Ahí estaba Isabelle transformada en mujer lobo, sus ojos azules electrico brillosos y sus garras. Fue gracias a la herida en su pierna que hizo esto.
—Isabelle ¿Me oyes? —le pregunto. —No quiero pelear contigo.
Veo que quiere atacarme, no sabe lo que hace, es la luna llena que habla y ella comenzó a rugir para luego comenzar a acercarse.
—No usaré mis flechas contigo. —le dije quitandome mi mochila con mis flechas. —¿Quieres pelea? —le pregunto. —Pues pelea tendrás.
Me transforme en Alfa, ella era bastante fuerte estando fuera de control o no. Ella se abalanzó a atacarme, lo esquivé y así fue, intercambiando golpe tras golpe. No pensaba usar me íra con ella por dos razones: la primera de ellas es por que es mi hermana y la segunda no soy de los que utilizan la íra con las mujeres.
—¡¡Isabelle detente!! —le pedimos yo y mi lobo, ambas voces.
Ella no me respondía.
—¡¡Porfavor detente!! —volví a pedirle.
Esta vez la golpeé alejandola de mí, cayó al suelo, escuché un ruido proveniente de afuera por lo que supe que era una patrulla, la policía había llegado. Escuché una respiración agitada, miré al frente a mí, ví que mi hermana estaba en el suelo, era ella la que estaba respirando de forma agitada, al parecer con el ruido de la patrulla volvió a la normalidad.
—Alec... —me llamó mi hermana para luego mirarme, cuando me miró estaba sudada. —¿Que me pasó?
La levanté porque se desmayó, ví que la herida que el Alfa le hizo se había curado.
La cargué entre mis brazos para luego bajar hasta abajo y ahí estaban los policias allí con los demás, el alguacil del departamento me vió y luego se acercó hacia mí para hacerme un interrogatorio como quien dicen.
—¿Que le pasó? —me preguntó el alguacil.
—Solo se desmayó, nada gráve. —le expliqué.
De repente escuché que mi hermana estaba despertando el lo notó a lo que yo la bajé de inmediato.
—Supongo que no tiene mas preguntas. —le digo al padre de Stiles.
—No, volveré pronto con mas preguntas, joven High, no se valla de la ciudad. —me dijo para luego irse de allí.
Ya estando los dos solos.
—Iré en el camaro de Derek si es que lo encuentro. —me dijo Isabelle.
—Hablando de Derek, lo acabo de ver antes debió entrar con Allison a la escuela, estaba en el suelo y salía sangre de su boca ¿Porque fue? —dije.
— Pues fue el Alfa que lo atacó y lo lanzo por ahí pero... —comenzó a explicar y ella miró en dónde debería estar Derek. —Un momento... No está, ya no está.
—Me acabo de dar cuenta. —dije mirando en su dirección
—Como sea si lo encuentro le diré todo lo que Scott les dijo allí dentro. —dijo Isabelle para luego comenzar irse. —Pero antes quiero decirte algo y una pregunta... —se detuvo.
—¿Que? —le pregunté.
—No le diré a mamá sobre tu relación con Érica. —comenzó a lo que ella me sorprendió. —Tú mismo lo harás así como lo hiciste conmigo, si, ella es 5 años menor que tú, veo que al parecer no te importa eso de la edad, ni la apariencia de ella por eso estás con ella. —siguió Isabelle. —¿Quieres saber cuál es mi respuesta? Mi respuesta es... Espero que tú la hagas feliz a ella y ella a ti, no me voy a meter en su relación, no voy a interponerme, es todo lo que te voy a decir. —concluyó. —Adiós hermanito. —se despidió.
Ella seguíse fué en el auto de Derek, me acerqué a Allison quien pude notar su dolor.
—Llamé a papá para que me llevé a casa y le explicaré todo y le diré que no me quitaste la vista de encima. —me explica Allison. —Ahora quiero estar sola, no quiero ver a Scott.
—Entiendo, entoces te veré en la casa, si quieres hablar aquí estoy. —le dije.
Ella asintió y me fuí de allí pero justo en ese momento llegó Scott hacia dónde estaba ella, yo solo me limité a alejarme de allí, de repente a mi olfato le llegó un aroma el cual me resultó muy conocido.
Érica
Ese es el aroma de ella, ¿Que hace ella aquí? Miro para los lados y la veo escondida detrás de un árbol, veo que se estaba alejando, me pareció una señal de que quiere hablarme por lo que la seguí discretamente hacia un pequeño callejón.
—Érica ¿Que hacias en la escue....
No pude terminar ya que sentí sus brazos envolverme, me e, cosa que me sorprendió de inmediato, no dude en corresponderle y me separé para mirarla fijamente.
—¿Que hacias por la escuela? ¿Que hacias allí? —le preguté preocupado mientras ponía mis manos en sus mejillas.
—N... No respondías a mis mensajes, quería hablarte en persona. —dijo Érica un poco nerviosa.
—¿Mensajes? —le pregunte confundido.
Y ahí fue cuando ella sacó su teléfono dejando ver los mensajes y yo saqué el mío y era cierto me había dejado mensajes y no me había dado cuenta.
—Érica... Hay muchas cosas que no es el momento de hablarlas pero lo único que te puedo decir era que buscaba a mi hermana quien me dijo que estaba allí con ellos mientras hay una bestia suelta. —le dije.
—T... Te v.. ví con... Allison creo que se llama y....
—Es porque trabajo para su padre, me dejó acargo de ella y solo estoy ahí por un negocio de armas. —le explico.
—¿Y el arco y las flechas? —me preguntó.
—Practico arquería. —le digo.
Por un momento Érica se quedó callada, había notado un poquito sus celos cosa que me pareció graciosa y a la vez tierna, tierna porque es primera vez que ella se pone celosa.
—Vamos, Eri... —la beso y la alzo para que estuvieramos a la misma altura, ella por instinto abrazara mi cintura con sus piernas y abrazara mi cuello. —No te pongas celosita, ella no es mi tipo.
—¿S.. Seguro? —me preguntó.
—Estoy muy seguro. —le dije. —¿Te llevo a tu casa?
Ella asintió, nos fuimos en mi moto que la estacioné un antes de llegar a la escuela, para luego ir a mi moto.
La subí en la parte delantera del motor para irme a su casa en una velocidad adecuada para ella. Durante el camino me he estado preguntando...
"¿Como ella supo que estaba en la escuela?"