Yibo miraba a Yubin analizando su rostro... cada gesto... en realidad le molestaba que se hubiera encontrado ahí con Zhan... su cabeza trabajaba a mil por hora y se puso a pensar rápidamente qué habría sucedido de no haber regresado a tiempo. Las manos le sudaban y ese coraje no desaparecía. Miró de reojo a su esposo... le sorprendió verlo tranquilo a su lado, ni siquiera se había retirado cuando lo tomó por la cintura, de pronto sus miradas se encontraron y unos ojos completamente tiernos lo tranquilizaron un poco.
Zhan.- Regresaste- suspiró.
Yibo asintió.- Te escaparías conmigo?
Zhan empezó a reírse.- Espero no sea una broma... tu viaje de negocios...
Yibo.- No es una broma... ven conmigo si?
Zhan se sonrojó, sentía la cara arder de la emoción.- Esta bien... solo hay que avisar a Yuchen...
Yibo.- Eso ya lo hice... no te preocupes...
Yubin solo los observaba... verlos de esa forma le molestaba pero no podía hacer nada al respecto, así que solo se limitó a mirar hacia otro lado.
Yibo.- Si te digo que te adelantes a la siguiente sala, lo harías?
Zhan.- Si claro... solo déjame despedirme...
Yubin volteó a verlo.- No te preocupes Zhan... debo abordar ya... no falta mucho para mi salida...
Zhan.- De cualquier forma... me alegra verte bien... mucha suerte a donde vayas...
Al decir eso extendió la mano para despedirse. Yubin se la estrechó por mera cortesía. Después de eso, tomó su maleta y fue a donde le había indicado su esposo. Yibo lo observaba caminar y sabía que de frente estaría sonriendo.
Yibo.- Estás comprobando cómo está él?
Yubin.- No tengo por qué explicarte el motivo por el que me encuentro aquí pero lo haré de todas formas... para que no pienses mal...
Yibo.- No... yo no pienso mal ante lo que es evidente...
Yubin puso los ojos en blanco.- Voy de viaje al interior del país... solo fue una coincidencia el encontrarlo y respecto a lo de tu boda con Zhan es una verdadera sorpresa... así que... espero valores a quien tienes al lado...
Yibo sonrió sarcásticamente.- Mírate... ahora hasta quieres aconsejarme...
Yubin.- No... es más una advertencia...
Yibo soltó una carcajada.- Tu no tienes por qué advertirme... Zhan me eligió a mi o qué... necesitas alguna pista sobre eso?
Yubin.- Me queda claro que él te eligió a ti... pero de ti depende que él quiera permanecer a tu lado.
Al dar esa respuesta, tomó su maleta y empezó a caminar para entregar su pase de abordar. Yibo lo observaba de espaldas.
-El siempre estará conmigo... te guste o no.- dijo en voz alta.
Yubin volteó lentamente a verlo.- Si tú lo dices...-respondió con sarcasmo.
Yibo avanzó de prisa hasta donde se encontraba.- Eres un arrogante!!... Tuviste algo que ver con él verdad?
Yubin lo miró lleno de rabia.- No sabes cómo me gustaría decirte que si... me encantaría decirte que fuimos novios alguna vez... me encantaría que sintieras lo que yo sentí cuando anunciaste tu compromiso con él...
Yibo.- Tuviste algo con él si o no?- gritó.
Yubin lo miró fijamente... después de unos segundos respondió firmemente.- No...
-Insistí muchas veces... pero Zhan es fiel a lo que le dice su corazón... jamás tuve oportunidad, el siempre me ha visto como un amigo, nada más...
Yibo se quedó pasmado... completamente en silencio. Yubin continuó.
-No sé que demonios te sucedió... te conozco poco... pero estás lleno de rencor y aunque no me lo pediste, te daré un consejo... mejor olvídate de él si no quieres destruir su vida... déjalo ir...
Yibo.- Ni lo sueñes... Zhan es mi esposo y siempre lo será...
Salió de ahí lo más rápido que pudo... en ese momento solo quería encontrar a Zhan. Llegó a la siguiente sala de la aerolínea y lo buscó desesperadamente. De pronto, lo vio salir de una pequeña tienda de conveniencia con un par de botellas con agua y algunas frituras. Yibo lo alcanzó y lo abrazó tan fuerte como pudo.
Zhan.- Que tienes amor?... Sucedió algo?
