Sicheng continuaba con el ceño fruncido mientras buscaba su calcetín derecho, que por cierto, juraba Yuta lo había escondido para hacer tiempo.
—Por favor, Sicheng. Quédate—Yuta se tiró bocabajo a su cama y Sicheng sacó su cabeza de debajo de la cama que había Sido usada anteriormente por ambos.
—Hyung. No pienso quedarme a ser humillado y avergonzado por los chistes de Chenle frente a tus padres. Además, deberías hablar con ellos y po-ponerlos al día—Terminó de decir con las mejillas calientes y ojos cristalinos.
—Por favor~—Suplicó el alfa siendo más tierno de lo normal.
—Ser lindo no funcionará esta vez, Nakamoto Yuta—Sicheng se puso de pie—Y quiero mi calcetín ahora mismo—Estiró su mano hasta el alfa en espera de su prenda.
Yuta bufó y se levantó de prisa, caminó a su taburete y del tercer cajón sacó el calcetín blanco con pequeños perritos de hoodie amarillo.
—Aquí está—Le entregó al rubio su calcetín y éste prosiguió a ponérselo. Con zapatos puestos, caminó hasta Yuta quién se encontraba con la mirada clavada en el piso y un puchero en los labios.
—Hyung...—Sicheng besó los labios del mayor—No quiero incomodar, es una reunión familiar íntima.
—Tú ya eres de la familia—Sicheng abrazó al Moreno por el cuello.
—¿Qué te parece si hablas con ellos de mí y mañana desayunamos juntos con Lucas?—Besó la mejilla del alfa mientras asentía.
—¿Prometes que desayunaremos juntos?—Frunció los labios y Sicheng lo besó una vez más.
—Lo prometo, alfita~—Yuta lo tomó por la cintura y lo acercó a su cuerpo.
—Eso hiere mi orgullo de alfa ¿Sabes qué es lo que pasa cuando un omega ofende a un alfa?—Preguntó Yuta juguetón y con una ceja alzada.
—No tenemos tiempo, tus padres llegarán en cualquier segundo y debo desaparecer de aquí. Te veo mañana.
—Te amo—Dijo perdido en los ojos de Sicheng.
—También yo, hyung~—Restregó su nariz contra la de su alfa.
Los padres de Yuta llegaron puntuales, algo que no era para nada extraño en ellos. La pelinegra omega, madre de Yuta corrió con los brazos abiertos hacia su moreno hijo. Mientras su padre alfa, sonreía a lado de Chenle a la vez que inspeccionaba el apartamento de su hijo, a pesar de no estar con él desde pequeño, lo amaba igual que a Chenle.
—¿No hay un abrazo para tu padre?—Preguntó el señor Zhong y Yuta sonrió y negó con la cabeza.
—No te lo mereces, papá—Comenzó a caminar hacia el hombre—Mira que mandar a Chenle a vivir conmigo...—Chasqueó la lengua y los cuatro rieron divertidos.
El padre tomó a Yuta por los hombros y lo acercó a él en un abrazo fuerte y firme. El señor Zhong detectó el notorio aroma de un omega en Yuta y sonrió aún más.
¿Así que a esto se refería Lele con "No quiero estar en el apartamento de hyung ¿Qué pasará cuando forme su propia familia? ¡Necesito mi propio apartamento, papá!-Pensó el señor Zhong.
La madre de Yuta estaba tan adentrada en escuchar las historias de Yuta en el estudio como para prestar atención a los repetidos "Sicheng" que salían de su boca y el dulce olor que adornaba el hogar de su hijo mayor.
—¿Quién es ese tal Sicheng?—Preguntó su padre interrumpiendo una de sus historias.
—Él es mi omega—Soltó atento a las reacciones por parte de los adultos.
—¡¿Tú qué?!—Se levantó del sofá la pelinegra de cabello corto—¿Estás bromeando, Nakamoto Yuta?—Lo miró con los ojos entrecerrados—No es posible...—Habló escandalizada y los Zhong sólo soltaron un suspiro y cruzaron sus piernas—¡¿Cómo es que me voy enterando de que tienes un omega? ¡Me siento tan ofendida!
—No es para tanto, mamá...
—¡Sí lo es! ¡¿Y en dónde está?!—Dijo sonriendo por fin.
—Tranquila, mamá—Comenzó Lele—Debe estar limpiándose después de-
—¡Lele!—Gritó Yuta con mejillas coloreadas y entrecejo fruncido—Tuvo que irse, mamá. Pero me dijo que con gusto desayunará mañana con nosotros—Sonrió a sus padres y ambos asintieron contentos.
—¿Es un buen chico?—Preguntó el señor Zhong.
—Es un niño, papá. Siempre está aquí metido jugando con su teléfono. Y es como diez años menor que Yuta—Dijo divertido.
