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-EL MEJOR DÍA-
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— Mierda... — susurró __________ al salir de su clase de Herbolgía el penúltimo día de clases, fuera del salón estaba Cedric Diggory recargado contra uno de los muros del pasillo, esperaba a alguien
Ernie sonrió maliciosamente notando lo que su amiga había observado — ¡Oye Cedric! — gritó el rubio causando que la pelinegra le lanzara una mirada fulminante, sería el último día con vida de Ernie Macmillan pero para él valía la pena si lograba que su amiga hablase con más personas
El ojigris miró en dirección a donde lo habían llamado, se acercó rápidamente al grupo de amigos de la azabache, ella rápidamente dirigió la vista a todos lados buscando un lugar dónde esconderse. No había salida, debía regresar al salón. Y eso fue lo que hizo.
— Me olvidé la pluma en el invernadero, nos vemos en la sala común — dijo demasiado rápido __________ para regresar al invernadero corriendo para esconderse debajo de alguna mesa
— ¡No escaparás de esta Brooks! — le gritó Ernie sonriendo pues de cualquier forma Cedric ya la había visto y la estaba siguiendo
— Te mataré Macmillan — masculló la pelinegra entrando de vuelta en el salón para después gatear hasta ocultarse debajo de una mesa
Segundos después, el ojigris entró al salón, __________ pudo observar los pies del castaño acercándose.
— Ya sé que estás aquí, __________ — dijo el castaño mirando a todos lados buscando a la chica con la vista, ella maldijo internamente — no salgas si no quieres, pero escúchame al menos...
La pelinegra se mantuvo en silencio, casi ni respiraba para no ser descubierta.
— No sé qué fue lo que hice mal, si te dijeron algo, o cuál sea la razón por la que me estás evitando, creo que te he caído mal de alguna forma... — dijo el ojigris desanimado, lo cierto era que extrañaba a su amiga azabache — Pero quiero que sepas que lo lamento, que espero que nos volvamos a hablar porque extraño poder hablar contigo de cualquier cosa.
_________ miró a otro lado tristemente, en parte era verdad que no quería que Cedric continuara metiéndose en problemas por culpa suya, pero la verdadera razón ni siquiera ella la sabía, simplemente había algo dentro de su cabeza gritándole que se alejara, como una alarma vuelta loca que la hacía sudar, ponerse nerviosa y en consecuencia, salía huyendo de la situación. Nunca antes se había sentido así con ningún chico, ¿por qué con Cedric era distinto?. Escuchó un pesado suspiro salir de los labios del castaño, _________ dirigió su vista hacia los pies del ojigris, había comenzado a alejarse, así que ella salió de su escondite temerosa.
— Tú no hiciste nada Cedric... — dijo _________ levantándose lentamente del suelo
Cedric pegó un brinco, se giró en dirección a donde la voz de la chica provenía, la miró confundido. Ella bajó la mirada.
— Es, sólo... No es tu culpa, lamento haberte hecho pensar eso — concluyó la azabache sin mirar al chico
Cedric por su parte sonrió con alivio, seguía sin comprender la actitud de la azabache pero ya le estaba hablando, eso era un avance al menos. Otra cosa que el ojigris notó en la chica era que jugaba con sus manos, parecía nerviosa.
— ¿Quieres hablar? — preguntó el ojigris desde su extremo del salón, pues estaban en los extremos opuestos del salón
— Realmente... — comenzó la azabache levantando la vista hacia el chico finalmente — No. Sólo quiero disfrutar mi último día aquí — se sinceró la chica
Cedric asintió, luego señaló la salida del invernadero con la cabeza, había tenido una idea — Vamos.
Dudosa, __________ siguió a Cedric fuera de los invernaderos, tenía ganas de salir corriendo en cuanto el chico no lo notase, pero no podía evitar sonreír al observarlo de vez en cuando, se veía lindo con aquellos rayos de sol a medio día golpeando en su cabello castaño, como Luke en Tatooine observando el atardecer, «espera ¡¿qué?!» pensó la pelinegra escandalizada al reparar en lo que había estado pensando, negó sutilmente con la cabeza para después mirar a otro lado que no fuese Cedric, así que decidió fijarse en el camino. Se dio cuenta de que iban hacia la escobera, o bueno, donde habían desembarcado el día que habían llegado a Hogwarts después de cruzar por el lago negro. El castaño tomó una escoba, luego caminó en dirección hacia el campo de Quidditch, __________ decidió preguntar que sucedía antes de que cualquier cosa pasara.
— Cedric... — dijo la azabache temerosa — ¿Qué vamos a hacer?.
