El moreno alfa peli castaño ya estaba en su auto de camino al estudio, el día anterior había faltado y estaba dispuesto a recuperar esas valiosas horas de producción musical que ya había perdido por culpa de sus vecinos.
—Ah Dong Sicheng...—El alfa soltó un suspiro mientras detenía su auto por causa de una luz roja en el semáforo.
La noche anterior después de que el pequeño omega se fue de su departamento, se quedó un rato más en el balcón mirando el cielo y de vez en cuando echaba un vistazo a la ventana del omega rubio mientras se repetía mentalmente las palabras que había dicho "Desde aquí
fácilmente podría ser espiado ¿no cree? Incluso sería aún más fácil con binoculares" Y Yuta se fue a dormir con ese pensamiento en su mente.
—Bien, tú ganas—Habló a su alfa— Compraré esos binoculares más tarde—Y así pudo calmar a su alfa que estaba inquieto.
—¡Yuta!—Johnny le saludó cuando vio que el peli castaño entraba al edificio.
Paró el elevador y Yuta corrió hasta él para alcanzarlo. Johnny tecleó el número del piso al que iban y las puertas se cerraron.
—¿Cómo te fue ayer con Sicheng?— Preguntó el de cabello café.
—Sólo comimos un poco de la tarta que trajo y vimos el atardecer y sólo eso.
—Sólo eso... ¿nada más?—Preguntó con una ceja alzada y Yuta negó con la cabeza—Amigo, era un omega, solo en tu departamento, llevandote comida hecha por él ¿y no pasó nada?.
—Johnny, te lo dije él tiene un alfa y-
—No vi ninguna marca en su cuello.
Ambos bajaron del elevador y caminaron hacia sus respectivas oficinas quedando de acuerdo para comer. Yuta entró a su estudio-oficina y notó que había una presencia muy peculiar.
—¡Por fin llegas! Llevo casi diez minutos esperando por ti ¿la edad te está volviendo lento, hyung?—Dijo el delgado y peli verde alfa sentado en su silla acolchonada.
—¿Chenle? Oh no, dime que no estás aquí por lo que creo que estás aquí— Dijo preocupado el mayor.
—Así es, tu hermanito oficialmente está inscrito en la universidad.—
Y esa noticia causó un ligero mareo en el peli castaño Zhong ChenLe era su medio hermano, después (mucho después) de la muerte de su papá, su mamá volvió a sonreír cuando por casualidades del destino se encontró con el señor Zhong, un alfa alto, tez pálida, fuerte y sobre todo protector. Luego de mantener una relación vino el nacimiento de Chenle todo era nuevo para Yuta, incluso tenía que compartir sus cosas y lo más importante, Yuta no quería compartir a ninguno de sus padres.
Chenle y Yuta eran muy diferentes. Demasiado, Chenle era un alfa valiente, protector, con un increíble cuerpo marcado y con una personalidad divertida, siempre había omegas detrás de él, día y noche.
Yuta era un poco más tímido, con cuerpo delgado, piel morena y suave, personalidad calmada y sobre todo, él nunca tenía omegas detrás de él.
—¿No te alegra que por fin estaremos juntos de nuevo?—Su hermano menor con risa de delfín se acercó a él y lo abrazó, haciendo aún más notoria la diferencia de tamaños.
—¿Ya es un hecho?—Dijo el moreno cuando Chenle deshizo el abrazo.
—Ya es un hecho, comenzaré en agosto ¿no es genial? ¡será como en los viejos tiempos! Yuta y Chenle continúan con sus aventuras.
—Me temo que estarás solo en tus aventuras, Chenle—Yuta caminó hasta su silla acolchonada y tomó asiento.
—Oh hyung...
—Soy un adulto, Zhong—Se cruzó de brazos.
—Hay adultos divertidos ¡Como Johnny hyung! Ah ese hyung sí que sabe cómo divertirse—El peli verde soltó un suspiro recordando el último verano en el que Johnny viajó a Daegu con Yuta.
—Salir por las noches y buscar omegas no es para nada divertido— Se giró a su computadora y encendió en monitor de ella.
—Hyung, ahora que estamos los dos aquí en Seúl podríamos salir y busc-
—Chenle—Se giró y miró a su hermano pequeño sentado en el pequeño sofá marrón.— Si no quise un omega cuando tenía tu edad, créeme que ahora estoy menos interesado en conseguir uno.
—Bien cómo digas—Zhong rodó los ojos—De igual manera ¿está bien si yo me quedó en tu apartamento? —Yuta y su alfa interno querían decirle que no, pero él no era tan malo como para dejar que su hermanito se enfrentara a la ruda Seúl.
—Claro, está demás preguntarme eso, Chenle—Le regaló una sonrisa amable que se borró cuando recordó algo—¡Mi tarta!—Yuta corrió hasta su mochila (que había dejado tirada en el piso recién entró) y sacó de allí un pequeño contenedor de plástico negro.
—¿Tarta?—El alfa peli verde se acercó a él y observó el contenido.—¡Yo quiero!.
—Ni lo sueñes—Yuta pasó de largo y tomó asiento en su silla de nuevo.
—Oh no puedes ser tan mal hyung— Habló a su hermano mayor con los ojos entrecerrados.
—Consigue la tuya.
—Vamos, Yuuuta hyung~ nunca he probado una tarta hecha por ti~
—Ni siquiera la hice yo—Respondió simple.
—¿La compraste? Dime dónde y te traeré una igual, sólo dame un poco.
—Tampoco la compré, alguien la trajo para mi.
—¿Alguien te la regaló?—Preguntó y el más pequeño de estatura asintió— Entonces quédatela, debe tener veneno o purgantes—Rió un poco de su propio chiste.