—¡Nakamoto Yuta!—Exageró su madre y Yuta quiso arrancarle la cabeza a Chenle
—Déjame ver si entendí—Dijo Sicheng a Jisung quién había ido a visitarlo para perder un poco el tiempo—Chenle comenzó a salir con Irene...—Jisung asintió—Pero tuviste un ataque de celos y-
—¡Diferencias personales con Chenle!—Interrumpió al rubio.
—Sí, claro eso—Sicheng rodó los ojos—Entonces amenazaste a Irene para que se alejara de Lele—Jisung asintió una vez más—Pero Yangyang se enteró y te pidió que se dieran un tiempo...
—¡Y ayer ví a Yangyang besándose con Irene en la fiesta de Xiaojun!.
—¿Entonces ya tienes el camino libre con Lele?—Sicheng rió y se ganó un golpe en la cabeza por parte de su amigo—Lo siento, Jisung-ah. Pero es muy divertido, además—Se tiró más cerca de Jisung—A Chenle también le gustas—Se ganó otro golpe por parte del omega.
—¿Por qué insistes con eso?—Preguntó Jisung y Sicheng sonrió
—Él siempre se la pasa hablando de qué tan difícil eres... También dijo que te invitó a salir después de dejar de ver a Irene y lo rechazaste.
—¡Porque no seré el plato de segunda mesa!—Se quejó el más pequeño y Sicheng negó con la cabeza.
—No eres su plato de segunda mesa, eres su platillo principal y su postre y su-
—¡Yah~!
—¿Por qué no vienes a desayunar mañana con nosotros?—Preguntó Sicheng y Jisung lo miró con una ceja alzada.
—¿Por qué debería? Yuta y tú son demasiado empalagosos ¡Iugh—Exageró.
—Porque verás a Chenle y... Porque conoceré a los padres de Yuta ¡No quiero estar solo allí!—Se tapó la cara con sus manos y rodó sobre su cama provocando ternura a su amigo.
—Iré sólo para darte apoyo moral ¿De acuerdo?.
—¡Eres el mejor, Jisung-ah.
Los dos omegas se acomodaron en la cama del mayor y durmieron cómodamente hasta la mañana siguiente
—¡Chenle!—Gritó su progenitora y el peli verde bufó.
—¡Él comenzó!—Se defendió y su padre negó con la cabeza escondiendo una sonrisa.
El desayuno estaba a punto de terminar, la madre de Yuta era el vivo retrato del alfa y el señor Zhong era realmente atractivo y lucía como todo un alfa hecho y derecho.
Sicheng había terminado con sus nervios después de que su suegra apretujara sus mejillas y llenara de cumplidos sus oídos. "Sigo sin entender qué fue lo que le viste a Yuta ¿No te está obligando a nada, verdad?" Decía la omega con cabello negro y lacio, Sicheng no hacía nada más que reír y recibir malas miradas por parte de Yuta por seguirle el juego a su madre.
Cuando estaban a punto de terminar el postre, el mesero se acercó a Jisung para darle una servilleta de papel con algo escrito, para la mala suerte del mesero, Chenle tenía una vista aguda que le había permitido ver el número telefónico en el papel que sostenían las manos de Jisung. Chenle se levantó, tomó la servilleta de manos del omega y se la comió.
—¡¿Y me puedes explicar qué fue lo que hice?!—Preguntó Jisung aún sorprendido por las acciones del alfa.
—¡No debes coquetear con otros cuando sales conmigo!—Gritó y su madre tomó asiento de nuevo disfrutando de la intrigante situación.
—¡No estamos saliendo, Chenle!—Reprochó Jisung.
—¡¿Cómo te atreves a decir que no estamos saliendo?!—Contestó.
—Chenle...—Dijo Jisung más calmado.
—¡Eres el chico más lindo con el que he tenido algo en mi mente!—Dijo Lele y salió del restaurante bajo la atenta mirada de los demás comensales.
—¿Debería ir?—Preguntó Jisung a Sicheng después de ver a Lele salir.
Después de que Jisung salió en busca del alfa, Yuta, Sicheng y sus suegros decidieron que era una buena idea ir al supermercado y pasar toda la tarde. Por otro lado, en el apartamento de Yuta, Chenle y Jisung se encontraban haciendo realidad los pensamientos que ambos habían tenido del otro; Se reconciliaron y amaron.
—Sigo pensando que la mordida no era necesaria, mamá va a matarme cuando me vea—Habló Jisung con la cabeza recostada en el pecho del
alfa.
—Mi mamá también va a matarme cuando te vea, Jisung-ah—Lele rió y Jisung golpeó su pecho.
¿Quién es su bias de tus poderosisimos Nct raza?
El mío desde un principio fue Ten, pero luego fue Haechan... Y Hace 1 año ya me quedé Totalmente con Hendery... Es mi Ult bias de todos los que tengo, me trae pendeja el vato