Sin Límites | Pokémon |

By Gaiou-Sama

32.5K 4.3K 4.2K

El sueño de la mayoría de los niños era el convertirse en un Entrenador Pokémon y viajar por el mundo en busc... More

Capítulo 1: Sin metas.
Capítulo 2: Una difícil decisión.
Capítulo 3: ¡Yo te elijo!
Capítulo 4: La Pokédex.
Capítulo 5: A la aventura.
Capítulo 6: Duelo de Tipo Fuego, Charmander vs Charmander.
Capitulo 7: La líder del Gimnasio Hormigón.
Capítulo 8: ¡Desafiando a Hiedra!
Capítulo 9: Apuntando al Siguiente reto.
Capítulo 10: Sobre nubes.
Capítulo 11: Bienvenidos a Hoenn.
Capítulo 12: Bosque Petalia.
Capítulo 13: Cruzando el mar.
Capítulo 14: El Gran Premio.
Capítulo 15: Poder de Dragón.
Capítulo 16: Voluntad de Equipo.
Capítulo 17: Lavacalda.
Capítulo 18: Rojo Fuego.
Capítulo 19: Siguiente destino.
Capítulo 20: Descenso en Johto.
Capítulo 21: Una torre con historia.
Capítulo 22: Un combate fantasmagórico.
Capítulo 23: La visión.
Capítulo 24: ¿Sol y playas?, Suena bien.
Capítulo 25: ¡Alola!
Capítulo 26: La prueba de los Guardianes.
Capitulo 27: Preparación.
Capítulo 28: Admiración.
Capítulo 29: Los capitanes de Akala.
Capítulo 30: Confrontando a un Capitán.
Capítulo 31: Arde con fuerza, El poder de los Cristales Z.
Capítulo 32: Viaje a Mele-Mele, Encuentro con el Kahuna.
Capítulo 33: ¡Golpea fuerte, Lucario!
Capítulo 34: Esperando por un combate.
Capítulo 35: Poni y Mele-Mele.
Capítulo 36: Lazos mágicos, Rocas y Hadas.
Capítulo 37: Fuego en el cielo.
Capítulo 38: Aquello que sobrevuela el Océano.
Capítulo 39: Hela y Kaudan, un día cargado.
Capítulo 40: Superando expectativas, Forzando al Máximo los Z.
Capítulo 41: Lo extraño se hace aún más extraño.
Capítulo 42: El Usurpador de la Luz.
Capítulo 43: Más responsabilidades.
Capítulo 44: Al rojo vivo - De camino a Kalos.
Capítulo 45: ¡Bonjour, Kalos!
Capítulo 46: Surgir ardiente.
Capítulo 47: De camino a Yantra.
Capítulo 49: Sin aliento.
Capítulo 50: Más Allá del Límite.
Capítulo 51: La Persona Equivocada.
Capítulo 52: Furia de Dragón.
Capítulo 53: La cima antes de tiempo.
Capítulo 54: La condición de un Rey.
Capítulo 55: De vuelta al cielo.
Capítulo 56: El nacimiento de la Dai-Gurren.
Capítulo 57: Adaptación.
Capítulo 58: Enfrentando a una sombra.
Capítulo 59: Espera.
Capítulo 60: Familia.
Capítulo 61: Rey Dragón.
Capítulo 62: Cambios.
Capítulo 63: Lucha Clandestina.
Capítulo 64: Flama de Dragón.
Capítulo 65: El cielo ya no es el límite.
Capítulo 66: Ciudad Canal.
Capítulo 67: Lanzas vs Escudos.
Capítulo 68: Conflicto en la Isla Hierro.
Capítulo 69: Por la Fuerza.
Capítulo 70: En Busca de Respuestas.
Capítulo 71: Antes del Amanecer.
Capítulo 72: De Donde Venimos.

Capítulo 48: Luchadora sobre ruedas - La Torre Maestra.

343 54 65
By Gaiou-Sama

—¿De verdad te encuentras bien?

—Me duele todo.

Tenía sus razones para decirlo, pues por si no fuese poco la sesión de entrenamiento/paliza que él y Bea tuvieron el día anterior por la mañana el asunto se repitió y bueno, terminó igual o peor que el día anterior.