Yibo no podía soltarlo... quería quedarse así para siempre.- Shhh... no me digas nada... no puedo dejarte solo dos segundos porque cualquier lobo se te acerca...
Zhan le devolvió el abrazo sin entender nada... se quedó con él hasta que su estómago empezó a hacer un poco de ruido. Se separó sonrojado.- Perdón... creo que no desayuné bien...
Yibo suspiró mirándolo.- Fue mi culpa... me porté como un idiota en la mañana... quieres ir a buscar algo para almorzar?... Esto no servirá de mucho...
Zhan miró la bolsa.- No quiero que te entretengas... no me gustaría retrasarte para tu viaje... yo puedo irme después a la hacienda...
Yibo.- Oye... aceptaste venir conmigo... o es que ya no quieres ir?
Zhan.- Claro que quiero ir...
Yibo.- Entonces?... Solo déjate consentir... si?
Lo abrazó de nuevo... y se quedaron así un rato en lo que decidían en qué restaurante pasarían el tiempo. Mientras les asignaban una mesa en un pequeño restaurante, el secretario se encontraba haciendo las gestiones necesarias para el cambio de boletos... pronto llegarían a una de las playas mas hermosas del Caribe. En cuanto había terminado, le envío un mensaje a Yibo informando el horario del vuelo, el hotel donde se hospedarían y de nueva cuenta le envió el programa de la convención minera así como de los primeros eventos de bienvenida. Yibo sonrió.
Zhan.- Ahora que pasa amor?
Yibo.- Ya está todo listo... salimos en dos horas... así que podemos comer tranquilamente...
Zhan.- No vas a decirme a dónde me llevas?
Yibo.- Solo puedo decirte una cosa... con todo lo de la boda confundí algunos eventos de mi agenda... a donde vamos tengo que participar en una convención... hay eventos previos y hasta el siguiente fin de semana es la reunión con los mineros más importantes... después tengo la junta con el inversionista...-mintió.
Zhan.- Amor... de verdad... no quiero interferir con tu agenda... yo puedo...
Yibo.- No interfieres en nada... solo puedo decirte que es en una playa muy hermosa y quiero que vayas conmigo... además quiero que el gremio te conozca...
Zhan sonrió.- Vas a presentarme en sociedad o algo así?
Yibo empezó a reírse.- Algo así... más o menos...
Esas dos horas las pasaron revisando algunas de las fotos que sus amigos habían enviado... varias eran de la ceremonia religiosa y otras de la recepción... después de la boda civil. Yibo miraba a Zhan y se alegró en secreto de haber regresado por él. Esto no debería haber pasado- suspiró.
Estuvieron a tiempo para el checklist y abordaron el avión, una vez que despegó, platicaron de mil cosas... reclinaron un poco los asientos y Zhan se recargó sobre el pecho de Yibo... poco a poco, el latido de su corazón lo arrulló haciendo que cayera en un profundo sueño. Su esposo lo observaba con mucha tranquilidad... aun le parecía irreal... estaban juntos por fin- debí ser mas fuerte... pero no puedo... quiero estar con él... lo quiero solo a él-pensó. Con la punta de los dedos siguió suavemente el contorno de su rostro y de la nada sintió la necesidad de besarlo pero se contuvo, solo lo observó dormir hasta que sus propios ojos se cerraron.
Llegaron sin contratiempos a su destino... una persona ya los esperaba con un cartel donde indicaba sus nombres, había sido contratada por el secretario para que los llevara al hotel. La gente del lugar era sumamente amable y cordial... una de las recepcionistas los recibió con una gran sonrisa mientras que el botones ya acomodaba las maletas en un carrito. Al cabo de unos minutos, la chica le entregó las llaves a Yibo.
-Todo está listo señor Wang... la ultima villa es la de ustedes... esperamos que la decoración sea de su agrado...
Yibo.- Mil gracias... se puede pedir algo extra a la habitación?
Recepcionista.- Si claro... a la hora que gusten... el directorio está junto al teléfono...
Yibo.- Perfecto... una pregunta... los eventos de la convención cuando empiezan?... Tengo entendido que inician el martes...
Recepcionista.- Así es... ese día solo hay un desayuno a las 10 am en el salón principal del hotel...
Yibo.- Es usted muy amable...
Recepcionista.- Antes de que se me olvide... además de la convención minera, estamos de festivales este mes... si ustedes gustan... su villa da a la playa y pueden salir abriendo la reja con la misma tarjeta que la de la puerta de la habitación...
