"Cariño es nuestro turno
Quiero mantener este momento
Deslumbrarte en tus ojos
Llénalo y brillará por siempre"
—Lock You
Down, SHINee—
Miró su reloj por sexta vez, ya quería ver a su bebé y su turno no pasaba sino era dentro de unas seis horas más, estaba en emergencia junto a Yibo, quien a pesar de ser el director no dejaba de pasar por aquella área, tanto el como Zhan eran cirujanos generales, quienes tenían otras sub especialidad a pesar de haber preferido quedarse en cirugías generales, lo que los hacía médicos muy bien cualificados para cualquier situación, sin embargo ¿Qué pasa cuando llegan casos que te tocan el corazón? Que te hacen temblar y te dejan en estado de shock.
—Deja de mirar tanto la hora dulce veneno.—se burló Yibo de su esposo acariciando su cabello.
—Es que ya quiero estar con A-Yuan, lo extraño.—se quejó Zhan.
—Fuimos a verlo hace justo una hora, el está bien.
Zhan asintió y se sopló el cabello, llevaba un mes y medio trabajando en el hospital nuevamente y aún no se acostumbraba, quería estar con su hijo en cada momento, lo mismo le sucedía a Yibo, pero sabían que también tenían sus deberes, Xiao revisó las historias clínicas que habían hecho los residentes de primer y segundo año, llamándolos para corregir sus errores y ponerles horas extras como castigos, no obstante también elogió a quienes hicieron un buen trabajo.
Las puertas se abrieron de repente y entró un señor mayor quien iba sosteniendo un bebé en sus brazos, el pequeño parecía dormir, sin embargo más allá de eso se podía apreciar un poco de sangre saliendo de su boca.
—Ayuda por favor.—sollozó el señor.
Yibo y Zhan corrieron a ayudarle, empero tuvieron que separarse ya que detrás los paramédicos llegaron con un hombre con múltiples heridas, por lo que Wang dejó a Xiao con el bebé.
Sí a Zhan le habrían preguntado en ese momento que era lo más difícil que le había tocado como médico, sin pensarlo diría que ese caso, el hospital era especializado en cirugía, sin importar la edad el centro médico la tenía, pero el mundo de Xiao se sacudió al pensar que algo le podría pasar a su bebé y que tendría que ser intervenido, porque después de examinar al pequeño se dio cuenta de que debía de ser llevado a cirugía de inmediato.
Después de hablar con el señor que salió siendo el abuelo del niño, se dio cuenta de que el bebé se había caído de un segundo piso, tenía tan solo siete meses y tenía hemorragias internas, llamaron a los cirujanos pediátricos que tenían en el centro, incluyendo a Haikuan, quien tenía ese día libre, otro estaba en cirugía y los demás estaban en congreso, lo que dejaban a Zhan como primera opción, después de que tuvieran un consentimiento informado firmado por el abuelo corrieron al quirófano.
Zhan comenzó el lavado de sus manos, tenía un nudo en su garganta y sus manos temblaban, había pedido a Lusi como su asistente a pesar de que su amiga estaba pasando por otro ciclo en el hospital.
—Xiao ¿Estás bien? Tus manos están temblando.—dijo Lusi al ver a su amigo.
—Es mu-muy pequeño, tengo miedo.
Lusi frunció el ceño, ella había operado dos veces a niños junto a Zhan y jamás lo había visto temer o temblar, entonces ella recordó a Fan Xing .
—Doctor Xiao, ese niño no es Fan Xing, su vida depende de ti, vamos adentro y salvemos ese bebé.
El cirujano asintió entrando al quirófano, el bebé estaba conectado a máquinas y los anestesiólogos estaban entubandolo, el lugar estaba en silencio, porque ya sabían la causa de la caída, menos Xiao Zhan quien se acercó al niño y tragó grueso, su mente le estaba jugando una broma pesada, sostuvo el bisturí, pero solo podía ver a su propio hijo allí, sus manos temblaron notablemente haciendo que el personal compartiera miradas y lo entendiera.
