Los atardeceres en Grecia resultaban extraordinarios. El sol se ponia entre nubes de algodón en medio de miles de tonos rosados, y en ningún sitio se veian tan bien como desde la playa, Andrea con las sandalias en las manos mientras caminaba descalza por la orilla.
Aquel era su momento favorito del dia, dar un paseo antes de irse a descansar. Llevaba un mes en hotel, tenia. que estar agradecida por muchas cosas. La galeria iba bien, habia hablado con Rafa se iria unos dias donde su familia y luego vendria a ver como seguia marchando las cosas, y el embarazo de Selena iba muy bien, tenia un hermano que la queria y se preocupaba por ella. En cuanto aquel dolor que sentia a veces al pensar en cierto griego que se le habia metido profundo en su corazón. Se suponia que el tiempo lo curaba todo. Solo necesitaba un poco mas de ese tiempo....
Estaba a punto de dejar la playa y cruzar el camino que llevaba a su habitación cuando vio a alguien acercandose a ella por la orilla. Era un hombre alto y ancho con el rostro aceitunado. Y por un instante pensó que se trataba de el. Sintió como se le aceleraba el pulso.
Y cuando penso que habia sido una locura, el hablo.
-Hola, Andrea.
-Nico? Pregunto ella deteniendose en seco.
A pesar de que ya habia oscurecido, se dio cuenta de que tenia un aspecto diferente. El pelo se le rizaba un poco mas al cuello, y tenia las facciones menos tirantes. Incluso iba vestido de forma distinta, mas informal.
-Me ha costado un poco dar contigo. Te has mudado.
-La casa era demasiado grande, dijo ella encogiendose de hombros, encontre este hotel y las vistas al mar son espectaculares, y puedo ir a la galeria caminando.
Andrea no dejaba de preguntarse en su cabeza que estaba haciendo el allí
-Y tu como estas...
-Bien, Nico se metio las manos en los bolsillos, he estado en Montvelatte estas dos ultimas semanas he estado visitando a Mateo y Selena. Fui a llevar a mi madre, hacia años que no iba.
-Como esta tu madre?
-Mejor, se va quedar un tiempo en la isla, la compañía y el cambio le haran bien.
Nico dejo escapar un suspiro, y miro hacia el mar antes de volverse hacia ella .
-Te importa si damos un paseo?
Ella asintio con la cabeza y se dispusieron a caminar por la orilla
-Que estas haciendo aca? Le pregunto, te pidio Mateo que echaras un vistazo a ver como estoy?
-No, Mateo fue el que me dio tu dirección, para nada esta muy orgulloso de ti. Te parece que nos sentemos un rato?
Tomaron asiento en la arena cálida, mirando hacia la noche iluminada por la luz de la luna. Una parte de Andrea deseaba que nunca hubiera vuelto, y la otra se mantenia extrañamente esperanzada.
Al estar alli sentados, mirando y escuchando las olas sin hablar y sin siquiera mirarse, sintio el calor y la fuerza de Nico en cada fibra de su ser. No queria sentirlo, pero negar aquel impacto en ella era como tratar de negar el atardecer.
Aunque ahora era de noche, y el peso de lo que no se habian dicho le atenazaba el alma. Miro Nico, que estaba apoyado sobre los codos mirando al mar. Y una sola mirada basto para que algo se despertara en su alma. Siempre estaria enamorada de Nico, pero no sabia como iban salir bien librados de esta.
-Nico, Mateo me conto lo de Victoria, lo de vuestro planes de boda .
El giro la cabeza hacia ella.
Nico se incorporo de pronto y se sacudio la arena de los codos antes de apoyarlos sobre las rodillas, y mirarla fijamente
- Estoy aqui, por que quiero pedirte disculpas como te he tratado todo este tiempo, no debi echarte la culpa de la muerte de mi padre y de perder la fortuna familiar. El unico aqui culpable fui yo.
-Era yo la que salio de tu habitación, alguien me vio y penso tuvimos una aventura. Todo por mi estupido amor de adolescente, una lagrima le resbalo por la mejilla. No podia entender por que estabas tan enfadado conmigo antes, pero finalmente todo cobro sentido-se detuvo un istante, me echaste, te aseguraste de que no ocurriera nada, y sin embargo te hicieron responsable de todos modos.
-Te voy a contar lo que paso despues....
La boda se cancelo, el acuerdo entre ambas familias se hizo trizas. Nico no podia negar la verdad. Habia sido una escena desagradable, la primera de muchas. Lo llamaron para que respondiera de sus pecados. El padre de Victoria lo acuso, su propio padre gritaba y trataba de defenderse, conciente de lo que estaba en juego, tratando desesperadamente de asegurar su posición antes de perderlo todo.
Y entonces su padre le habia pedido en ultimo y desesperado intento que jurara antes Dios que no habia estado con otra mujer y que era libre de casarse con Victoria.
-La amabas? le pregunto Andrea.
-A quien, a Victoria?
-A quien si no? ibas a casarte con ella.
Nico estuvo a punto de reirse...ante aquel absurdo
-Nunca la ame. Muy poco la conocia.
Andrea se puso de pie, ya no tenemos mas nada de que hablar. Andrea se coloco a caminar y Nico la retuvo sujentandola del brazo.
-No! escuchame! tenemos algo mas que hablar.....