-Caminando por la orilla a una cierta distancia de aquí podrán ver el escenario del festival de jazz, hay antojitos y cerveza artesanal, les dejo el programa y un folleto para otras actividades... si se animan.
Zhan los recibió, de inmediato empezó a revisarlos. Yibo agradeció y empezaron a caminar detrás del botones. En el lobby del hotel solo se detuvieron para comprar un par de trajes de baño extra y sandalias cómodas. Al entrar a la habitación la decoración era maravillosa... velas... pétalos de rosas... un arreglo floral con las rosas del color que más le gustan a Zhan.
El botones dejó las maletas en el clóset y les mostró la terraza... era una maravilla... una duela de madera fina en el piso rodeada por enredaderas, vegetación así como una pequeña alberca en medio del lugar con un jacuzzi... a un lado había un camastro con un dosel adornado igual que la habitación... y más allá, la pequeña puerta de madera que daba a la playa.
Yibo.- Quieres quedarte aquí o te gustaría ir a dar una vuelta por la playa?
Zhan.- La verdad me encantaría pasear un poco contigo... gracias por la sorpresa...
Yibo.- Por qué esa cara?... Vamos a cambiarnos y salimos, te parece bien?
Zhan asintió y fue a buscar sus maletas. Después de unos minutos, Yibo lo esperaba en la terraza... salió cerrando el ventanal detrás de él mientras su esposo abría la reja. Se tomaron de las manos y empezaron a caminar por la playa... los colores a esa hora de la tarde eran maravillosos, el mar se veía imponente y cambiaba de color conforme el agua se acercaba a la orilla donde el color era de un verde esmeralda... la arena era fina, clara. Conforme se acercaron a donde les había dicho la recepcionista encontraron el concierto del día.
En los alrededores había muchas familias caminando tranquilamente... parejas que como ellos andaban de luna de miel o simplemente iban de paseo. De pronto uno de los grupos invitados comenzaron a tocar una melodía conocida... Yibo tomó a Zhan de la mano y empezaron a bailar junto con otras personas... poco a poco los coqueteos sutiles entre ellos terminaron en besos ardientes que les hacían olvidar todo a su alrededor.
Después de un rato, dejaron el lugar cerca del escenario y caminaron por los diferentes puestos de comida y uno que otro de artesanías... justo cuando pasaron cerca de una gitana, una figurilla cayó de la mesa y rodó hasta los pies de Zhan. De inmediato se agachó para recogerla.
La gitana le sonrió.- Me parece que ya encontró a sus dueños...
Zhan.- Disculpe?
Gitana.- Cuando los aluxes encuentran a sus dueños hacen de todo por irse con ellos...
Zhan.- Lo siento... es muy linda la figurilla del enano pero me temo que debo dejarla...
La gitana soltó una carcajada.- Esta bien, como gustes... te agradaría una lectura rápida del tarot?... imagino que vienes de luna de miel con tu esposo...
Zhan sintió cuando Yibo lo tomaba de la cintura.- Así es... acabamos de casarnos...
Gitana.- Te gustaría saber cuál es su futuro?
Yibo se puso nervioso pero algo lo mantenía ahí...
Gitana.- Anímate, la lectura será gratis- dijo extendiendo las cartas rápidamente en una curva- elige tres...
Zhan miró a Yibo y luego con una sonrisa divertida eligió las tres cartas. Las colocó delante de la curva que hacia el resto del juego. La gitana rápidamente junto las cartas y las dejó en un solo mazo.-Bien... empecemos, voltea la primera a tu derecha.-dijo.
Zhan la obedeció... cuando los tres miraron la carta, la gitana sonrió.- Es la rueda de la fortuna al derecho... significa que ustedes dos estaban destinados a encontrarse... voltea la que está en medio- ordenó.
La siguiente carta era la de los amantes igualmente al derecho.
Gitana.- Ustedes están destinados a estar juntos por un amor verdadero... nada mal... quieres saber qué hay con la tercera?
Zhan asintió pero Yibo lo detuvo.- Si esa es la del futuro... no quiero saberlo...
La gitana soltó una carcajada.- No hay nada de malo en el futuro jovencito... acaso no sabías que cada decisión que tomamos en el presente lo va modificando?... Lo que planeamos no siempre sale como se espera...
Yibo.- De cualquier forma... no quiero saberlo...