—Mira el lado bueno, mejoras muy rápido.—Dijo la Galariana tratando de animarlo.

—No es de mi agrado ser apalizado, pero supongo que algo es algo...

—No entiendo, ¿Por qué de pronto tienes tanto interés en aprender a pelear?—Dijo esta vez Rouse uniéndose a la conversación.—No es como que sea totalmente necesario... ¿Verdad?

Ryū miró a Rouse de reojo y suspiró, era claro que ambos sabían que posiblemente si era necesario.

—Estuve pensándolo un poco y creo que sería bueno, no puedo depender de mis Pokémon todo el tiempo.—Contestó de forma serena.—No planeo volverme una carga para ellos, quiero que ellos puedan confiarme sus vidas así como yo les confío la mía.

—...Woah.—La peliplateada quedó boquiabierta.

—Eso... Eso es bastante admirable.

El albino sonrió de lado. Pasando su mano brevemente por las Balls en su cinturón que al tacto se sacudieron, para seguir mirando al frente.

—¿Cuánto falta para llegar?, Ya me estoy cansando de caminar la verdad.—Se quejó Arata.—Ya me cansé de parecer relleno.

—Vamos viejo, ¿Qué pasó con el espíritu que tenías en Alola?

—En Alola teníamos Pokemonturas, aquí no existe eso Akashi.

—Tiene un punto ahí.—Le apoyó su hermana.—Aunque Ryū, Rouse y yo jamás usamos eso.

—De Ryū lo entiendo, lo de ustedes dos si me sorprende.—Dijo el pelirrojo.—Pero bueno, supongo que al final no hay nada que hacer.

—Debiluchos.

—¿Estás seguro de que tú puedes decir eso?—Comentó Bea con un tono burlón.

El oji-rubí soltó un gruñido que generó algunas risas en el grupo, también aligerando un poco el ambiente y el cansancio de la mayoría. Entre plática y plática llegaron a divisar por fin su destino.

Ciudad Yantra.

Ninguno sabía nada de la Ciudad más que el nombre y su ubicación por lo que al encontrarse con una vista al mar muchos se sorprendieron e incluso planearon una visita breve en cuanto todos hubiesen retado al Gimnasio, a Ryū eso le importaba bastante poco, no tenía Pokémon de tipo agua con él así que no sentía que fuese una gran necesidad pensar en ello así que se mantuvo firme en su objetivo principal por el momento.

"Esto es incómodo..." Y aún así habrían algunas cosas que lo hacían distraerse.

Cómo por ejemplo, esa sensación de estar saturado que ha estado experimentando desde la ciudad anterior y que le ha quitado algunas horas de sueño.

Por no decir que no ha dormido absolutamente nada.

—Tengo que encontrarme con una amiga, ¿No les molestaría acompañarme verdad?

—No tenemos que retar al Gimnasio hoy, así que está bien.—Contestó el albino.—¿Es por ella que estás en Kalos?

—Sip, también es experta en Pokémon de tipo lucha, creo que se llevarán bien una vez la veas.—Dijo la de cabello gris con una gran sonrisa.

—Hm, te seguimos.—Dijo Rouse.

—Tengo hambre, ¿Vamos por unas papitas?

—Hermano deja eso para después...

—Go, Go, Go, Go!—Les apuró Akashi.

Fue un paseo más que nada mientras se dirigían a su destino, se permitieron ojear un poco las tiendas que se encontraban e incluso compraron alguna que otra cosa. Varias veces la peliazul trató de hacer que Ryū disfrutara un poco más de la caminata, pero este se negó rotundamente varias veces.

—Tengo cosas más importantes en las que pensar.

—...Tonto, relajarse también es importante.

—Tendré tiempo para eso después, no nos quedemos atrás.

Y así, varias veces en las que la respuesta siempre fue más o menos la misma y al final ella solo podía suspirar y fastidiarse con la actitud de Ryū, que por alguna razón era tan seca como el día en que salieron de viaje.

Integrados de nuevo al grupo, todos se preguntaban porque estaba siendo tan extrañamente frío, pero nadie dijo nada al respecto y solo continuaron caminando.

