Segunda Vida Para Amelie [EDI...

By AntoinetteFerrata

9.5K 1K 2K

Segunda vida para Amelie, fue creada para un trabajo del colegio, pero con el pasar del tiempo se convirtió e... More

BOOK TRAILER
Dedicatoria
El testament d' Amelia
Prólogo: Yo soy Amelie de Róman
[1] Él solo pidió algo de tiempo
[2] Él ha cometido un grave error
[3] Ella será un monstruo con sed de sangre
[4] Él ha sido temido
[5] Ambos crearon un problema
[6] La gran invitación
[7] Ella la busco por cada rincón
[8] Ella solo debía de seguir las reglas
[9] Él es y será el honorable Rey de Róman
[10] Ella intentó lastimarla
[11] Y él ahora siente culpa
[12] Y ella dijo: No
[13] El día del festival
[14] Despedida con aroma a rosas
[15] No hay tiempo para ser cercanos
ADELANTO: [16] S_n __lo _ro__s
Nota de Autora : Ave atque vale

"Visitando un mundo destruido"

227 29 46
By AntoinetteFerrata


[Aclaración: Lo que están a punto de leer NO es parte de la historia original, sino que se trata de una especie de Bonus o "What if?" (¿Qué sucedería si...?); por ende, tiene el único propósito de divertirles, poniendo a un personaje que ya conocen en un ambiente totalmente distinto. El resto lo explicaré al final de este cuento, para no hacer una introducción demasiado larga.]

En una época cercana a 1840, en un lugar lejano destruido por la guerra sin nombre.

Lo primero que sentí al abrir mis ojos fue nauseas, el hedor de la habitación era insoportable y al levantarme de la cama pude entender el motivo, di un grito al ver la cantidad de cadáveres que había en el suelo de la habitación. Nunca había visto algo como ello antes y lo peor de ello era que, aunque cerrara mis ojos, al abrirlos estaría en la misma habitación, el hedor seguiría inundando mis fosas nasales y los cadáveres por más que quisiera no iban a desaparecer.

No entendía nada, era la misma habitación de siempre, todo estaba en su lugar: exactamente como lo había dejado la noche anterior, pero a la vez, sabía que este no era el castillo de mi padre...

Unos murmullos desviaron mi atención y junto con ellos grandes pisadas, por un segundo creí que alguien iba a entrar, pero no fue así. El ruido del otro lado de la puerta, me estaba llamando, mi curiosidad aumentaba con cada paso que escuchaba, pero no me atrevía a bajar de la cama, no si debía cruzar por en medio de todos esos cuerpos.

Lamentablemente, mi curiosidad era mucho mayor que el miedo que sentía y en un par de minutos ya estaba al otro lado de la habitación, con mi mano en la manija de la puerta, a unos segundos de abrirla, pero una gran explosión me detuvo de aquel acto. Me voltee hacía la única ventana de la habitación, lo único que podía ver era humo, se escucharon unos gritos, desde afuera de mi puerta, luego de aquella explosión estaba indecisa si salir o no, pero entre quedarme junto a los cadáveres o salir, absolutamente prefería la segunda opción.

Estaba en un pasillo muy similar al del castillo de mi padre, las sirvientas corrían de un lado a otro que llegaba a ser imposible reconocerlas. No sabía qué hacer, estaba detenida en un pasillo que bien podía o no ser de mi hogar. 

—¡Señorita! ¡Salga de ahí! —Me voltee para saber quién había gritado, pero había sido demasiado tarde, tres sirvientas habían tropezado conmigo, provocando que las cuatro cayéramos al suelo.

—¡Le he dicho que se moviera! —Dijo la castaña mientras se cruzaba de brazos.

—¡Acabo de lubricar mis tuercas! No puedo creer que todo mi esfuerzo se haya desmoronado. —Dijo la rubia mientras se arreglaba su cabello. —Mi pobre vestido... Solo hace unas horas había terminado con cada detalle...

La última de ellas se había quedado en silencio mirando el suelo, no pude evitar gritar al verles con mayor precisión, cada una poseía un artefacto metálico en su rostro o torso, ya sea el corsé, unas gafas, la mitad de una máscara o parte de su brazo. El diseño de sus vestidos era idéntico a la época victoriana, aunque tenían detalles góticos, jamás había visto una mezcla de metal y tela como la que poseían aquellos vestidos.

—Señoritas... Les pido una disculpa por no haberlas visto, estoy algo conmocionada por la explosión, ¿saben que está sucediendo?

—¿Qué está sucediendo? ¿Es una broma? ¡El rey se ha enfadado y ha mandado a destruir el casti...

