CAPITULO .64.
QUÉDATE TODAS LAS NOCHES
(EN EL APARTAMENTO DE LOS CHICOS)
(CONTADO POR TINI)
Cuando Mechi se fue a su habitación nosotros seguimos viendo la película, después de un buen rato cuando acabó me levanté del sofá y en cuanto lo hice Jorge me preguntó:
· ¿Dónde vas?
· Al baño.
· Vale, cuando vengas de vuelta ¿puedes traerme el móvil?, lo dejé cargando en mi habitación.
· De acuerdo, no me tardo.
· Cuando vuelvas si quieres nos vamos, que ya se va haciendo tarde.
· Vale – LE DIJE ANTES DE IRME –
Cuando salí del baño fui directa a la habitación de Jorge, la verdad es que me recordaba bastante a su habitación de México, había mucha música, su guitarra estaba sobre la cama, supuse que la habría estado tocando, la cogí entre mis manos y ese simple hecho me hizo recordar cada lugar de la gira, ese instrumento había sido nuestro compañero, nos había hecho vivir momentos únicos y especiales, cientos de veces me había relajado escuchando tocar a Jorge...
· Tardabas demasiado pero ya veo que estás en compañía de mi guitarra.
· Solo la cogí porque la vi sobre la cama.
· Le estuve cambiando las cuerdas.
· Pensé que habrías estado tocando.
· No, solo le cambié las cuerdas y la afiné.
· Me gusta como te quedó la habitación.
· No te vayas – ME DIJO CAMBIANDO DE TEMA –
· ¿Cómo?
· No te vayas esta noche.
· ¿A qué te refieres?
· Quédate a dormir conmigo hoy.
· Jorge...
· Quédate, no quiero que te vayas.
· ¿Por qué?
· Porque quiero dormir contigo, quiero abrazarte toda la noche y quiero despertar mañana y que estés aún dormida sobre mí.
· Jorge...
· No te vayas.
· Esto ya me lo advirtió mi madre.
· ¿El qué?
· Lo de que pasaría las noches aquí.
· ¿Eso es un sí?
· Es que me lo has pintado tan bonito que no puedo negarme.
· Vamos a decirle a Cande que te quedas.
· ¡ES VERDAD, CANDE!
· ¿Qué pasa?
· No puedo quedarme, no puedo permitir que Cande se vaya sola.
· ¡NO ME FASTIDIES!
· Si Jorge.
· No me digas eso, yo quiero que te quedes.
· Y yo quiero quedarme, pero mi amor, no puedo dejar a Cande sola.
· Está bien – ME DIJO DESILUSIONADO –
· Lo siento mucho.
(EN EL SALÓN)
(CONTADO POR TINI)
Cuando llegamos al salón Cande y Rugge estaban de lo más acaramelado, ambos se besaban sin interesarse por nuestra presencia y si no hubiese sido por el golpe de broma que dio Jorge sobre la mesa ellos no se hubiesen separado...
· Lo sentimos – DIJO CANDE –
· Por sus sonrisas no es muy creíble – DIJE –
· Tini...
· Dime – LE DIJE A RUGGE –
· ¿Jorge, te podría acompañar a casa?
· ¿Por qué? – PREGUNTÓ ÉL –
· Porque Cande no se quiere quedar a dormir porque dice que no va a dejar a Tini irse sola.
· Pues si ese es el problema creo tener la solución – DIJO JORGE SONRIENDO MUCHO –
· No me gusta esa sonrisa – LE DIJE –
· ¿Qué pasa? – PREGUNTÓ CANDE –
· Le dije a Tini que se quedase a dormir, pero como tú, no quería que te fueses sola a casa.
· ¡OH, Gracias amiga! – ME DIJO CANDE –
· Igualmente.
· Bueno ya que sois tan amigas y que quedó claro que ninguna dejaría a la otra irse sola, se pueden quedar las dos – DIJO JORGE –
· Eso iba a decir yo ahora mismo – DIJO RUGGE –
· Tengo que avisar a mi madre – DIJE –
· Y yo, después de todo dije en casa que iría a dormir – DIJO CANDE –
(CANDE Y RUGGE)
(CONTADO POR CANDE)
El hecho de que Tini se quedase con Jorge a dormir me abrió las puertas de la habitación de Ruggero, cuando nos habíamos quedado a solas él me había dicho que me quedase con él, pero tenía que reconocer que, aunque estaba deseando hacerlo, no podía dejar que Tini se fuese sola para casa...
· ¿En qué piensas?
· En Tini.
· ¿Y por qué no mejor piensas en mí?
· Aun no me creo que te hayas quedado en Buenos Aires.
· Pues aquí estoy y te aseguro que no lo hice solo por el trabajo, porque, aunque sea cierto que Argentina me dio lo que Italia no, no solo me decidí a quedarme aquí por mi carrera y mis sueños.
· Tú gran sueño es triunfar con la música.
· Il mio grande sogno sei tu.
· Entonces, sueño cumplido – LE DIJE ANTES DE DARLE UN TIERNO, PERO ROMANTICO BESO -
(HABITACIÓN DE JORGE)
(CONTADO POR TINI)
Tras despedirnos de los chicos, Jorge y yo nos fuimos a su habitación, en cuanto estuvimos allí me senté encima de la cama, mi chico empezó a mirarme de forma penetrante y aunque sabía perfectamente lo que quería decirme con esa mirada preferí dejarle jugar...
· ¿Piensas acostarte con la ropa puesta?
· Puede.
· No lo creo.
· ¿Por qué no?
· Porque no.
· No traje pijama.
· No te hará falta.
· ¿No?
· Entre mis sabanas nunca te va hacer falta pijama.
· Pero puedo coger frío mientras duermo desnuda.
· No cogerás frío porque te voy a mantener entre mis brazos toda la noche.
· La verdad es que no me apetecía nada irme.
· No pensaba tampoco dejarte ir.
· Me hubiese ido si Cande no se hubiese quedado.
· Ya me las habría apañado para hacer que Ruggero hubiese acompañado a Cande.
· Pero Rugge no tiene carnet.
· Existen los taxis.
· Blanco...
· No quiero seguir hablando de como Cande se hubiese ido a casa.
· ¿Y de qué quiere hablar el señor Blanco?
· Directamente el señor Blanco no quiere hablar.
· ¡Qué lástima!, con lo parlanchina que estoy yo.
· Pues tranquila porque sé muy bien como callar esa boquita parlanchina que tienes esta noche.
· ¿Cómo sería eso?
No pude hablar más, Jorge se había subido a la cama haciendo que mi posición pasase de estar sentada a tumbada y su boca se había hecho con la mía cuando no habían pasado ni dos segundos...
(CONTADO POR JORGE)
Todo con Tini era nuevo y aunque pasase el tiempo me seguía sintiendo como el primer día, me encantaba estar con ella en todos los sentidos y me volvía loco rozar su suave piel con mis manos; cuando la tenía casi prácticamente agotada y dormida sobre mi me acerqué a su oído, le aparte el enredado pelo y le dije muy bajito:
· ¡Quédate todas las noches!