—Ve donde tu hijo Xiao Zhan, yo seguiré aquí.
Xiao se giró para ver a Haikuan allí, no se había dado cuenta cuando el médico llegó, solo sintió un alivio, asintió pidiendo perdón en su mente al pequeño allí y se quitó la bata quirúrgica al salir, sollozó y corrió a ver su pequeño, quien estaba en la guardería del hospital y sonrió al ver a su papá, abriendo sus brazos para que lo cargara.
El médico solo tomó las manos de su hijo y besó su frente, no lo cargó ya que no quería contaminarlo con nada en el hospital.
—Papá te ama, mucho, eres un niño muy amado.
Lagrimas comenzaron a bajar por las mejillas de Zhan, el bebé no entendía eso, aún así sonrió nuevamente haciendo que el día de su papá se iluminara, después de unos minutos el rubio salió de la guardería, se limpió los ojos sintiendo como un peso se iba de él, se detuvo solo cuando tuvo a Yibo delante de él, su esposo lo miraba preocupado.
—¿Estás bien? Me dijeron que...
Yibo guardó silencio cuando sintió que su esposo lo abrazaba, había estado preocupado por Zhan, Lusi le dijo lo que sucedió en el quirofano.
al no encontrar a Xiao en ningún lugar Yibo supo dónde estaría, el pelo negro abrazó al rubio con fuerzas y besó su cabeza, entendía perfectamente a su pareja, no era fácil ser médico y atender casos que parecieran cerca a ti, pese a esto entre el personal de salud siempre se solían decir que atendieran a sus pacientes como si estos fueran sus familiares.
—¿Cómo es que terminaste tan rápido con tu paciente?.—inquirió Zhan.
—Murió.—Yibo dejó escapar un suspiro y se sentó junto a Zhan tendiendole una botella de agua que llevaba en su bata.—Mi paciente era el padre del bebé que atendías, se lanzó con su hijo de un segundo piso, según me dice el abuelo del niño, el hombre al saltar se lesionó tan gravemente al caer sobre unas varillas y tablas de una construcción que tenían al lado, coincidió con lo que dijeron los paramédicos, no pude hacer nada por él.
Xiao se cubrió la boca y miró a Yibo sorprendido.
—¡Dios mío! ¿Porqué haría algo así?
—Celos, su esposa le había pedido el divorcio y él alegó que ella lo pedía para irse con otro hombre, juró que le quitaría lo que más amaba, a su hijo.
—No se que decir Yibo, que desastroso, ese hombre solo pensaba en él ¿Cómo no pudo pensar en su hijo? ¿Cómo pudo hacerle eso?.—sollozó Zhan.—Y yo no pude hacer nada por él, soy un mal médico Bo.
—Shhh, no digas eso solecito, eres uno de los mejores, antes de ser médico eres humano amor, tienes sentimientos, debilidades, altas y bajas como todos, yo me dirigía al quirófano a ayudarte cuando Haikuan se presentó, ya mi paciente había fallecido, por lo que quise darte espacio hasta que Lusi me dijo lo que pasó.
—Quiero saber como está.
—¿Quieres verlo?
Zhan asintió y tomó la mano de Yibo, juntos fueron al quirófano donde se estaba llevando a cabo la cirugía del bebé, llegaron en el justo momento en el que Haikuan salía de allí y les brindó una sonrisa enorme.
—Sobrevivirá, el niño es un guerrero, deberían ir donde su abuelo e informar que el bebé estará bien.
Los cirujanos asintieron y fueron a buscar al abuelo del niño, quien se puso de pies desde que vio a Zhan.
—Dígame que mi nieto está bien, que mi pequeño Yubin está aún con nosotros.
—Sí señor, su nieto está estable, su Yubin se encuentra en buen estado, el doctor Liu Haikuan hizo todo lo posible para que sucediera.
El anciano se abrazó a los médicos antes de alejarse de ellos y mirarlos con anhelo y tristeza.
—¿Adoptarían a mi nieto? Por favor.
Yibo y Zhan compartieron miradas antes de sentarse junto al anciano, quien parecía ansioso esperando la respuesta de la pareja, en sus manos sostenía unos papeles a los que se aferraba con fervor.