—¿Qué insinúas?—El alfa se levantó y caminó hacia su hermanito—Hasta la fecha nadie ha querido deshacerse de mi, Zhong. Y para tu información, ayer por la noche un chico la trajo a mi departamento para mí—Eso provocó una risa en el menor.
—¿Un chico la llevó a tu departamento?— Preguntó cuando dejó de reír—Debió haber sido un repartidor—Rió de nuevo y eso irritó a Yuta.
—Yah~ Fue un omega—Chenle seguía sin poder creerlo—Vive en uno de los edificios junto al mío.
—Entonces lo conoceré ¿no es así? — Chenle sonrió de lado—Y dices que es un omega ¿no?.
—Oh no, Zhong ChenLe—Nakamoto lo miró—Mantente alejado de él—Lo miró con los ojos entrecerrados.
—¿Por qué? Yo también quiero una tarta como esa.
—Para tu información, él ya tiene un alfa—Se cruzó de brazos—Así que si quieres evitarte problemas, mantente alejado de ellos ¿entendiste?—Dijo y Zhong rodó los ojos.
—Bien, bien. Iré por mis cosas al hotel en donde me quedé ayer ¿me das la dirección de tu apartamento? Llegaré por ti para ir a comer ¿estás de acuerdo?
—Claro, Johnny comerá con nosotros entonces—Vio que Chenle estiró la mano y Yuta lo miró con una ceja alzada.
—Las llaves de tu coche, hyung— Cerró y abrió su puño frente a él.
—Ugh... sólo regresalo sin rasguños, Zhong.
Le entregó su llavero y este salió del estudio de su hermano mayor con dirección al estacionamiento, visualizó el auto de su hyung y sonrió. Presionó el botón de alarma que estaba en el llavero y los seguros del auto se bajaron.
—Ah~ esto será lo mejor— Dijo emocionado y arrancó el auto con dirección al hotel donde había pasado la noche anterior.
Chenle estacionó el auto de Yuta en el estacionamiento del edificio que sería se hogar a partir de algunos días. Se miró en el espejo que se encontraba en el auto, acomodó su flequillo y miró su sonrisa, Zhong bajó del auto y abrió la cajuela para sacar las dos maletas que había traído desde su hogar. Cerró la cajuela y se dio la vuela, topándose con una cabellera rubia.
—¿Quién eres?—Preguntó con una voz suave el rubio alto.
—¿Acaso eres policía?—Le sonrió ladinamente al omega con el ceño fruncido frente a él.—Podrías arrestarme—Le miró de arriba a bajo sin pudor alguno, lo que molestó al omega.
—¡Hablo en serio!—El omega levantó la voz—¿Quién eres y por qué sales del auto de Yuta hyung?—Habló con los brazos cruzados.
—¡Eres tan adorable!—Gritó el alfa y comenzó a aplastar las mejillas de Sicheng.
—¡Suéltame~!—Gritó Sicheng y Chenle sintió una fuerte presencia que hizo que parara lo que hacía. Alejó lentamente sus manos de las mejillas del rubio y posó su mirada en el chico alto y pelinegro que había llegado.
—¿Qué crees que estás haciendo?— Dijo Lucas con voz neutra y mirada penetrante.
—¿Quién eres tú? ¿acaso en este vecindario todos son así?—Miró a Sicheng.
—No vuelvas a acercarte a él y mucho menos tocarlo ¿queda claro?
—¿Acercarme a él? ¡Él fue quién vino aquí siendo tierno y bonito!—Se quejó Zhong.
—¿Cómo puedes pensar eso de él?— Lucas dio un pasó al frente, pero el brazo de Sicheng lo detuvo.
—Yukhei hyung, e-está bien—Miró a Chenle—É-él tiene razón, yo vine aquí y lo ataqué un poquito—Dijo Sicheng avergonzado por su actitud y la de su hermano frente a ese joven alfa.
—Sicheng... ¿lo atacaste?—El peligro se rió—¿Cómo? ¿con aegyo?—Chenle también rió y Sicheng bajó su cabeza avergonzado nuevamente.
—Yah~ yo sólo quería saber por qué él —Apuntó a Chenle con su dedo índice—Bajaba del auto de Yuta hyung—Se cruzó de brazos esperando una respuesta del peli verde.
—¿Yuta hyung?—Habló Lucas.—Bebé ¿no hay algo que quieras decirme?
—Ustedes dos son tan raros—Chenle tomó sus maletas y caminó hacia la entrada del edificio dejando solos a los hermanos.
—Sicheng—Lucas insistió y Sicheng comenzó a caminar hasta su edificio—¡Dong ven acá!—Lucas usó su voz de mando, pero Sicheng sólo aumentó su velocidad hasta entrar a su edificio y tomar el ascensor.
Cuando Yukhei llegó hasta su departamento, lo primero que notó fue un olor a cebolla asada, así que hasta la cocina y vio a Sicheng parado frente a la estufa.
—Winwinnie ¿Qué pasó allá afuera?—Insistió Yukhei, pero no obtuvo respuesta, así que camino hasta su hermanito y lo tomó por los hombros para girarlo y vio sus ojos y nariz roja.
—Hyung...—Sicheng se refugió en el hombro izquierdo de su hermano y comenzó a llorar sin razón aparente.
Sicheng y su omega sentían su alma partida en dos y su orgullo en el piso.
¿Por qué un chico con olor a omega bajaba del auto de Nakamoto Yuta con dos maletas y chupetones en el cuello?, se repetía Sicheng una y otra vez mientras Lucas intentaba cesar su llanto.
Pero tal vez, sólo tal vez... Chenle había pasado un momento íntimo con la recepcionista del hotel y había dejado su olor en él.