El sonido de otra explosión le interrumpió, las tres se levantaron sin pensarlo y salieron corriendo por el pasillo. Esta era la segunda vez que llegaba a un lugar en el peor momento, pero aquí era distinto, esto no era como la novela original y mucho menos se asemejaba con la vida que estaba viviendo hace unas horas. ¿Habré vuelto a reencarnar? No, no pienso que pueda ser de esa forma... ¿Quién se supone que soy en este mundo? Y ¿Por qué el castillo que estoy viendo ser destruido es el mismo que conocía como hogar? Son los mismos cuadros, la misma alfombra en el pasillo, me arriesgaría a decir que es el mismo, tan solo debía de salir de el para comprobarlo.

Y eso fue lo que hice, corrí hacia la salida lo más rápido que pude, ignorando por completo como mi cabello se fue soltando de a poco y como mi vestido comenzó a rasgarse, ambas cosas no fueron importantes, todo dejó de serlo en el instante que llegué al jardín, el amado jardín de rosas que tanto quise estaba siendo destruido por una gran maquina con la cabeza de mi padre, del rey.

Ello me hacía sentir mareada, recuerdo haberme ido a dormir y al despertar estaba en este extraño mundo, donde el rey sigue siendo mi padre, donde las empleadas tienen artefactos metálicos en su rostro, donde hay unas máquinas de engranaje capaces de destruir todo a su paso... ¿Siquiera voy a poder volver a lo que yo conozco como hogar? 

Mi miedo aumentaba con cada empleada que salía del castillo y cuando vi salir a los caballeros, entre en pánico, nunca pensé ver a Oliver entre todos ellos, claramente era muy diferente a lo que recordaba, mismos ojos, mismo cabello, pero estaba acompañado de metal, igual que las empleadas que conocí antes.

Corrí hacia él lo más rápido que pude, pero me detuve a unos centímetros, ¿Qué sucedería si él no me reconocía? O peor aún, ¿no sabía quién era?

Eso fue lo que me detuvo, no podía arriesgarme a nada, no hasta conocer cuál era mi verdadera situación. Su rostro parecía preocupado, estaba girando de un lado a otro, como si buscara a alguien, pero había demasiadas personas, cuando quise voltearme para buscar un lugar más seguro escuche a alguien gritando el nombre de mi madre, a los segundos alguien me tomo de hombro.

—¿Diana? —Era Oliver. —Oh, discúlpame... Creí que eras otra persona. —Parecía desilusionado, pero a la vez angustiado y cuando comprobó que mi madre no estaba en este mismo lugar, pude notar su preocupación. Lamentablemente, todo cambió cuando vio la puerta del castillo derrumbarse, quiso correr hacia ella, pero era tarde. Aquello me hizo entender que mi madre seguía adentro del castillo y no podía seguir perdiendo el tiempo estando quieta, sabía que de una forma u otra Oliver lograría entrar por alguna puerta lateral, pero eso no ayudaría en nada, no si tomábamos en cuenta el incendio que se había producido por las explosiones.

No sabría cómo expresarlo, tampoco como describirlo, así que solo diré que mi cuerpo actuó de forma automática, antes de que me diera cuenta, había arrancado un trozo de tela de mi vestido para luego correr a la fuente y mojarlos, acto seguido tomé impulso y corrí hacia una de las ventanas rompiéndola. Un par de trozos afilados no me harían nada, no comparado con el temor de volver a perder a mi madre, no lo permitiría otra vez, esta vez haría todo lo que pudiera pasar salvarla.

Y eso fue lo que hice, la busque por todos los lugares que pudieron pasar por mi cabeza, recorrí todo el primer piso del castillo hasta que un llanto hizo que me detuviera: está en su habitación.

El humo estaba siendo cada vez más presente en el salón, pero con esfuerzo pude llegar hasta las escaleras, había perdido un par de minutos, pero nada era imposible. Tropecé varias veces gracias al largo de mi vestido, así que mientras corría decidí acortarlo con varios nudos, pero el hacer dos cosas a la vez solo hizo que tropezara a la mitad del pasillo.

La habitación de mi madre solo estaba a unos pasos y solo al llegar a este punto, pude ver por qué no había podido escapar ante las explosiones, parte del techo se había derrumbado negando la entrada a todas las habitaciones del ala oeste...

—¡Por favor! ¡Que alguien nos ayude! —Fueron solo dos frases, pero me dieron la fuerza necesaria para levantarme a pesar del cansancio intente caminar hacia su habitación, mis pies se sentían pesados, pero eso no evitaría que haría todo lo posible, para mi mala suerte, no pensé que los tablones de madera serían tan pesados, el llanto del bebé se detuvo y los gritos de ayuda también.

Eso me hizo desesperar, en una situación como esta, el silencio no era buena señal.

—¡Señorita Diana! Estoy aquí... Por favor, no deje de hablarme... Yo... —Estaba a punto de quebrarme, había logrado mover un par de tablones, pero aún quedaban dos, no sabía si podría lograrlo, quizás no intente lo suficiente....