—Y bueno, supongo que llegamos.—Avisó Bea, con un tono más calmado que el que habría querido pero necesario por la situación.

Una ciudadela con una imponente torre yacía frente a ellos.

—¡Bienvenidos a la Torre Maestra!

El lugar del quinto desafío de Gimnasio para muchos de ellos, era bastante impresionante vista desde afuera, por dentro las cosas fueron aún más increíbles. El sitio estaba plagado de entrenadores y luchadores que buscaban más fuerza, algunos se veían realmente fuertes, pero no era por lo que estaban ahí.

—¡Korrina!

—¡Bea!

Al llamado de la morena una chica sobre patines salió rápidamente en su encuentro, fue un muy fuerte abrazo hasta que la rubia se percató de la compañía de su amiga, pero no fue hasta que está la soltó que se decidió a hablar.

—Pensé que habías dicho solo un familiar...

—La de cabello gris rió por lo bajo.—No, no, solo ese de ahí es mi familia.—Dijo apuntando hacía Ryū.—Los demás son sus amigos, también vienen a retarte.

—Wooho!

La actitud de la líder de Gimnasio se tornó muy... Energética, tanto que no tuvo problema en prácticamente lanzarse haga el grupo para presentarse.

—¡Hola a todos, es un gusto conocerlos!—Su tono de voz y expresión facial demostraban felicidad, tal vez demasiada.—¡Mi nombre es Korrina y soy la líder de Gimnasio en esta ciudad, será un gusto probar sus habilidades!

—Uh-¿Hola?—Respondieron Rouse, Arata y Nahomi tomando algo de distancia.

—¡Un gusto!—Akashi parecía ser el único que no estaba incómodo por la situación.

—Que ruidosa...

—Oh, no seas así Ryū, ella solo está siendo amable.

—Amablemente ruidosa.

—Ay, lo siento, es que me emocioné.—Avergonzada terminó rascándose la nuca.—¿Es mi imaginación o te he visto en algún lado?

_...Puede que no lo imagines.—Habiendo tocado el tema, entrecerró los ojos al verla.—Siento que te he visto en otro lado también.

—¿Eh?, ¿En serio?

—Ryū, la escuela, el vídeo.—Señaló Rouse.

—Oh.

Ahora lo recordaba, esta chica apareció justo en el momento en que el profesor les habló sobre la Mega-Evolucion.

Lo que quiere decir.

"Vaya... Esto puede ser un poco más complicado que antes." Ahora estaba prestando especial atención al guante en el que la rubia tenía puesta su Piedra Activadora, se sentía un poco emocionado, sería la primera vez que viese una Mega-Evolución por su propia cuenta y ya sabiendo a que Pokémon pertenecía, las ansias le estaban ganando.

—¿Que tal si vienen y comemos algo?

—¡Ahuevo que si!—Gritó Arata.

—¿Ryū?

—Ah, si, está bien.

—La pizza de don cangrejo es lo mejor para ti y para mi~.—Canturreó Akashi.

—Ja, ja, ja, ja, comprendo.

Guiados por Korrina buscaron el primer sitio de comida que vieron y luego de una cerrada votación -no realmente- se decidió que de verdad almorzarian con pizza, mientras tanto...

—Ryū... ¿Cierto?

—¿Qué pasa?

—Bueno, es que de verdad tú rostro me suena de algún lado.—Y otra vez con el tema.

De verdad eso le estaba comenzando a fastidiar, pero por más que quisiera alejar a las cámaras es mucho más difícil cuando llevas contigo a una jodida leyenda.

—¡Oh, acabo de recordarlo!—Dijo simulando que su puño derecho era un martillo que choco con su palma contraria.—Hace poco Diantha fue vista en ciudad Lumiose con un chico de cabello blanco, luego de eso todos lo reconocieron como el entrenador de Raikou, el Pokémon Legendario!

—...

Al escuchar aquello inmediatamente Rouse y Bea saltaron hacia Ryū, por diferentes razones.

—¡¿Es enserio?!, ¡¿Qué pasó con eso de no llamar la atención?!

—No fue mi intención, lo juro...