El castaño la vio por sobre su hombro, simplemente sonrió. La azabache odiaba que no le dijeran las cosas cuando preguntaba, así que suspiró negando con la cabeza, luego se limitó a seguir al castaño para entrar al campo de Quidditch. Una vez en él, el castaño se deshizo de su mochila que dejó tirada en pasto, le hizo una seña a la chica de que se acercara, ella lo hizo con suspicacia.
— Quítate la mochila — le dijo el ojigris con un aire misterioso
Con el ceño fruncido la azabache hizo lo que su amigo le había dicho, dejó la mochila en el suelo.
— Me dijeron que tienes problemas con vuelo — habló el castaño señalando la escoba
— ¡No es cierto, que me haya caído de la escoba no significa que sea mala volando! — se justificó la pelinegra abriendo demasiado los ojos, comenzaba a suponer las intenciones de su acompañante
Cedric rió, por inercia la azabache sonrió.
— Vale, de todas formas daremos un paseo después de que domines la escoba — dijo él entregándole la escoba, pero ella retrocedió un paso
La verdad era que le tenía un poco de pánico a las alturas, no miedo, pero si sentía que se iba a caer, sentía que el suelo estaba demasiado lejos, el ojigris volvió a insistir. Pero la pelinegra tuvo una idea.
— Mejor vamos a la biblioteca... — comenzó a decir la azabache pero la voz del ojigris la interrumpió
— ¿Tienes miedo Brooks? — retó el ojigris con una sonrisa burlona, pero encantadora igualmente, a sabiendas de que así convencería a la azabache, ella nunca permitía que le dijeran que no podía hacer algo, jamás
___________ rápidamente tomó la escoba casi arrebatándosela al ojigris, claro que iba a hacerlo, no iba a dejar que la retara con aquella sonrisa suya que se cargaba. Se montó en la escoba, sus manos temblaban un poco, dio una patada en el piso y se elevó un par de metros, lo suficiente como para escuchar las indicaciones de Cedric, miró al piso, la altura era considerable, una caída no le dolería, todo en orden.
— Ok, ahora debes pensar con la escoba, como si fuera parte de ti — explicó el castaño apasionadamente a la azabache quien sonrió al escucharlo
— Vale... — dijo __________, se inclinó un poco sobre la escoba y le susurró a la escoba mágica que avanzara
La escoba comenzó a avanzar a una velocidad considerable, la chica le ordenó que girara, así paso, varias vueltas de ida y regreso con Cedric animándola, al final se detuvo de nuevo frente al chico. Lo miró esperando instrucciones pero lo que salió de los labios del chico no le gustó nada.
— Ahora iremos más alto — dijo Cedric haciendo un movimiento de mano indicando que se hiciera para atrás
Ella así lo hizo y entonces el chico se montó en la escoba, tomó las manos de la chica y las entrelazó alrededor de su torso, los nervios de __________ brotaron por todas partes, se sentía como si tuviera frente a ella al mismísimo Mark Hamill, estaba horriblemente nerviosa, su cuerpo temblaba sutilmente, el chico se sujetó de la escoba y le ordenó que se elevara, comenzaron a subir lentamente, la vista de ___________ se dirigió al suelo, empezó a sentir pánico una vez que estuvieron a la altura de los aros de Quidditch. La azabache se aferró fuertemente a Cedric haciendo un esfuerzo sobrehumano para no mirar abajo, en cuanto el chico comenzó a avanzar ella decidió intervenir.
— ¡Cedric para! — gritó la azabache enterrando el rostro en la espalda del chico
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Cedric detuvo la escoba abruptamente tras escuchar el grito de la azabache, la miró por sobre su hombro, ella estaba observando la distancia entre el suelo y ellos, tenía los ojos desorbitados, respiraba agitadamente, recién realizaba que ___________ temblaba. Aquello le causó ternura, ahora comprendía porqué la pasaba mal en clase de vuelo. Le tenía miedo a las alturas.
— ¿Te asustan las alturas? — inquirió el ojigris con suavidad en un intento de ocultar la ternura que sentía
— M-más que a la altura me da pánico caerme — confesó la azabache tartamudeando un poco mientras abrazaba con fuerza el torso de Cedric, seguía mirando el vacío
— Ey, mírame — pidió el ojigris con dulzura, ella no lo miró — ____________, mírame... — repitió el ojigris de la misma forma dulce, por fin la azabache lo miró, ahí estaban aquellos pequeños ojos chocolate que lo miraban asustados, Cedric sonrió — No tengas miedo, sólo sujétate fuerte y no pasará nada, aquí estoy, ¿si?.