El sonido de una explosión me hizo volver a estar alerta y como si de una película se tratara, Oliver apareció de entre las llamas, parecía un ángel –uno bien inusual si tomamos en cuenta que salió de entre el fuego–. Tomo los dos tablones restantes y los lanzo lejos, no tenía tiempo para sorprenderme, debía de ayudarle, aunque no parecía necesario, para el momento en que estuve nuevamente de pie, él ya había abierto la puerta de un golpe y tomado a mi madre en brazos. Ella sostenía algo entre sus brazos, pero no era momento de pensar en ello.

Ambos comenzamos a correr para salir de aquel lugar, pero llegado un momento, Oliver solo me alzo en brazos y nos sacó de allí en un par de segundos. Nunca había visto que alguien pudiera correr con dos personas, una en cada brazo, incluso pensar en ello me parecía imposible, pero de alguna forma, lo logró.

Pudimos salir del castillo a tiempo. Aunque no sabría decir si era algo realmente bueno, pues apenas puso un pie afuera se escuchó un gran estruendo y una enorme nube de polvo nos rodeó: el castillo había colapsado.

Oliver me dejo en el suelo y nos guio hacia un pequeño espacio vacío del jardín, mi preocupación había disminuido al ver a mi madre respirando. No me había sentido tan aliviada en mucho tiempo y aunque hubiera sido él quien nos hubiera salvado, me sentía como parte de la ayuda.

 A los minutos, mi madre pudo abrir los ojos, tanto ella como el bebé estaban bien, Oliver les había salvado a tiempo.

—Señorita... —Su voz, dulce como siempre. Fue lo necesario para que mis lágrimas volvieran a caer por mis mejillas, no pude evitar abrazarla.

—Hice todo lo que pude... Yo pensé que no podría... Yo.... Y usted estaba... —No sabía si podría entenderme, no si hablaba entre sollozos, pero ella era mi madre, aunque no lo supiera, sabía que podría entender que es lo que trataba de decir.

—Oh, mi niña... No te preocupes, hiciste suficiente. —Acarició mi cabello con delicadeza. —Muchas gracias, por ayudarme a mí y a mi pequeña...—No pude escuchar nada más, porque todo se volvió negro.

¡Holaa! ¿Cómo estas? Aquí Anto :D

Bieen... Ahora si quiero explicar con más calma de que se trata todo esto, primero que todo, no se asusten si no han entendido nada de lo que acaba de suceder. Tanto en la aclaración como ahora, quiero recordarles que esté no es un capítulo que continúe la historia, sino que se trata de un BONUS. 

¿Cómo ha surgido esta historia tan rara? Pues... resulta que hace un par de años (si estas viendo esto en el 2022 fue exactamente hace tres años) tuve que redactar un cuento para una de mis clases del colegio/escuela y la idea era darle un final distinto a una historia ya conocida, yo utilice mi novela como ejemplo, por ende, tome mis personajes y los lance a un mundo nuevo jaja... Recuerdo haberme divertido mucho haciendo ese trabajo :D

Soy consciente de que puede que no tenga mucho sentido y posiblemente termine editándolo en algún momento para crear un mejor trabajo, pero... mientras ello sucede, quiero que lo disfruten y me dejen sus sugerencias en los comentarios. 

¿Les ha gustado? ¿No les ha gustado? ¡Háganmelo saber! Si les ha gustado, no olviden dejarme un corazoncito en los comentarios. 

No olvides darle CLICK a la estrellita si te ha gustado, pues de o contrario... Peter Pan no podrá encontrar la segunda estrella a la derecha para regresar a nunca-jamás.

¡Espero leerte en los comentarios!

.

[Editado por última vez: 11-07-2022]

Continue Reading

You'll Also Like

93.2K 6.5K 56
Liah, princesa de Evigheden, próxima monarca del reino más grande y poderoso conocido hasta la fecha. Luna, princesa de Calanthe, próxima esposa de l...
50.6K 1.8K 41
Les vengo a informar que si demoró en publicar más capítulos es por falta de ideas o porque estoy ocupada y si no les gusta el ship por favor no haga...
27.7K 1.6K 24
-𝐋𝐚 𝐜𝐡𝐢𝐜𝐚 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐚 𝐞𝐬 𝐦𝐮𝐲 𝐥𝐢𝐧𝐝𝐚.... -𝐐𝐮𝐢𝐞𝐧 𝐞𝐬 𝐞𝐬𝐚 𝐜𝐡𝐢𝐜𝐚? 𝐄𝐬 𝐦𝐮𝐲 𝐥𝐢𝐧𝐝𝐚!★ -𝐄𝐧𝐭𝐫𝐚 𝐮𝐧𝐚 𝐜𝐡𝐢𝐜𝐚 𝐧�...
3.3K 77 39
Raj (Kaali), luego de sufrir el disparo de Mera; se mudó junto a su hermano para iniciar una nueva vida lejos de su vida de mafioso... en los años tr...