Zhan.- Amor... tranquilo... qué cosa podría salir mal?
Yibo lo jaló y se lo llevó casi a rastras.- Anda... vamos... debemos buscar algo para cenar... debe haber cosas deliciosas por aquí...
Zhan.- Ok... ok... esta bien... si sabes que solo es un juego verdad?
La gitana los observó alejarse, de pronto un sonido la sobresaltó... la misma figurilla que Zhan había devuelto se encontraba en el piso. Se levantó con tranquilidad y la recogió... por mera curiosidad, se le ocurrió voltear la última carta. Al ver lo que había le sorprendió sobre todo, por el aluxe que los había elegido.
Un par de horas después, regresaron caminando por la playa al hotel... el paseo había sido maravilloso, todos esos momentos juntos los estaban marcando ahora que ya empezaban su vida juntos. Del breve mal entendido en el departamento y el momento incómodo en el aeropuerto de la ciudad ya no había nada... ambos estaban disfrutando su primer día de casados en un lugar increíble. Solo fue cuestión de atravesar la reja para que Yibo cargara a Zhan hasta llevarlo a la alberca que tenían en la terraza.
Antes de arrojarse al agua, se deshicieron de la ropa que llevaban quedando únicamente en ropa interior. Ese momento fue tan refrescante como sensual... las risas y los juegos no se hicieron esperar... tampoco los coqueteos que se lanzaban el uno al otro. Sin esperarlo, Zhan sintió que unos suaves labios se posaban sobre los suyos justo cuando salía a la superficie... después de un largo rato entre besos y caricias permanecieron abrazados muy apretados el uno contra el otro... el sexy contacto bajo el agua encendió la llama...
Yibo lo devoró por completo... gruñía mientras absorbía sus labios cambiando varias veces de posición... deslizaba su lengua dentro de su boca haciendo que la intensidad de sus besos aumentara al mismo tiempo en que aceleraba su respiración... sin querer, Zhan soltó suaves gemidos de placer cuando fue tocado sin piedad.- Q-qué haces?- preguntó en medio de un suspiro.
Yibo.-Lo que hacemos todas las noches.- jadeó.
Zhan.- N-no s-sería... me-jor... e-en trar...
Yibo.- Cuándo te volviste tan tímido...
En ese momento, notó como se estremecía entre sus brazos... con gran habilidad lo llevó al extremo donde se encontraba el jacuzzi... en segundos ya se encontraban completamente desnudos bajo el agua y Zhan ya se había acomodado perfectamente sobre su regazo... frotándose lentamente frente a él. Yibo abrió los ojos para observar esa imagen... Zhan estaba completamente rendido ante él... adoraba verlo al hacerle el amor y esa noche no sería la excepción.
Lo silenció con un beso duro, ardiente, decidido, mordisqueando su labio inferior, debajo del agua había atrapado su miembro... y los movimientos de su mano hicieron que Zhan respirara agitadamente... cada movimiento, cada beso y cada abrazo le hicieron escuchar un leve gemido... suave y desesperado mientras le hundía los dedos en las caderas encendiendo su propio deseo. Se encontraban apretados en un fuerte abrazo completamente empapados... los envolvía una irresistible pasión mientras se besaban tierna y apasionadamente.
Casi al límite... Yibo acarició su interior... Zhan estaba a punto de perder la cabeza... en ese instante lo rodeó con sus piernas permitiendo que entrara en él... Yibo se removió con furia bajo el agua; sin embargo, Zhan lo estaba disfrutando... tanto que con sus piernas y sus brazos cerró cualquier espacio entre ellos... no pudo evitar temblar ni detener a su cuerpo de curvarse ligeramente ante tal placer.
Yibo.- De quién eres?- preguntó desesperado.
Zhan respondió entre jadeos.- Soy solo tuyo...
Yibo preguntó otra vez.- De quién eres?
Zhan lo miró a los ojos y respondió.- Soy tuyo...
Una fuerte embestida lo hizo gemir... se entregó por completo a esas manos y al sentir cómo esos labios recorrían cada centímetro de su piel, perdió cualquier rastro de pudor.
Yibo.-Si sigues moviéndote de esa forma... no... no re-respondo- susurró en su oído con cierta malicia.
Zhan.- No pienso detenerme-suspiró.