—¡Estamos hablando de la mismísima campeona Ryū!—Dijo mientras lo sacudía, de seguir así pronto habría pizza en la mesa, pero a medio digerir.—Oh, claro, esto se pondrá mucho más molesto.

—¡¿Llevas contigo a un Pokémon Legendario?!—Y esa era Bea.—¿Como no me di cuenta? Y ¡¿Por qué no me lo dijiste?!

—Es... Complicado.

Y justo por eso le pidió a Raikou que se mantuviera alejado de su "Campamento" hasta la mañana cuando pudiera llevarlo dentro de su Ultra Ball, sería demasiado para explicar considerando que ella es una líder de Gimnasio.

Oh si, y ahora todo el mundo los estaba viendo, yeei.

—Por favor sean más dis-

—¿PODEMOS VERLO?—Dijeron ambas líderes al unísono, muy fuerte y muy, muy cerca del albino.

"Rin-"

("No sé usar teletransportación por si acaso, estás solo en esto.")

Y ahí iba su última esperanza, no había salvación para el definitivamente.

—Aquí no, llamaríamos la atención.-Señalo hacia su espalda, haciendo que todos notarán la exagerada cantidad de entrenadores observando los.—Más de lo que ya lo han hecho...

—¡Entonces vamos a la Torre!

—¡AWAAAAAANTA!

De una forma u otra estaba siendo arrastrado -literalmente- a toda velocidad por dos líderes de gimnasio hacia el atractivo más grande de toda la ciudad y del Gimnasio en si, la Torre Maestra.

"¿Huh?" Una estatua, una enorme estatua de un Lucario fue colocada en el centro de la torre, llamaba demasiado la atención, aunque para su situación no pudo verla demasiado tiempo para percatarse de los detalles.

Le estaba comenzando a doler el trasero.

"Los dejaron atrás." Se sentía un poco desprotegido ahora, y su incomodidad no estaba ayudando para nada. Todo eso estaba comenzando a fastidiarlo de verdad.

—¡Muestra, muestra, muestra!

Ellas estaban volviéndose fastidiosas.

—Ha... Laxus, por favor...

Cómo respuesta a su llamado una masa totalmente cubierta de electricidad salió de la única Ultra Ball en su cinturón, después de reconocer sus alrededores Raikou miró a su entrenador, quien estaba frunciendo el seño y luego a las dos chicas que tenían su atención puesta únicamente en él.

(Me asustan.)

"Tienes razones supongo." Casi suelta un chillido cuando esas dos gritaron de emoción para luego saltar a acariciar al Pokémon legendario.

Le sabía mal dejar a Laxus en esa situación, pero de verdad que no estaba para esas cosas.

—Iré a preguntar dónde nos podemos quedar, avísales a los demás...

(Eh... Está bien.)—Intimidado por las entrenadoras y comprendiendo que su maestro no se encontraba de ánimos optó por quedarse quieto.

El albino se fue, pero antes de eso lanzó todas sus balls al aire para que sus Pokémon pudieran estirarse un rato, siendo el único que decidió seguirlo su Pokémon inicial. Los demás no entendían que sucedía, por lo que solo se quedaron viendo como Raikou sufría.

Eventualmente el resto del grupo llegó.

—¿Laxus? De verdad hicieron que lo dejara pasearse por aquí...

—¿Dónde está Ryū?—A Rouse esas cosas le daban igual, ella estaba preocupada por otra cosa.

—Ah... Estaba aquí hace un segundo...—Reaccionando apenas y dándose cuenta habló Bea.

—No puede haber ido muy lejos, no conoce la ciudad.—Afirmó Korrina.—Tal vez solo fue a pasear.

—...Tal vez.

—Rouse, ¿A dónde vas?—Le cuestionó el Pelirrojo.

—Cuiden de los Pokémon de Ryū, iré a revisar que esté bien!

Los gestos de confusión no se hicieron esperar, mientras tanto Laxus aprovechaba que ya no lo estaban molestando para acercarse a sus compañeros de equipo.

(Laxus, ¿Qué pasó aquí?)

(Su Majestad dijo que buscaría alojamiento, pero la verdad es que parecía que solo quería despejarse.)

(¿Despejarse?)Dijo Nova ladeando un poco la cabeza.

