros.
- Jane, sé más cuidadosa con lo que haces.- Le dice Jisoo y veo que Jennie la fulmina con la mirada.
El incidente queda olvidado cuando Sana comienza a bromear con Tyuzu y de pronto toda nuestra atención está volcada en la pequeña escena que nuestra amiga japonesa le hace a la más alta.
Todavía nos quedaban veinte minutos antes de la siguiente clase, cuando veo a Bambam acercarse por detrás de Jennie y depositar un beso en su cuello. Ella esconde su cuello y se ríe avergonzada, yo cambio la dirección de mis ojos y como una salida algo estúpida, me pongo de pie.
- ¿A dónde vas?.- Pregunta Nayeon. La vista de casi todos se posan en mi.
Inventa algo, maldición.
- Olvidé mi diccionario.- Digo con una sonrisa boba.- Nos vemos en clases, iré a buscarlo.- Me despido con la mano mientras me alejo y la mirada divertida de Joy no pasa desapercibida frente a mis ojos.
El resto del día transcurre con normalidad hasta que llegó a casa. Aún no hay nadie, así que aprovechó el día para darme un baño y relajarme. Dua Lipa resuena entre las cuatro paredes hasta que terminó y paró la música para salir.
Mientras voy de regreso a mi cuarto, empujó con mi pie la puerta a medio cerrar y me quedo congelada. Voltea rápidamente asustada, y se queda inmóvil observandome, aún estoy en mi toalla.
Sus mejillas se tornan rosadas al percatarse de mi estado de desnudez.
- P-Perdón.. Sólo quería tomarle una foto al cua.. La puerta estaba abierta lo juro.- Habla con rápidez y no puedo evitar sonreír al notar su nerviosismo.
Ella se queda temblorosa en su lugar mientras yo entro y camino directo hacía mi closet para buscar algo de ropa. Busco entre mis prendas, algo liviano para irme a dormir. No sé si espera una respuesta o si en realidad está demasiado avergonzada como para moverse.
Sólo me limito a tranquilizarla con un "No hay problema." Y es más que suficiente para que ella se retire. Los siguientes días, saboreo con gusto su reacción, pero me convenzo a mi misma, de que fue sólo por mi estado de desnudez.
Estás jugando con fuego Manoban.
La noche del tan ansiado sábado finalmente llega, tal como le dije a Jennie, quiero que mi disfraz sea una sorpresa para casi todo el mundo. Ese día voy a cambiarme en casa de Joy, para evitar que alguien más me vea.
- Manoban, esto no es justo.- Se queja Joy cuando terminó de alistarme.- Se supone que tengo que olvidarte y tu apareces vestida así, toda sexy.- Gruñe y no logró contener mis carcajadas.
- Idiota.
Durante el camino hacía el campus, Joy me habla animadamente sobre su increíble disfraz de María Antonieta. Escucho atentamente sus palabras, usando nuestra charla como una especie de bálsamo para mi nerviosismo.
Cuando estamos estacionando, diviso la cantidad exorbitante que hay de alumnos con disfraz. Algunos son realmente ingeniosos, otros son pésimos y puedo reconocer perfectamente a quien lo usa.
Me disculpó con Joy antes de que nos encontremos con las demás, y me pierdo entre la multitud con la excusa de buscar a una amiga.
Patrañas.
Me toma más de lo normal llegar hacía el otro lado del campus, por la cantidad de personas que hay pero finalmente llegó. Tal como creí, ellos están en ese lugar de siempre.
Bambam está vestido con traje bastante comun del jocker. Nada fuera de lo normal. He visto a varios con el mismo atuendo.Ella, en cambio, se disfrazó de lo que en estos momentos es exactamente para mi.
Con un vestigo rojo, ajustado en las curvas de su cuerpo, con unos guantes rojos casi transparentes en cada mano, sostiene un tridente. En su cabeza, descansa una tiara con un par de cuernos. Este podría no ser el mejor disfraz del mundo.
Pero si podía competir como el más sexy y seguramente ganar.
Jennie disfrazada de diablo, me hacía sentir en el maldito infierno en estos momentos.
No hay nada. No hay nada. No hay nada.
Intentaba convencerme mientras la veía llevar una botella de cerveza hacía su boca. Perdiendome en el suave subir y bajar de su garganta mientras el líquido pasa, no me percato que ella había volteado.
Entonces, me quedo inmóvil cuando hago contacto con sus ojos por lo que parece ser una maldita eternidad. Siento un sudor creciente en mi cuello, que sólo empeora cuando una sonrisa de lado se asoma en su rostro.
"¿Ya lo aceptaste?"
Mierda..
_________________________________________
Lamento no haber actualizado antes.
Meper d0nan?
Espero que les haya gustado el capítulo. ¿De qué creen que se disfrazó Lisa?
No se olviden de votar y comentar para ayudar a la historia. Los tkm, cuidense, tomen mucha awa y mantengan la distancia ahre
Nos vemos en la próxima actualización!!
Love G.