Yibo apretó los dientes y cerró los ojos dejándose llevar ante el inmenso placer... por un momento sintió como le abandonaban las fuerzas... Zhan se recargó sobre su hombro que sobresalía del agua emitiendo pequeños gemidos... se sentía completamente satisfecho y aturdido. Sin darse cuenta, se encontraban atados por un hilo invisible... no solo era pasión o deseo... era amor. Yibo se dedicó a repartir besos por todo el cuello de su esposo... hasta que un suave susurró lo hizo reaccionar.
Zhan.- Házmelo de nuevo...
Yibo sonrió con malicia.- Y ahora quien es el insaciable- dijo en tono de pregunta.
Sin importar que el agua chorreara en grandes torrentes, salieron del jacuzzi... Zhan se recostó provocativamente sobre el camastro mientras que Yibo se ocupó de desatar el dosel. Con una mirada llena de deseo se recostó sobre él y besó sus labios repetidamente... después, comenzó a repartir besos desde su pecho... bajó lentamente a sus rosados botones... jugueteó con su ombligo para después acariciar su parte más sensible y lo malcrió hasta que ambos perdieron el control. Cuando quedaron exhaustos, Yibo se entretuvo besando su espalda mientras Zhan estaba recostado boca abajo... después de eso, giró y lo miró con profunda ternura, se acurrucó junto a su esposo y descansó su cabeza en el hueco de su hombro... Yibo se quedó dormido arrullado por la respiración de Zhan en su cuello.
Las dos semanas que pasaron en la playa fueron una verdadera luna de miel... los días que Zhan pudo acompañarlo a los eventos de la convención se dio cuenta de la gran trayectoria que tenía Yibo frente al gremio. Muchos empresarios mineros lo apoyaban en distintos proyectos y se percató de que muchas cosas sobre su carrera las había ganado desde muy joven... eso le alegró demasiado. Los días que se quedaba solo algunas horas, las aprovechó para hablar con Ziyi de sus propios proyectos, afortunadamente la consultora estaba prácticamente terminada y todo indicaba que seguían teniendo presencia en el concurso en Europa.
El día que Yibo tuvo la junta con el inversionista, Zhan salió a dar un paseo por la playa... estaba disfrutando del paisaje cuando una vieja conocida se acercó a él.
Gitana.- Por fin te encuentro...
Zhan.- Hola... no pensé volver a verte...
Gitana.- Estuve a punto de dejar este lugar pero...
Zhan la miró sin comprender.- A qué te refieres?
Gitana.- No suelo darle tantas vueltas a mis lecturas del tarot... en este caso, tú y tu esposo me llamaron mucho la atención y por eso quiero que tengas esto...
Al decir eso, le entregó la figurilla del aluxe.
Zhan.- Así que trajiste al enanito...
La gitana empezó a reírse.- Aunque no lo creas... desde que los vi ese día en el festival, el enanito como tu le llamas, siempre aparecía en la puerta de la casa rodante...
Zhan.- Cómo se llama?
Gitana.- En esta parte del país se les conoce como aluxes... en otros estados se les llama chaneques... en Irlanda les conocen como duendes... todos tienen una misión específica...
Zhan sonrió.- Entonces creo que es un buen regalo para nosotros...
La gitana lo miró con expresión muy seria.- En otro caso me alegraría...
Zhan.- No entiendo...
La gitana lo invitó a que se sentaran sobre la arena, de su bolsa sacó el mazo de las cartas y de nuevo le pidió que eligiera tres. Para su sorpresa, las dos primeras fueron las mismas que sacó la noche que llegaron al hotel.
Gitana.- Estás listo para saber que hay en la tercera?
Zhan asintió... la gitana le hizo una seña para que volteara la carta.
-Creo que está de cabeza- susurró.
Gitana.- Así es y créeme... eso no es bueno...
Zhan.- Significa algo malo?- preguntó ansioso.
Gitana.- La torre en llamas al revés... significa que habrá un cambio repentino en tu relación... entre ustedes hay algo... un gran silencio que les provocará mucho daño...
Los ojos de Zhan se llenaron de lágrimas rápidamente y miró al horizonte.- Las cartas pueden equivocarse... eso no nos puede pasar a nosotros...
Gitana.- Las cartas rara vez se equivocan... habrá un cambio... una revelación... tal vez sentirán que eso los va a destruir pero será para bien...
Zhan.- Y el enanito...
La gitana sonrió.- El enanito los protegerá... hará que su amor sea más fuerte de lo que es ahora, de ustedes depende superar esa difícil prueba...