(¿En serio no lo han notado?)Intervino el Charizard.—(Nuestro entrenador ha estado muy sensible últimamente, aunque no ha dicho nada por no preocuparnos. La cosa es que definitivamente algo le ha estado molestando.)

(Ahora que lo dices...)Deku se cruzó de brazos mientras recordaba algo.—(Él y Ryuga han estado bastante irritables al entrenar...)

(Eso es de lo que hablo.)

(¿Pero por qué no hablarlo con nosotros o con esa cosa que siempre nos sigue?)Ahora Noivern también quería hacer parte de la conversación.

(Hay cosas que la gente prefiere guardarse para si mismos... Aunque corran el peligro de estallar más tarde.)

Todos asintieron de acuerdo con las palabras del legendario, además de coincidir en que tendrían que preguntarle directamente a él que era lo que le molestaba más tarde.

Mientras esa conversación terminaba, a las afueras de la ciudadela se encontraban el albino y su dragón mirando al mar, si supieran que le estaban dando la razón a Laxus al dudar seguramente Ryū se reiría, pero no estaba para esas cosas.

—¿Estás bien?

(Eso debería preguntarte lo yo.)Respondió con el tono confiado que usualmente tienen con el otro.—(Actúas extraño desde que fuiste con ese tipo rubio.)

—Ah si... Es algo complicado.—Un suspiró fue la única acción que encontró para aligerar un poco el ambiente.—Trato de hacer como que no está pasando nada, pero de verdad estoy preocupado.

(Comprendo... Es difícil de contar.)

—¿Y que tal tú? ¿Solucionaste ya el asunto con Nejire?

—El dragón terminó por suspirar también.—(Estamos igual... Pero la verdad no tengo ánimos para tratar de explicarle que no dije todo eso con esa intención.)

Ryū soltó una risa por lo bajo e invitó a su Pokémon a qué ambos se sentarán en la arena, cosa que pasó casi inmediatamente.

El ruido de las olas siendo arrastradas por el viento para al final chocar con la arena era bastante relajante para ellos. Estuvieron en silencio un buen rato, solo observando las olas y a los Pokémon tipo agua que entraban y salían del agua ocasionalmente sin perturbar su tranquilidad, hasta que el Gabite habló nuevamente.

(Ryū... Me siento extraño.)

—¿Huh?—Este levantó una ceja, intrigado.—¿A qué te refieres?

(Es... Difícil de explicar.)

Hah, los asuntos difícilmente explicables se estaban haciendo muy habituales para ellos, no estaba bien, no les gustaba en absoluto, es molesto.

(Me siento muy enojado por cualquier cosa, quiero romperlo todo pero...)

—Luego te sientes sin energías.—Completó la oración, Ryuga lo observo fijamente. Él tenía la vista fija en el cielo, dejándose golpear por el viento.—Comprendo a que te refieres, porque a mí me ocurre lo mismo...

Pokémon y Entrenador, se necesitan el uno al otro la mayor parte del tiempo para funcionar correctamente, una relación simbiótica.

El problema de eso, especialmente con estos dos, es que cualquier problema que tenga uno le va a afectar al otro.

Lo quieran o no.

—El albino suspiró, dispuesto a tratar de dejar eso atrás, aún si fuese solo por un momento.—Mira... Mañana seremos los primeros en retar a Korrina, ella parece ser el primer reto real en todo este viaje, así que no podemos tomarnoslo a la ligera.

(Entiendo.)

Ambos se colocaron nuevamente de pie, mirándose el uno al otro, reflejándose mutuamente en sus ojos.

—Tú, yo... Acnologia, Deku, L-Drago, Fenrir, Nova...—Con una brillante y cálida sonrisa el albino avivó el espíritu competitivo de su Pokémon, golpeando su pecho con firmeza.—Démoslo todo, para superar esto sin importar que pase, ¿Si?

—Una afilada y determinada sonrisa fue lo que recibió a cambio.—(¡Por supuesto!)

—El entrenador sonrió de lado.—Ese es el espíritu amigo.

Ryū se puso de cuclillas con tal de quedar a la altura de su Pokémon, así este extendió su puño hacia él, Ryuga lo miró un momento, hasta que él decidió hablar otra vez.