—Por favor, quédense con mi nieto, adoptenlo...
—Nosotros tene...
Zhan apretó la mano de su esposo haciéndolo guardar silencio, porque si bien era cierto que tenían un hijo pequeño no podían dejar las cosas así, alguna razón tenía aquel señor para pedir aquello.
—¿Porqué quiere dar a su nieto en adopción? El pequeño lo tiene a usted y a su madre...
El anciano negó y le tendió los papeles arrugados que tenía en sus manos, Xiao Zhan los tomó sin apartar su mirada del señor.
—Llamenme Wong, así se familiarizan conmigo.—informó el anciano.—Yo... yo estoy muriendo, tengo cáncer terminal y mi hija está hasta la cabeza con las deudas, ella está de acuerdo, aunque ella ama a Yubin no puede tenerlo a su lado, Suxi necesita volver a Corea, sólo así podrá pagar todo...
El señor Wong comenzó a tocer, sacando un pañuelo con sus manos temblorosas, miró con anhelo a la pareja.
—Ustedes le darán una mejor vida a mi nieto, su madre se mantendrá en contacto, ha sido un niño muy amado, claro por mí y por Suxi, y quienes salvaron su vida son los más indicados para estar a su lado.
Zhan tragó grueso.
—Señor Wong, otra persona fue quien operó a su hijo, yo no pude...
—Señor Xiao, usted lo llevó a quirófano, y cuando se me acercaron para preguntar si tenía seguro médico y negué alguien más le dijo que usted y su esposo se harían cargo de las cuentas, usted ha sido parte de que esté a salvo, por favor piénselo, mi nieto quedará desamparado.—lagrimas se deslizaron por el rostro del anciano.
Las manos de Zhan volvieron a temblar, desde un principio al ver a Yubin se sintió extraño, y sabía que parte de eso era por Fan Xing, jamás querría ver a su hijo en una situación así, y se sentía tranquilo, porque él y Yibo se encargarían de darle lo mejor a su bebé, jamás traerían problemas entre ellos a su hijo, era algo a parte, ambos amaban demasiado a su pequeño como para herirlo.
Los esposo compartieron una mirada y se sonrieron, porque habían miradas cargadas de palabras, de complicidad, de amor, de entendimiento, tanto Yibo como Zhan se entendían muchas veces sin tener que hablarse.
—Señor Wong, tomaremos la custodia de Yubin hasta nuevo aviso, pero si la madre del niño no lo desea o lo quiere devuelta lo haremos, si su hija ama tanto a su hijo lo querrá con ella una vez que resuelva sus problemas.
El señor se puso de pies rápidamente, ignorando la sensación vertiginosa que tuvo, hizo una reverencia sollozando, porque su nieto finalmente tendría un hogar.
—En cuanto a usted, le haremos exámenes y vamos a ver el estadio en el que está su cáncer, le ayudaremos, debe vivir y desear hacerlo, por Yubin y Suxi.
El anciano negó bajo un manto de lágrimas.
—No hagan nada por mí, con cuidar a mi nieto es más que suficiente.
—Señor Wong.—Zhan de acercó más al anciano y tomó su mano.—El hospital cubrirá un porcentaje del tratamiento que necesite, la otra parte la conseguiremos con los programas de prevención, su nieto al salir de aquí estará en nuestra casa, sabe...
Zhan se llevó la mano libre al bolsillo de su pijama médica y sacó su teléfono exhibiendo su fondo de pantalla, donde su bebé sonreía.
—Este es A-Yuan, es nuestro hijo, tiene cuatro meses, se que se llevará muy bien con Yubin, quiero que mi bebé le vea a usted también como un abuelo, que el tiempo que pase en esta tierra esté junto a su nieto, así que no me diga que no tomará tratamiento.
Sonriendo y sintiéndose mejor el señor Wong se dejó guiar a oncología, donde recibió las mejores atenciones, lamentablemente su cáncer era muy agresivo y había hecho metástasis, no tenía mucho tiempo de vida, Zhan lloró conmovido esa noche en su casa después de dormir a su hijo, Yibo lo abrazó y lo acunó en sus brazos.