Aquello pareció ser suficiente para que la azabache se relajara, pues sus manos dejaron de temblar, mágicamente el rostro se le relajó haciendo que el castaño sonriera; Cedric volvió a dirigir su vista hacia el frente para después comenzar a dirigir la escoba, se dirigieron hacia los árboles del bosque prohibido, sobrevolaron por encima de ellos, la sensación del viento contra el rostro de la pelinegra la hizo reír causando que Cedric la viese sobre su hombro, se veía tan tranquila, tan feliz, se sentía bien sabiendo que había sido él la razón por la que ella estaba feliz, volaron sobre el bosque durante bastante rato, ambos apreciaban el hermoso paisaje que la naturaleza les brindaba. El castillo era iluminado por los rayos del sol vespertino, se veía precioso.
— Es increíble... — dijo ___________ dejándose llevar por la felicidad que el momento le proporcionaba
— Lo sé — respondió Cedric felizmente al tiempo que conducía la escoba de regreso al campo de Quidditch
Sintió como la azabache dirigía su vista hacia el piso, pero ya no la sintió temblar ni la escuchó gritar. Eso lo hizo sentirse aún más feliz, la había ayudado en algo, había sido un factor importante en la superación de uno de los miedos de una de las personas más importantes para él, aterrizaron en tierra firme donde la pelinegra se bajó de la escoba con una radiante sonrisa en los labios, Cedric bromeó con su miedo a la altura causando que ella lo empujara levemente a modo de juego. Regresaron la escoba a su lugar, pero aún no querían regresar al Castillo, así que Cedric guió a la pelinegra hasta la orilla del lago negro, se sentaron debajo de un enorme roble que hacía una sombra refrescante en aquellas épocas del año, se dedicaron a observar el lago durante unos segundos de silencio que no era incómodo, sino todo lo contrario. De pronto la azabache sacó dos ranas de chocolate de su mochila, le tendió una a Cedric quien la aceptó sonriente.
— ¿Qué harás en el verano? — preguntó el castaño abriendo su rana de chocolate
— Pues supongo que lo de siempre, estudiar, ayudar a mi madre en el trabajo, comprar libros, nuevos discos... Nada interesante — respondió la azabache alzando los hombros para después morder su rana de chocolate
— Suena bastan interesante a decir verdad — dijo Cedric sinceramente mientras miraba a la pelinegra
Ella se había quitado la túnica, se veía relajada, Cedric no pudo evitar sentir ternura y felicidad de estar sentado con aquella pelinegra hablando de cualquier cosa, lo que más le gustaba era que con ella la conversación no se acababa, y si se acababa el silencio era cómodo.
— Realmente para mi esta bien, me gusta la adrenalina pero me considero una persona tranquila — comentó la pelinegra restándole importancia al asunto con un movimiento de cabeza
— ¿Y no te gustan las fiestas? — inquirió Cedric viéndola al tiempo que mordía su rana de chocolate — He escuchado que los muggles van a muchas, y digo, como tu creciste en el mundo muggle...
Ella soltó un risa — No, aborrezco las multitudes. Me siento sofocada, y más si son chicos de mi edad.
— ¿Entonces como sobrevives la escuela?
— Supongo que me he acostumbrado — respondió ____________ alzando los hombros — ¿y tú qué harás en el verano?.
— Pues entrenar Quidditch, así me podré presentar el próximo año o el que sigue.
— Suena genial, lo harás excelente... ¿Sabes? Hoy fue el mejor día que he tenido — confesó la pelinegra mirando el lago que se perdía en la lejanía
— El mío igual — dijo Cedric observando a la chica con una sonrisa en el rostro
Ya no pensaban en el mañana, simplemente se quedaron ahí disfrutando del ahora, de la compañía del otro.
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¿Les gustó? ¿Qué opinan de que Cedric sienta esa comodidad al estar con ___________?.
Espero que les haya gustado, que lo hayan disfrutado, y que si están pasando por un mal rato en casa como yo, pues que les haya ayudado tanto como a mi. Quiero avisar que quizá comience a distanciarme mucho de Wattpad a partir del lunes próximo porque comienzo la escuela, lo cual no me emociona para nada porque significa repetir la pesadilla de llegar al punto de no poder dormir por estar toda tensa esperando a que mi correo haga ruido a las doce de la noche indicando que tengo más tarea. Pero en fin, prometo tratar de subirles esto a lo largo del mes para que puedan leer el segundo libro xd.
No olviden que las amo y Cedric también, nos leemos luego, soy su fan, bye 💜💜
----------------------- Travesura realizada ----------------------