—Ryuga, ¿Que tal si tú y yo hacemos una promesa justo aquí?

—...

Las olas golpeaban con fuerza la orilla, el tono dorado del cielo marcaba el preludio a lo que sería el ocaso, una vista hermosa, perfecta para el sentido que el de ojos rojos cual sangre quería darle a sus palabras, la visión perfecta para hacerle llegar a su amigo toda su voluntad.

—Ryuga...—El ambiente entero quedó en completo silencio por un momento.

Era como si el mundo le diera luz verde.

Lo agradecía.

—¡Seamos los más fuertes!

(¡Si!)Una respuesta inmediata, sin rastro de duda.—(¡Seamos los únicos en la cima!)

Todo continuó con su curso natural.

Solo el viento y las olas habían sido testigos de aquella declaración en busca de un poder que supere al de todos los demás.

O... Realmente no fue así.

—...

Rouse estaba de pie a unos metros de ellos, no se habían percatado de su presencia, pero lo seguro ahí, es que ella escuchó absolutamente todo, y es necesario decirlo.

Se sentía feliz.

"De verdad me preocupas te, pensé que querías abandonarlo todo... Ya veo que todo iba por el camino contrario." Sonrió enternecida, pocas veces podía ver a Ryū ser tan expresivo, como siempre esto únicamente pasaba con sus Pokémon, mentiría si dijera que no se sentía celosa, pero por esta vez, bajo esos términos. "Espero que sigas avanzando aún más."

Era justo lo que necesitaban.

—...¿Pasa algo?

—Ah...—Se había perdido en sus pensamientos, para cuando volvió a la realidad tenía a Ryū parado justo frente a ella mientras pasaba su mano cerca a su rostro.—Oh, de hecho... Solo quería ver si estabas bien.

—Entiendo.

Si algo era rápido en este mundo, era la forma en la que Ryū pasaba de una parte de su personalidad a otra, como en este momento donde nuevamente volvió a ser el chico callado y de pocas palabras que siempre ha mostrado ser.

De nuevo, este solo dejo la conversación ahí y pasó a un lado de Rouse, dirigiéndose otra vez a la Torre Maestra. Ryuga seguía caminando junto a él, aparentemente normal, pero al pasar a un lado de Rouse se alcanzó a escuchar -o por lo menos para aquellos en Pokeballs- que susurró algo.

(Lo lamento.)

Rouse se extrañó al sentir como una de sus balls se sacudió por un momento, pero no tuvo tiempo de ver cuál de todas fue.

Ryū mientras tanto, había dejado de ver al frente para observar la palma de su mano derecha mientras caminaba.

Aquel cosquilleo e incomodidad seguían ahí, pero a este punto ya no planeaba darle importancia.

"Ya no importa."

O bueno.

Eso creyó en su momento, pero después, después eso de verdad se convirtió en un problema serio para él y para sus Pokémon.

Y no es tan descabellado pensar en ello, ya que...

Este chico no es una persona normal.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆

Ni siquiera sé cuándo publique esto, pero awebo.

En el siguiente capítulo ya sabrán porque tanta insistencia con las irregularidades en el cuerpo de Ryū, es importante para este momento y para algo más adelante en la trama.

Por cierto, se que no hay imágenes de los personajes principales y eso es mi culpa, olvide completamente describirlos al menos, pero ya después del Gimnasio voy a arreglar ese asunto, lo prometo.

Y bueno, nos vemos después.

¡Gotta Catch 'Em All!

Continue Reading

You'll Also Like

39K 4K 53
Un mundo donde la humanidad es repudiada, oprimida y aislada en un continente donde son tratados como ganado por otros razas, ¿Que pasaría si la Alem...
557K 75.4K 45
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ¿Un embarazo? ¡Imposible!
151K 5.4K 32
Desde que Mi Tía May murió y Mary Jane me abandono por Flash. Me quedado solo sin ayuda en el mundo de los superhéroes soy solo una burla, Para JJ...
111K 6.5K 65
Bien muchachos déjenme decirles lo que piensa Kakashi Hatake.....¿Me preguntan si el nuevo jefe militar y futuro Hokage les puede dar una vida de mis...