—Esto no te lo enseñan en la facultad.—se quejó Xiao después de lavarse el rostro.
Yibo suspiró y se dejó caer en la cama con sus brazos cruzados.
—No, no lo hacen, pero es bueno ver que aún queda humanidad en nosotros. ¿Sabes? Nos volvemos fríos con el tiempo, duros, tanto así que no nos duele ver como la vida se les escapa a los demás, que no nos importa el llanto de los dolientes, todos hemos pasado por eso, y a veces algo nos hace recordar que también somos parte de eso.
Wang y Zhan miraron a su bebé dormido, porque Fan Xing era su salvación, un ancla en medio de un mundo lleno de dolor, ver el milagro de la vida, la ternura e inocencia de un ser pulcro, angelical, que era producto de su amor, aún sin ser planeado fue un bebé amado desde que supieron de su existencia.
Ambos por coincidencias llevaron sus dedos hasta las pequeñas manitas de su hijo y sonrieron.
—Quizás si A-Yuan no estuviera en nuestras vidas no habríamos aceptado la custodia de Yubin.—susurró Yibo.
El rubio asintió dándole la razón, porque jamás pensó en adoptar.
—Solo vi a Fan en Yubin, no pude ni hacer una incisión en él, mi cuerpo se queda estático, Bo, fue demasiado traumático.
—Lo sé, pero eso no le pasará a Fan Xing, mucho menos a Yubin nuevamente, vamos a cuidar de ellos, y tampoco lo meteremos en problemas nuestros, no es lo correcto, se que no somos perfectos ni nada por el estilo, que tenemos temperamento fuertes, solo debemos aprender uno del otro y sobrellevar nuestras diferencias.
Xiao asintió y se acostó para llevar a su hijo hasta su regazo.
—De acuerdo contigo Bo.—Zhan miró a su esposo haciéndolo sonrojar.
—¿Qué?
—Te amo tanto cara de hipopótamo.
—Tus piropos me dan depresión.—se quejó Yibo cubriéndose el rostro con la almohada.
Zhan se cubrió la boca para evitar reirse y despertar a su hijo, lo llevó hasta su cuna y le dio un beso, se alejó amplió sus ojos al ver el calendario y darse cuenta que ese día le tocaba la inyección anticonceptiva, corrió haciendo que Yibo levantara su cabeza curioso.
—¿Que haces?
—La inyeccion, me toca hoy.
Yibo gruñó poniéndose de pies para buscar la inyección porque el era quien guardaba los medicamentos, Zhan solía ser olvidadizo en esos asuntos en la casa, la encontró y se acercó a su esposo depositando un beso en su cuello y pegándose a su trasero lo suficiente como para que sintiera su erección.
Un jadeo escapó de Zhan y se mordió los labios cuando sintió que Yibo le bajaba la pijama, sintió algo húmedo acariciar su glúteo derecho seguido un pinchazo que lo hizo dar un respingo.
—¡Yibo!.—se quejó.
—¿Qué pensabas? Nos vamos al método seguro.—bromeó Yibo levantando a su esposo en sus brazos y llevándolo a la cama.
Yibo se asustó al ver los ojos de su esposo, parecía a punto de llorar y sus labios estaban como los de un bebé cuando le quitaban su juguete favorito.
—¿Qué pasó?
—Me dolió Yibo, eres un médico malo.—Zhan cruzó sus brazos unos segundos antes de saltar sobre su esposo.
—Como te amo dulce veneno.—indicó Yibo abrazando a Zhan.
Continuaron hablando hasta quedarse dormidos, les esperaban días caóticos con dos bebés en casa, así que era mejor descansar cuanto pudieran.
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Holiwis. Acá ando de vuelto con otro cap más.
Gracias por darnos amor por acá, les amamos.
Y pues desde este capítulo marcamos recta final de este fic, pero no sé preocupen, traeremos más y más.
Hasta la próxima.